Humildad es reconocer que Dios es tan grande, amante y verdadero que nos ha hecho partícipes de su vida inmortal, y no solamente eso, también seres creadores, que aunque torpes, sabemos hacer cosas muy bonitas y chulas con la materia creada en este mundo. Sin Dios nada es posible, sin nosotros la Vida carecería de sentido, nosotros damos sentido a la vida, y la Vida lo recibe con los brazos abiertos.