IGLESIA CATÓLICA Y GOBIERNO ULTIMAN UN ACUERDO PARA QUE LA RELIGIÓN Y SU ALTERNATIVA SEAN OBLIGATORIAS
El Gobierno ultima un acuerdo con el Episcopado católico para resolver la
cuestión de la clase de Religión. Esa materia y su alternativa serían
obligatorias y evaluables, agrupadas en una asignatura llamada Cultura y
Religión. El modelo, pues, es similar al de la Lengua Extranjera, donde el
alumno puede escoger entre varios idiomas.
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<< MADRID, 4 mayo 2002. Las conversaciones entre Ejecutivo e Iglesia
católica para la resolución del conflicto de la enseñanza religiosa escolar
durante los últimos meses han sido calificadas como 'muy positivas' en el
seno de la Conferencia Episcopal. Tanto es así que, a finales del año
pasado, numerosos expertos vislumbraban seriamente la posibilidad de que la
reforma de la clase de Religión pudiera hacerse realidad dentro del
anteproyecto de ley de Calidad.>>
=== No obstante, y pese a la disposición favorable de ambas partes, la
presentación de la ley de Calidad puso de manifiesto que, al menos por el
momento, no se preveía un acuerdo definitivo. Las conversaciones parecían
haber sufrido un parón cuando, a finales del pasado mes de febrero, se
produjo la visita a nuestro país del cardenal Tauran, responsable de
relaciones con los Estados del Vaticano. Durante su visita, el purpurado
francés se entrevistó con José María Aznar y con la ministra de Educación,
Pilar del Castillo, ante quienes manifestó su pesar por lo que consideraba
'situación ilegal, que resulta discriminatoria para los jóvenes que eligen
esta asignatura'.
=== El mensaje del Vaticano supuso un importante punto de inflexión en las
relaciones Iglesia católica-Estado hasta el punto de que Ejecutivo y
jerarquía eclesial se han puesto de acuerdo en las líneas básicas de la
reforma de la clase de Religión. Según confirman fuentes cercanas a la
negociación, dicha reforma prevé la vuelta de esta asignatura a parámetros
similares a antes de 1994. Es decir, que tanto la materia de Religión como
su alternativa sean equiparadas al resto de asignaturas, concediéndoles la
condición de obligatorias y evaluables, aunque se baraja la posibilidad de
que la calificación que obtenga el alumno no tenga consecuencias académicas.
Así, los escolares de Primaria y Secundaria tendrán obligación de elegir
entre Religión o la alternativa que se plantee, dentro de la asignatura
global Cultura y Religión.
=== Uno de los puntos que todavía queda por definir es la configuración de
la alternativa a la clase de Religión, de modo que no se produzca la
situación actual (clases de apoyo, parchís, recreo...). Entre las propuestas
que se barajan se incluye la posibilidad de crear una asignatura sobre el
hecho religioso desde una perspectiva cultural. También se ha hablado de una
clase sobre 'valores cívicos', aunque esta posibilidad pierde fuerza en las
últimas conversaciones.
=== La encuesta del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), hecha
pública la semana pasada, terminó con ciertas reticencias por parte del
Ejecutivo: el 82,5 por ciento de los españoles se mostraban a favor de que
los centros públicos impartan clase de Religión a los alumnos que lo
desearan. Asimismo, los últimos datos mostraban cómo el 76,1 por ciento del
alumnado optaba por esta asignatura, pese a no ser evaluable.
Fuente: Abc
Redacción: ICPress
El Gobierno ultima un acuerdo con el Episcopado católico para resolver la
cuestión de la clase de Religión. Esa materia y su alternativa serían
obligatorias y evaluables, agrupadas en una asignatura llamada Cultura y
Religión. El modelo, pues, es similar al de la Lengua Extranjera, donde el
alumno puede escoger entre varios idiomas.
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<< MADRID, 4 mayo 2002. Las conversaciones entre Ejecutivo e Iglesia
católica para la resolución del conflicto de la enseñanza religiosa escolar
durante los últimos meses han sido calificadas como 'muy positivas' en el
seno de la Conferencia Episcopal. Tanto es así que, a finales del año
pasado, numerosos expertos vislumbraban seriamente la posibilidad de que la
reforma de la clase de Religión pudiera hacerse realidad dentro del
anteproyecto de ley de Calidad.>>
=== No obstante, y pese a la disposición favorable de ambas partes, la
presentación de la ley de Calidad puso de manifiesto que, al menos por el
momento, no se preveía un acuerdo definitivo. Las conversaciones parecían
haber sufrido un parón cuando, a finales del pasado mes de febrero, se
produjo la visita a nuestro país del cardenal Tauran, responsable de
relaciones con los Estados del Vaticano. Durante su visita, el purpurado
francés se entrevistó con José María Aznar y con la ministra de Educación,
Pilar del Castillo, ante quienes manifestó su pesar por lo que consideraba
'situación ilegal, que resulta discriminatoria para los jóvenes que eligen
esta asignatura'.
=== El mensaje del Vaticano supuso un importante punto de inflexión en las
relaciones Iglesia católica-Estado hasta el punto de que Ejecutivo y
jerarquía eclesial se han puesto de acuerdo en las líneas básicas de la
reforma de la clase de Religión. Según confirman fuentes cercanas a la
negociación, dicha reforma prevé la vuelta de esta asignatura a parámetros
similares a antes de 1994. Es decir, que tanto la materia de Religión como
su alternativa sean equiparadas al resto de asignaturas, concediéndoles la
condición de obligatorias y evaluables, aunque se baraja la posibilidad de
que la calificación que obtenga el alumno no tenga consecuencias académicas.
Así, los escolares de Primaria y Secundaria tendrán obligación de elegir
entre Religión o la alternativa que se plantee, dentro de la asignatura
global Cultura y Religión.
=== Uno de los puntos que todavía queda por definir es la configuración de
la alternativa a la clase de Religión, de modo que no se produzca la
situación actual (clases de apoyo, parchís, recreo...). Entre las propuestas
que se barajan se incluye la posibilidad de crear una asignatura sobre el
hecho religioso desde una perspectiva cultural. También se ha hablado de una
clase sobre 'valores cívicos', aunque esta posibilidad pierde fuerza en las
últimas conversaciones.
=== La encuesta del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), hecha
pública la semana pasada, terminó con ciertas reticencias por parte del
Ejecutivo: el 82,5 por ciento de los españoles se mostraban a favor de que
los centros públicos impartan clase de Religión a los alumnos que lo
desearan. Asimismo, los últimos datos mostraban cómo el 76,1 por ciento del
alumnado optaba por esta asignatura, pese a no ser evaluable.
Fuente: Abc
Redacción: ICPress