Dios los bendiga. Alguien parafraseo al célebre "If" de Kipling dando forma a un consejo muy práctico y bello:
"Si puedes conservarte puro cuando a tu alrededor nadie lo intente y se burlen de tu entereza. Si mantienes tu fe en Dios cuando todos se olvidan de Él, y pides que en ellos se restablezca la confianza. Si no pierdes la esperanza que mantiene siempre sereno. Si pueedes, siendo blanco de falsedades, perdonar a quienes te calumnian, esgrimiendo siempre la verdad. Si puedes, siendo odiado, contestar al mal con bien, sin creerte por ello demasiado bondadoso. Si aún frente al éxito mantienes la humildad. Si puedes razonar sin que tu intelecto se envanezca. Si puedes encarar el triunfo sin ensoberbecerte, y el desastre sin perder la paciencia. Si puedes caminar hacia la meta, sabiendo que acá no llegarás y comprendes que mientras camines, estás virtualmente en ella. Si eres capaz de juntar en un sólo haz todos tus triunfos y ofrecerlos al Señor como prenda de obediencia. Si puedes obligar a tu corazón, a tus fibras, y a tus nervios que no sucumban a la tentación y que la oración te mantenga gritando: ¡Bríndate, es la orden! Si puedes hablar, aún con multitudes, trasuntando tu paz interior. Si a nadie quieres hacerle daño. Si Dios y los hombres pueden contar contigo sin que nunca pienses: ¡Ya dí bastante! Si puedes llenar cada minuto de sesenta segundos de piedad, tuyo será vida y cuanto ella depara. Y, lo que importa más, serás cristiano, hijo mío.
Estos valores no sólo son cristianos, sino que alcanzan a todos los hombres de buena voluntad.
Y lo más importante: Ponerlos en práctica..
DIOS LOS BENDIGA
"Si puedes conservarte puro cuando a tu alrededor nadie lo intente y se burlen de tu entereza. Si mantienes tu fe en Dios cuando todos se olvidan de Él, y pides que en ellos se restablezca la confianza. Si no pierdes la esperanza que mantiene siempre sereno. Si pueedes, siendo blanco de falsedades, perdonar a quienes te calumnian, esgrimiendo siempre la verdad. Si puedes, siendo odiado, contestar al mal con bien, sin creerte por ello demasiado bondadoso. Si aún frente al éxito mantienes la humildad. Si puedes razonar sin que tu intelecto se envanezca. Si puedes encarar el triunfo sin ensoberbecerte, y el desastre sin perder la paciencia. Si puedes caminar hacia la meta, sabiendo que acá no llegarás y comprendes que mientras camines, estás virtualmente en ella. Si eres capaz de juntar en un sólo haz todos tus triunfos y ofrecerlos al Señor como prenda de obediencia. Si puedes obligar a tu corazón, a tus fibras, y a tus nervios que no sucumban a la tentación y que la oración te mantenga gritando: ¡Bríndate, es la orden! Si puedes hablar, aún con multitudes, trasuntando tu paz interior. Si a nadie quieres hacerle daño. Si Dios y los hombres pueden contar contigo sin que nunca pienses: ¡Ya dí bastante! Si puedes llenar cada minuto de sesenta segundos de piedad, tuyo será vida y cuanto ella depara. Y, lo que importa más, serás cristiano, hijo mío.
Estos valores no sólo son cristianos, sino que alcanzan a todos los hombres de buena voluntad.
Y lo más importante: Ponerlos en práctica..
DIOS LOS BENDIGA