Hola, bendiciones; de la manera que Abraham oró e intercedió por la ciudad de Sodoma en los tiempos de su ministerio terrenal, así se hace necesario que como hijos de la misma fe que el Patriarca tuvo, apartemos un pequeño tiempo de oración e intercesión por la nación de EE.UU , Y en especial por aquellos lugares por donde hará en breves momentos su entrada un poderoso huracán que con toda probabilidad afectará a la vida normal de los ciudadanos de aquel lugar entre los cuales se cuentan numerosos hermanos y hermanas en la común fe en el evangelio de nuestro Señor Jesucristo.
Padre Santo , en ésta hora, te rogamos por la nación de EE.UU y por la prueba que numerosos millones de ciudadanos tendrán que enfrentar en breve; pedimos tu proteccción sobre las vidas de las personas, y que de haber, solo haya pérdidas materiales; Señor, dí la Palabra para que el daño sea mínimo, de la manera en que hablaste al apóstol Pablo en medio de la tempestad en el mar, donde le diste ánimos y aliento al decirle: " no temas....Dios te ha concedido todos los que navegan contigo". Es por ello que te pedimos que tu concedas las vidas de todos aquellos que én éste tiempo han de pasar por la prueba de éste fenómeno natural sobre el que además sabemos que tu tienes potestad para reprenderlo y para que la tormente se vuelva en calma. Padre reprende éste huracán, y que por amor de tu Nombre y de los escogidos, se vuelva por donde ha venido; pedimos un giro inmediato del mismo para que no dañe a ésta nación que también nosotros tenemos en nuestro corazón; no en vano, tu eres CABEZA de las naciones, y todo está sometido a ti, eternamente y para siempre. Gracias Padre Santo, por habernos oido. Amén.
PERFUMISTA
Padre Santo , en ésta hora, te rogamos por la nación de EE.UU y por la prueba que numerosos millones de ciudadanos tendrán que enfrentar en breve; pedimos tu proteccción sobre las vidas de las personas, y que de haber, solo haya pérdidas materiales; Señor, dí la Palabra para que el daño sea mínimo, de la manera en que hablaste al apóstol Pablo en medio de la tempestad en el mar, donde le diste ánimos y aliento al decirle: " no temas....Dios te ha concedido todos los que navegan contigo". Es por ello que te pedimos que tu concedas las vidas de todos aquellos que én éste tiempo han de pasar por la prueba de éste fenómeno natural sobre el que además sabemos que tu tienes potestad para reprenderlo y para que la tormente se vuelva en calma. Padre reprende éste huracán, y que por amor de tu Nombre y de los escogidos, se vuelva por donde ha venido; pedimos un giro inmediato del mismo para que no dañe a ésta nación que también nosotros tenemos en nuestro corazón; no en vano, tu eres CABEZA de las naciones, y todo está sometido a ti, eternamente y para siempre. Gracias Padre Santo, por habernos oido. Amén.
PERFUMISTA