En el epígrafe Biblia vs catecismo, hacían el siguiente aporte que copio a continuación, como lo considero un tema interesante abro este otro epígrafe <?xml:namespace prefix = o ns = "urn:schemas-microsoft-com
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Y yo me pregunto ¿A que esos “distingos”? ¿Por qué esos empeños en “mutilar el Cuerpo del Señor” siendo este Uno? me resulta sorprendente esa manía, como con las “30.000 sectas”. Señores!. La Iglesia es el cuerpo del Señor, del cual Él es su única cabeza. El Cuerpo del Señor, su Iglesia, es Una, indivisible, indisoluble, columna y baluarte de su Verdad, unida en el vinculo perfecto de su Amor, sellados con su Santo Espíritu, edificada por el mismo Señor Jesucristo, formada por todos los que han sido lavados en la preciosa Sangre del Nuevo Pacto, los santos, aquellos que han recibido a Jesús en sus corazones, que han creído en Él, que lo declaran en su corazón y con su boca, como su Único y Suficiente Salvador. Gloria sea a su bendito Nombre, de generación en generación, de tiempo en tiempo, y de eternidad en eternidad.<o></o>
La Iglesia del Señor es siempre triunfante, y no por nuestra fortaleza ni por nuestro meritos, sino porque la Victoria ya la gano Aquel que entrego su vida por nosotros, una vez y para siempre. El hombre fuerte atado esta, “Las Puertas del Hades no prevalecerán contra su Iglesia”, son promesas eternas.<o></o>
El mismo Jesús nos llama a escudriñar las escrituras, veamos, que nos dice la Palabra sobre “peregrinos”.<o></o>
En primer lugar, es llamativo ver quien se dice “peregrina” y cuan maravillosa promesa que aun hemos de ver y gozarnos en ella:<o></o>
“Porque tu tierra devastada, arruinada y desierta, ahora será estrecha por la multitud de los moradores, y tus destruidores serán apartados lejos. Aun los hijos de tu orfandad dirán a tus oídos: Estrecho es para mí este lugar; apártate, para que yo more. Y dirás en tu corazón: ¿Quién me engendró éstos? Porque yo había sido privada de hijos y estaba sola, peregrina y desterrada; ¿quién, pues, crió éstos? He aquí yo había sido dejada sola; ¿dónde estaban éstos?<o></o>
Así dijo Jehová el Señor: He aquí, yo tenderé mi mano a las naciones, y a los pueblos levantaré mi bandera; y traerán en brazos a tus hijos, y tus hijas serán traídas en hombros. Reyes serán tus ayos, y sus reinas tus nodrizas; con el rostro inclinado a tierra te adorarán, y lamerán el polvo de tus pies; y conocerás que yo soy Jehová, que no se avergonzarán los que esperan en mí.<o></o>
¿Será quitado el botín al valiente? ¿Será rescatado el cautivo de un tirano? Pero así dice Jehová: Ciertamente el cautivo será rescatado del valiente, y el botín será arrebatado al tirano; y tu pleito yo lo defenderé, y yo salvaré a tus hijos. Y a los que te despojaron haré comer sus propias carnes, y con su sangre serán embriagados como con vino; y conocerá todo hombre que yo Jehová soy Salvador tuyo y Redentor tuyo, el Fuerte de Jacob. “Isaías 49.19-26<o></o>
Amen.
En cuanto a nosotros, el “único apóstol Pedro que ha habido nunca” nos habla claro:<o></o>
“Por tanto, ceñid los lomos de vuestro entendimiento, sed sobrios, y esperad por completo en la gracia que se os traerá cuando Jesucristo sea manifestado; como hijos obedientes, no os conforméis a los deseos que antes teníais estando en vuestra ignorancia; sino, como aquel que os llamó es santo, sed también vosotros santos en toda vuestra manera de vivir; porque escrito está: Sed santos, porque yo soy santo. Y si invocáis por Padre a aquel que sin acepción de personas juzga según la obra de cada uno, conducíos en temor todo el tiempo de vuestra peregrinación; sabiendo que fuisteis rescatados de vuestra vana manera de vivir, la cual recibisteis de vuestros padres, no con cosas corruptibles, como oro o plata, sino con la sangre preciosa de Cristo, como de un cordero sin mancha y sin contaminación, ya destinado desde antes de la fundación del mundo, pero manifestado en los postreros tiempos por amor de vosotros, y mediante el cual creéis en Dios, quien le resucitó de los muertos y le ha dado gloria, para que vuestra fe y esperanza sean en Dios.<o></o>
Habiendo purificado vuestras almas por la obediencia a la verdad, mediante el Espíritu, para el amor fraternal no fingido, amaos unos a otros entrañablemente, de corazón puro; siendo renacidos, no de simiente corruptible, sino de incorruptible, por la palabra de Dios que vive y permanece para siempre. Porque:<o></o>
Toda carne es como hierba,<o></o>
Y toda la gloria del hombre como flor de la hierba.<o></o>
La hierba se seca, y la flor se cae;
Mas la palabra del Señor permanece para siempre.<o></o>
Y esta es la palabra que por el evangelio os ha sido anunciada.” 1 Ped. 1.13-23<o></o>
Hemos de caminar en nuestra peregrinación, conscientes de quien nos rescato, sabiendo cual es nuestra posición, como la Iglesia del Señor; eso no da para “falsos triunfalismos” y sabemos que en el mundo tendremos aflicción, pero, con el Apóstol Pablo, podremos en todo momento decir:<o></o>
“Pero tenemos este tesoro en vasos de barro, para que la excelencia del poder sea de Dios, y no de nosotros, que estamos atribulados en todo, mas no angustiados; en apuros, mas no desesperados; perseguidos, mas no desamparados; derribados, pero no destruidos; llevando en el cuerpo siempre por todas partes la muerte de Jesús, para que también la vida de Jesús se manifieste en nuestros cuerpos” 2 Cor. 4.7-10<o></o>
Veamos a que más nos exhorta Pedro:<o></o>
“Amados, yo os ruego como a extranjeros y peregrinos, que os abstengáis de los deseos carnales que batallan contra el alma, 12manteniendo buena vuestra manera de vivir entre los gentiles; para que en lo que murmuran de vosotros como de malhechores, glorifiquen a Dios en el día de la visitación, al considerar vuestras buenas obras.” 1 Ped. 2.11-12<o></o>
Pero la pregunta es ¿Tenemos ya una Patria?<o></o>
“Conforme a la fe murieron todos éstos sin haber recibido lo prometido, sino mirándolo de lejos, y creyéndolo, y saludándolo, y confesando que eran extranjeros y peregrinos sobre la tierra.<SUP> </SUP>Porque los que esto dicen, claramente dan a entender que buscan una patria;<SUP> </SUP>pues si hubiesen estado pensando en aquella de donde salieron, ciertamente tenían tiempo de volver.<SUP> </SUP>Pero anhelaban una mejor, esto es, celestial; por lo cual Dios no se avergüenza de llamarse Dios de ellos; porque les ha preparado una ciudad.” Heb. 11.13-16<o></o>
Tenemos una Patria y un Reino que ya ha ganado para nosotros, Nuestro Señor Jesucristo. <o></o>
Solo una iglesia... la que Él va a venir a buscar<o></o>
“No se turbe vuestro corazón; creéis en Dios, creed también en mí. En la casa de mi Padre muchas moradas hay; si así no fuera, yo os lo hubiera dicho; voy, pues, a preparar lugar para vosotros. Y si me fuere y os preparare lugar, vendré otra vez, y os tomaré a mí mismo, para que donde yo estoy, vosotros también estéis. Y sabéis a dónde voy, y sabéis el camino” Juan 14.1-4
Esa es nuestra esperanza..., ancla de nuestra alma, sujeta en el lugar Santísimo(Heb. 6.19), y sabemos que no seremos avergonzados, los “peregrinos” los que caminan como si no tuvieran aquí “ciudad permanente, sino que buscan la por venir” (Heb 13.14), los que aman su venida.
Maranatha
Ven Señor Jesús
<o> </o>
PD. Y yo me pregunto... si a alguien le convencen de que hay 2 iglesias, entonces, esa persona ¿Podría creerse que hay 2 santos padres, 2 cabezas de la iglesia, dos vicarios de Cristo en la tierra?... creo que voy entendiendo...
fficeffice" /><o></o>un católico que aprecio dijo:
<oun católico que aprecio dijo:
></o>Y yo me pregunto ¿A que esos “distingos”? ¿Por qué esos empeños en “mutilar el Cuerpo del Señor” siendo este Uno? me resulta sorprendente esa manía, como con las “30.000 sectas”. Señores!. La Iglesia es el cuerpo del Señor, del cual Él es su única cabeza. El Cuerpo del Señor, su Iglesia, es Una, indivisible, indisoluble, columna y baluarte de su Verdad, unida en el vinculo perfecto de su Amor, sellados con su Santo Espíritu, edificada por el mismo Señor Jesucristo, formada por todos los que han sido lavados en la preciosa Sangre del Nuevo Pacto, los santos, aquellos que han recibido a Jesús en sus corazones, que han creído en Él, que lo declaran en su corazón y con su boca, como su Único y Suficiente Salvador. Gloria sea a su bendito Nombre, de generación en generación, de tiempo en tiempo, y de eternidad en eternidad.<o
></o>La Iglesia del Señor es siempre triunfante, y no por nuestra fortaleza ni por nuestro meritos, sino porque la Victoria ya la gano Aquel que entrego su vida por nosotros, una vez y para siempre. El hombre fuerte atado esta, “Las Puertas del Hades no prevalecerán contra su Iglesia”, son promesas eternas.<o
></o>El mismo Jesús nos llama a escudriñar las escrituras, veamos, que nos dice la Palabra sobre “peregrinos”.<o
></o>En primer lugar, es llamativo ver quien se dice “peregrina” y cuan maravillosa promesa que aun hemos de ver y gozarnos en ella:<o
></o>“Porque tu tierra devastada, arruinada y desierta, ahora será estrecha por la multitud de los moradores, y tus destruidores serán apartados lejos. Aun los hijos de tu orfandad dirán a tus oídos: Estrecho es para mí este lugar; apártate, para que yo more. Y dirás en tu corazón: ¿Quién me engendró éstos? Porque yo había sido privada de hijos y estaba sola, peregrina y desterrada; ¿quién, pues, crió éstos? He aquí yo había sido dejada sola; ¿dónde estaban éstos?<o
></o>Así dijo Jehová el Señor: He aquí, yo tenderé mi mano a las naciones, y a los pueblos levantaré mi bandera; y traerán en brazos a tus hijos, y tus hijas serán traídas en hombros. Reyes serán tus ayos, y sus reinas tus nodrizas; con el rostro inclinado a tierra te adorarán, y lamerán el polvo de tus pies; y conocerás que yo soy Jehová, que no se avergonzarán los que esperan en mí.<o
></o>¿Será quitado el botín al valiente? ¿Será rescatado el cautivo de un tirano? Pero así dice Jehová: Ciertamente el cautivo será rescatado del valiente, y el botín será arrebatado al tirano; y tu pleito yo lo defenderé, y yo salvaré a tus hijos. Y a los que te despojaron haré comer sus propias carnes, y con su sangre serán embriagados como con vino; y conocerá todo hombre que yo Jehová soy Salvador tuyo y Redentor tuyo, el Fuerte de Jacob. “Isaías 49.19-26<o
></o>Amen.
En cuanto a nosotros, el “único apóstol Pedro que ha habido nunca” nos habla claro:<o
></o>“Por tanto, ceñid los lomos de vuestro entendimiento, sed sobrios, y esperad por completo en la gracia que se os traerá cuando Jesucristo sea manifestado; como hijos obedientes, no os conforméis a los deseos que antes teníais estando en vuestra ignorancia; sino, como aquel que os llamó es santo, sed también vosotros santos en toda vuestra manera de vivir; porque escrito está: Sed santos, porque yo soy santo. Y si invocáis por Padre a aquel que sin acepción de personas juzga según la obra de cada uno, conducíos en temor todo el tiempo de vuestra peregrinación; sabiendo que fuisteis rescatados de vuestra vana manera de vivir, la cual recibisteis de vuestros padres, no con cosas corruptibles, como oro o plata, sino con la sangre preciosa de Cristo, como de un cordero sin mancha y sin contaminación, ya destinado desde antes de la fundación del mundo, pero manifestado en los postreros tiempos por amor de vosotros, y mediante el cual creéis en Dios, quien le resucitó de los muertos y le ha dado gloria, para que vuestra fe y esperanza sean en Dios.<o
></o>Habiendo purificado vuestras almas por la obediencia a la verdad, mediante el Espíritu, para el amor fraternal no fingido, amaos unos a otros entrañablemente, de corazón puro; siendo renacidos, no de simiente corruptible, sino de incorruptible, por la palabra de Dios que vive y permanece para siempre. Porque:<o
></o>Toda carne es como hierba,<o
></o>Y toda la gloria del hombre como flor de la hierba.<o
></o>La hierba se seca, y la flor se cae;
Mas la palabra del Señor permanece para siempre.<o
></o>Y esta es la palabra que por el evangelio os ha sido anunciada.” 1 Ped. 1.13-23<o
></o>Hemos de caminar en nuestra peregrinación, conscientes de quien nos rescato, sabiendo cual es nuestra posición, como la Iglesia del Señor; eso no da para “falsos triunfalismos” y sabemos que en el mundo tendremos aflicción, pero, con el Apóstol Pablo, podremos en todo momento decir:<o
></o>“Pero tenemos este tesoro en vasos de barro, para que la excelencia del poder sea de Dios, y no de nosotros, que estamos atribulados en todo, mas no angustiados; en apuros, mas no desesperados; perseguidos, mas no desamparados; derribados, pero no destruidos; llevando en el cuerpo siempre por todas partes la muerte de Jesús, para que también la vida de Jesús se manifieste en nuestros cuerpos” 2 Cor. 4.7-10<o
></o>Veamos a que más nos exhorta Pedro:<o
></o>“Amados, yo os ruego como a extranjeros y peregrinos, que os abstengáis de los deseos carnales que batallan contra el alma, 12manteniendo buena vuestra manera de vivir entre los gentiles; para que en lo que murmuran de vosotros como de malhechores, glorifiquen a Dios en el día de la visitación, al considerar vuestras buenas obras.” 1 Ped. 2.11-12<o
></o>Pero la pregunta es ¿Tenemos ya una Patria?<o
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></o>Tenemos una Patria y un Reino que ya ha ganado para nosotros, Nuestro Señor Jesucristo. <o
></o>Solo una iglesia... la que Él va a venir a buscar<o
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Esa es nuestra esperanza..., ancla de nuestra alma, sujeta en el lugar Santísimo(Heb. 6.19), y sabemos que no seremos avergonzados, los “peregrinos” los que caminan como si no tuvieran aquí “ciudad permanente, sino que buscan la por venir” (Heb 13.14), los que aman su venida.
Maranatha
Ven Señor Jesús
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> </o>PD. Y yo me pregunto... si a alguien le convencen de que hay 2 iglesias, entonces, esa persona ¿Podría creerse que hay 2 santos padres, 2 cabezas de la iglesia, dos vicarios de Cristo en la tierra?... creo que voy entendiendo...
