IDENTIDAD FEMENINA
La mujer femenina se siente bien en el mundo, se siente totalmente segura tanto consigo misma como con su novio o esposo. Ella está muy satisfecha de ser una mujer con todos sus deberes y responsabilidades."
No puede imaginarse cómo sería el ser hombre ni tiene el menor interés en serlo. La existencia de su esposo o novio basta para hacer del mundo un lugar seguro para ella. Esa búsqueda de seguridad la ayuda a elegir un buen esposo, no importa si es profesional, obrero, educado o no, rico o pobre, guapo o de apariencia común. El es apasionado y leal, un buen compañero y un excelente padre para sus hijos, hay en ella un profundo deleite en dar y darse a sí misma a quienes la aman. Los psiquiatras consideran esta cualidad la marca de la verdadera femineidad. La llaman la verdadera esencia de la femineidad. Esto también tiene sus raíces en la ideología de la mujer. La mujer femenina nunca piensa en esto como una carga. Esto la motiva a conservar su equilibrio y a mantener su alegría de vivir.
La mujer femenina es muy religiosa aunque no lo sea en apariencia, tiene una firme convicción de la existencia del creador, y le agradece por ser mujer.
Proverbios 31:10 Mujer virtuosa, ¿quién la hallará? Porque su valor sobrepasa a las perlas.
Una mujer así vale más que las demás porque su atención no está en las cosas materiales ni en su propia hermosura, sino en agradar al Señor. No es imposible ser como ella, antes bien, está al alcance de toda mujer que ponga a Dios en primer lugar en su vida, y acomode el resto de sus prioridades alrededor de El, en el orden correcto de acuerdo al diseño de Dios. Sus hechos hablarán a grandes voces acerca de lo que está en su corazón. Al fin y al cabo, la fe sin obras está muerta (Stgo 2:26), y las obras realizadas por la razón equivocada no valen nada. Que la motivación de nuestra vida sea hacer las cosas de la manera que le agraden a Dios, sabiendo que hacer Su voluntad es la mejor manera de vivir y contarnos dichosas. "Y todo lo que hagáis, hacedlo de corazón, como para el Señor y no para los hombres; sabiendo que del Señor recibiréis la recompensa de la herencia, porque a Cristo el Señor servís" (Col 3:23,24).
Chicas agradecer al Creador por habernos hecho mujer es un privilegio. ¿amén? Amén.
Gracias.
La mujer femenina se siente bien en el mundo, se siente totalmente segura tanto consigo misma como con su novio o esposo. Ella está muy satisfecha de ser una mujer con todos sus deberes y responsabilidades."
No puede imaginarse cómo sería el ser hombre ni tiene el menor interés en serlo. La existencia de su esposo o novio basta para hacer del mundo un lugar seguro para ella. Esa búsqueda de seguridad la ayuda a elegir un buen esposo, no importa si es profesional, obrero, educado o no, rico o pobre, guapo o de apariencia común. El es apasionado y leal, un buen compañero y un excelente padre para sus hijos, hay en ella un profundo deleite en dar y darse a sí misma a quienes la aman. Los psiquiatras consideran esta cualidad la marca de la verdadera femineidad. La llaman la verdadera esencia de la femineidad. Esto también tiene sus raíces en la ideología de la mujer. La mujer femenina nunca piensa en esto como una carga. Esto la motiva a conservar su equilibrio y a mantener su alegría de vivir.
La mujer femenina es muy religiosa aunque no lo sea en apariencia, tiene una firme convicción de la existencia del creador, y le agradece por ser mujer.
Proverbios 31:10 Mujer virtuosa, ¿quién la hallará? Porque su valor sobrepasa a las perlas.
Una mujer así vale más que las demás porque su atención no está en las cosas materiales ni en su propia hermosura, sino en agradar al Señor. No es imposible ser como ella, antes bien, está al alcance de toda mujer que ponga a Dios en primer lugar en su vida, y acomode el resto de sus prioridades alrededor de El, en el orden correcto de acuerdo al diseño de Dios. Sus hechos hablarán a grandes voces acerca de lo que está en su corazón. Al fin y al cabo, la fe sin obras está muerta (Stgo 2:26), y las obras realizadas por la razón equivocada no valen nada. Que la motivación de nuestra vida sea hacer las cosas de la manera que le agraden a Dios, sabiendo que hacer Su voluntad es la mejor manera de vivir y contarnos dichosas. "Y todo lo que hagáis, hacedlo de corazón, como para el Señor y no para los hombres; sabiendo que del Señor recibiréis la recompensa de la herencia, porque a Cristo el Señor servís" (Col 3:23,24).
Chicas agradecer al Creador por habernos hecho mujer es un privilegio. ¿amén? Amén.
Gracias.