Re: EL VERDADERO ESTADO DE LOS MUERTOS
Resurrección
Esperanza de resurrección claramente expuesta en la Biblia
Heb. 6:1, 2 “Ya que hemos dejado la doctrina primaria acerca del Cristo, pasemos adelante a la madurez, no poniendo de nuevo un fundamento, a saber, arrepentimiento de obras muertas . . . la resurrección de los muertos.”
Isa. 25:8 “Él realmente se tragará a la muerte para siempre, y el Señor Jehová ciertamente limpiará las lágrimas de todo rostro.”
Escrituras Hebreas precristianas se refieren a esperanza de resurrección
Isa. 26:19 “Tus muertos vivirán. Cadáver mío... se levantarán. ¡Despierten y clamen gozosamente, residentes del polvo! Porque su rocío es como el rocío de malvas, y la tierra misma dejará que aun los que están impotentes en la muerte caigan en nacimiento.”
Job 14:13 “¡Oh que en el Seol me ocultases, que me mantuvieses secreto hasta que tu cólera se volviera atrás, que me fijaras un límite de tiempo y te acordaras de mí!”
Mat. 22:31, 32 “Respecto a la resurrección de los muertos, ¿no leyeron lo que les habló Dios al decir: ‘Yo soy el Dios de Abrahán y el Dios de Isaac y el Dios de Jacob’? Él no es Dios de muertos, sino de vivos.” (Vea también Luc. 20:37, 38; Éxo. 3:6.)
Dan. 12:13 “En cuanto a ti mismo, ve hacia el fin; y descansarás, pero te pondrás de pie para tu porción al fin de los días.”
Vea también 1 Sam. 2:6; Heb. 11:17-19.
Registro de personas levantadas de entre los muertos antes de la era común
1 Rey. 17:22-24 “Jehová escuchó la voz de Elías, de modo que el alma del niño volvió dentro de él y él llegó a vivir. Elías ahora tomó al niño y lo bajó desde la cámara del techo hasta dentro de la casa y se lo dio a su madre; y entonces dijo Elías: ‘Mira, tú hijo está vivo.’ Ante esto, la mujer le dijo a Elías: ‘Ahora, pues, sí sé que tú eres un hombre de Dios y que la palabra de Jehová en tu boca es verdad.’”
2 Rey. 13:20, 21 “Murió Eliseo y lo enterraron. Y había partidas merodeadoras de los moabitas que penetraban en el país con regularidad a la entrada del año. Y aconteció que mientras estaban enterrando a un hombre, pues, aquí vieron la partida merodeadora. Al punto arrojaron al hombre en la sepultura de Eliseo y se fueron. Cuando el hombre tocó los huesos de Eliseo, inmediatamente llegó a vivir y se levantó sobre sus pies.”
Heb. 11:35 “Mujeres recibieron a sus muertos por resurrección.”
Vea también 2 Rey. 4:17-37.
Escrituras Griegas Cristianas claramente enseñan la resurrección
Juan 6:39, 40 “Esta es la voluntad del que me envió, que no pierda nada de todo lo que me ha dado, sino que lo resucite en el último día. Porque ésta es la voluntad de mi Padre, que todo el que contempla al Hijo y ejerce fe en él tenga vida eterna, y yo lo resucitaré en el último día.”
Juan 11:23, 24 “Jesús le dijo: ‘Tu hermano se levantará.’ Marta le dijo: ‘Yo sé que se levantará en la resurrección en el último día.’”
Luc. 20:35, 36 “Los que han sido considerados dignos de ganar aquel sistema de cosas y la resurrección de entre los muertos ni se casan, ni se dan en matrimonio. De hecho, tampoco pueden ya morir, porque son como los ángeles, y son hijos de Dios por ser hijos de la resurrección.”
Registro de personas levantadas de entre los muertos por Cristo y sus apóstoles
Juan 11:38, 39, 43-45 “Jesús . . . vino a la tumba conmemorativa. Era, de hecho, una cueva, y una piedra estaba recostada contra ella. Dijo Jesús: ‘Quiten la piedra.’ Marta, la hermana del fallecido, le dijo: ‘Señor, ya debe heder, porque hace cuatro días que está muerto.’ . . . clamó con fuerte voz: ‘¡Lázaro, sal!’ El hombre que había estado muerto salió con los pies y manos envueltos con envolturas, y su semblante estaba envuelto en un paño. Jesús les dijo: ‘Desátenlo y déjenlo ir.’ Por eso muchos de los judíos que habían venido a María y que contemplaron lo que él hizo pusieron fe en él.”
Luc. 7:11-15 “Viajó a una ciudad llamada Naín, y sus discípulos y una grande muchedumbre viajaban con él. Al acercarse él a la puerta de la ciudad, pues ¡mira! sacaban a un muerto, el hijo unigénito de su madre. Además, ella era viuda. También estaba con ella una muchedumbre bastante numerosa de la ciudad. Y cuando alcanzó a verla el Señor, se enterneció por ella, y le dijo: ‘Deja de llorar.’ En seguida se acercó y tocó el féretro, y los que lo llevaban se detuvieron, y dijo: ‘Joven, yo te digo: ¡Levántate!’ Y el muerto se incorporó y comenzó a hablar, y se lo dio a su madre.”
Hech. 9:36-41 “En Jope había cierta discípula de nombre Tabita . . . Mas en aquellos días sucedió que enfermó y murió. De modo que la lavaron y la pusieron en un aposento de arriba. Ahora bien, como Lida estaba cerca de Jope, cuando los discípulos oyeron que Pedro estaba en esta ciudad despacharon dos varones a él para suplicarle: ‘Por favor no vaciles en venir hasta donde estamos.’ Con eso Pedro se levantó y fue con ellos. Y cuando llegó, lo condujeron al aposento de arriba . . . Pero Pedro hizo salir a todos y, doblando las rodillas, oró, y, volviéndose hacia el cuerpo, dijo: ‘¡Tabita, levántate!’ Ella abrió los ojos y, alcanzando a ver a Pedro, se incorporó. Dándole la mano, levantó, y llamó a los santos las viudas y la presentó viva.”
Vea también Mat. 9:18-26; Hech. 20:7-12.
La resurrección de Cristo a vida celestial abre el camino para que otros sean levantados de entre los muertos
1 Cor. 15:12, 20, 21 “Ahora bien, si de Cristo se está predicando que él ha sido levantado de entre los muertos, ¿cómo es que algunos entre ustedes dicen que no hay resurrección de los muertos? Sin embargo, ahora Cristo ha sido levantado de entre los muertos, las primicias de los que se han dormido en la muerte. Pues dado que la muerte es por medio de un hombre, la resurrección de los muertos también es por medio de un hombre.”
2 Cor. 4:13, 14 “Ahora bien, porque tenemos el mismo espíritu de fe como aquel del cual está escrito: ‘Ejercí fe, por eso hablé,’ nosotros también ejercemos fe y por eso hablamos, sabiendo que el que levantó a Jesús nos levantará también a nosotros junto con Jesús y nos presentará juntamente con ustedes.”
Hech. 17:31 “Ha fijado un día en que se propone juzgar a la tierra habitada con justicia por un varón a quien él ha nombrado, y ha proporcionado a todos los hombres la garantía con haberlo resucitado de entre los muertos.”
Vea también 1 Ped. 3:18.
Más de 500 fueron testigos del hecho de que Cristo fue resucitado
1 Cor. 15:3-8 “Les entregué a ustedes, entre las primeras cosas, lo que yo también recibí, que Cristo murió por nuestros pecados según las Escrituras; y que fue enterrado, sí, que ha sido levantado al tercer día según las Escrituras; y que se le apareció a Cefas, entonces a los doce. Después de eso se les apareció a más de quinientos hermanos de una vez, de los cuales la mayoría permanece hasta ahora, pero algunos se han dormido en la muerte. Después de eso se le apareció a Santiago, luego a todos los apóstoles; mas último de todos también se apareció a mí como si fuera a uno nacido prematuramente.”
Hech. 2:32 “A este Jesús lo resucitó Dios, del cual hecho todos nosotros somos testigos.”
Vea también Mat. 28:1-10, 16, 17.
El “rebaño pequeño” participará en la resurrección al reino celestial
Luc. 12:32 “No teman, rebaño pequeño, porque su Padre ha aprobado darles el reino.”
1 Cor. 15:49, 50 “Así como hemos llevado la imagen de aquel hecho de polvo, llevaremos también la imagen del celestial. Sin embargo, esto digo, hermanos, que carne y sangre no pueden heredar el reino de Dios, ni tampoco la corrupción hereda la incorrupción.”
Rom. 6:5 “Si hemos sido unidos con él en la semejanza de su muerte, ciertamente también seremos unidos con él en la semejanza de su resurrección.”
1 Ped. 1:3, 4 “Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, porque según su gran misericordia nos dio un nuevo nacimiento a una esperanza viva mediante la resurrección de Jesucristo de entre los muertos, a una herencia incorruptible e incontaminada e inmarcesible. Está reservada en los cielos para ustedes.”
Rev. 20:4, 5 “Vi tronos, y hubo quienes se sentaron sobre ellos, y se les dio poder para juzgar. Sí, vi las almas de los que fueron ejecutados con hacha por el testimonio que dieron de Jesús y por hablar acerca de Dios . . . Y llegaron a vivir y gobernaron como reyes con el Cristo por mil años. . . . Esta es la primera resurrección.”
Vea también el encabezamiento principal “Congregación de Dios,” páginas 111-115.
Los que ya están muertos en unión con Cristo se levantan primero durante la segunda presencia de Cristo
1 Tes. 4:15, 16 “Esto es lo que les decimos por palabra de Jehová, que nosotros los vivientes que sobrevivamos hasta la presencia del Señor no precederemos de ninguna manera a los que se han dormido en la muerte; porque el Señor mismo descenderá del cielo con una llamada imperativa, con voz de arcángel y con trompeta de Dios, y los que están muertos en unión con Cristo se levantarán primero.”
1 Cor. 15:22, 23 “Así como en Adán todos están muriendo, así también en el Cristo todos serán vivificados. Pero cada uno en su propia categoría: Cristo las primicias, después los que pertenecen al Cristo durante su presencia.”
Los que todavía están vivos al tiempo de la presencia del Señor no duermen en muerte, sino que son levantados instantáneamente al fin de su vida terrestre
1 Cor. 15:51-53 “Les digo un secreto sagrado: No todos nos dormiremos en la muerte, pero todos seremos cambiados, en un momento, en un abrir y cerrar de ojos, durante la última trompeta. Porque sonará la trompeta, y los muertos serán levantados incorruptibles, y nosotros seremos cambiados. Porque esto que es corruptible tiene que vestirse de incorrupción, y esto que es mortal tiene que vestirse de inmortalidad.”
Vea también Rev. 14:13.
No son levantados en la carne, sino con cuerpo espiritual
1 Cor. 15:35, 40, 42, 44 “Alguien dirá: ‘¿Cómo han de ser levantados los muertos? Sí, ¿con qué clase de cuerpo vienen?’ . . . hay cuerpos celestes y cuerpos terrestres; mas la gloria de los cuerpos celestes es de una clase, y la de los cuerpos terrestres es de una clase diferente. Así también es la resurrección de los muertos. . . . Se siembra cuerpo físico, se levanta cuerpo espiritual. Si hay cuerpo físico, también lo hay espiritual.”
Fili. 3:20, 21 “En cuanto a nosotros, nuestra ciudadanía existe en los cielos, lugar de donde también esperamos con ansia a un salvador, el Señor Jesucristo, que amoldará de nuevo nuestro cuerpo humillado para que sea conforme a su cuerpo glorioso según la operación del poder que él tiene.”
La muerte segunda no puede dañarlos; son levantados a vida inmortal
Rev. 2:10, 11 “Pruébate fiel hasta la misma muerte, y yo te daré la corona de la vida. El que tiene oído oiga lo que el espíritu les dice a las congregaciones: El que venza no recibirá daño de ninguna manera de la muerte segunda.”
1 Cor. 15:53 “Esto que es corruptible tiene que vestirse de incorrupción, y esto que es mortal tiene que vestirse de inmortalidad.”
Resurrección general de los muertos después de la remoción del “cielo” y “tierra” inicuos
Rev. 20:11, 12 “Vi un gran trono blanco y al que estaba sentado en él. De delante de él huyeron la tierra y el cielo, y no se halló lugar para ellos. Y vi a los muertos, los grandes y los pequeños, de pie delante del trono, y se abrieron rollos.”
Tanto justos como injustos serán levantados con la oportunidad para vida
Hech. 24:15 “Tengo esperanza en cuanto a Dios . . . de que va a haber resurrección así de justos como de injustos.”
Juan 5:26-29 “Así como el Padre tiene vida en sí mismo, así ha concedido también al Hijo el tener vida en sí mismo. Y le ha dado autoridad para hacer juicio, por cuanto es Hijo del hombre. No se maravillen de esto, porque viene la hora en que todos los que están en las tumbas conmemorativas oirán su voz y saldrán.”
Vea también los encabezamientos principales “Juicio” y “Seol—Hades.”
La resurrección provee oportunidad para que la humanidad saque provecho del rescate, que cada uno sea juzgado sobre la base de sus propias obras
Rev. 20:12, 13 “Vi a los muertos, los grandes y los pequeños, de pie delante del trono, y se abrieron rollos. Pero se abrió otro rollo; es el rollo de la vida. Y los muertos fueron juzgados de acuerdo con las cosas escritas en los rollos según sus hechos. Y el mar entregó los muertos que había en él, y la muerte y el Hades entregaron los muertos que había en ellos, y fueron juzgados individualmente según sus hechos.”
Heb. 9:27, 28 “Así como les está reservado a los hombres morir una vez para siempre, pero después de esto un juicio, así también el Cristo fue ofrecido una vez para siempre para cargar con los pecados de muchos; y la segunda vez que aparece será aparte del pecado y a los que lo están esperando encarecidamente para su salvación.”
Algunos recibirán el galardón de vida eterna; otros escogerán el proceder que acarrea juicio condenatorio
Juan 5:28, 29 “Todos los que están en las tumbas conmemorativas oirán su voz y saldrán, los que hicieron cosas buenas a una resurrección de vida, los que practicaron cosas viles a una resurrección de juicio.”
Se les dará plena oportunidad de ajustarse a las maneras de obrar de Dios
Isa. 65:17, 20 “Aquí estoy creando nuevos cielos y una nueva tierra; y las cosas anteriores no serán recordadas, ni subirán al corazón. Ya no llegará a haber de aquel lugar un niño de pecho de unos cuantos días de edad, ni un anciano que no cumpla sus días; porque uno morirá como mero muchacho, aunque cuente con cien años de edad; y en cuanto al pecador, aunque cuente con cien años de edad se invocará el mal contra él.”
Los últimos de los que resulten indignos de vida serán destruidos después del reinado de mil años de Cristo
Rev. 20:7-9 “Ahora bien, luego que hayan terminado los mil años, Satanás será soltado de su prisión, y saldrá a extraviar a aquellas naciones que están en los cuatro ángulos de la tierra, a Gog y a Magog, para reunirlos para la guerra. El número de éstos es como la arena del mar. Y avanzaron sobre la anchura de la tierra y rodearon el campamento de los santos y la ciudad amada. Pero fuego descendió del cielo y los devoró.”
Despertamiento espiritual de personas vivas se compara a resurrección
Juan 5:24, 25 “El que oye mi palabra y cree al que me envió tiene vida eterna, y no entra en juicio, sino que ha pasado de la muerte a la vida. Muy verdaderamente les digo: La hora viene, y ahora es, cuando los muertos oirán la voz del Hijo de Dios y los que hayan hecho caso vivirán.”
Efe. 2:1, 2 “Es a ustedes que Dios vivificó aunque estaban muertos en sus ofensas y pecados, en los cuales ustedes en un tiempo anduvieron conforme al sistema de cosas de este mundo, conforme al gobernante de la autoridad del aire, el espíritu que ahora opera en los hijos de la desobediencia.”
Rom. 6:11-13 “Así mismo también ustedes: ténganse por muertos en verdad con referencia al pecado, pero vivos con referencia a Dios por Cristo Jesús. Por lo tanto no dejen que el pecado continúe gobernando como rey en su cuerpo mortal de modo que obedezcan los deseos de éste. Tampoco sigan presentando sus miembros al pecado como armas de injusticia, sino preséntense ustedes mismos a Dios como aquellos vivos de entre los muertos.”
1 Ped. 4:5, 6 “Estas personas rendirán cuenta al que está listo para juzgar a los vivos y a los muertos. De hecho, con este propósito las buenas nuevas fueron declaradas también a los muertos, para que fueran juzgados en cuanto a la carne desde el punto de vista de los hombres pero vivieran en cuanto al espíritu desde el punto de vista de Dios.”
Ninguna esperanza de resurrección para los que están en el Gehena simbólico
Mat. 23:13-15, 33 “¡Ay de ustedes, escribas y fariseos, hipócritas! porque cierran el reino de los cielos delante de los hombres; pues ustedes mismos no entran, ni permiten entrar a los que están entrando. ¡Ay de ustedes, escribas y fariseos, hipócritas! porque atraviesan mar y tierra seca para hacer un solo prosélito, y cuando llega a ser uno, hacen de él sujeto para el Gehena dos veces más que ustedes. Serpientes, prole de víboras, ¿cómo habrán de huir del juicio del Gehena?”
Mat. 10:28 “No se hagan temerosos de los que matan el cuerpo mas no pueden matar el alma [“la vida futura,” DE]; sino, más bien, teman al que puede destruir tanto el alma como el cuerpo en el Gehena.”
Mar. 9:43, 47 “Si en cualquier tiempo tu mano te hace tropezar, córtala; mejor te es entrar manco en la vida que con dos manos irte al Gehena, al fuego que no se puede apagar. Y si tu ojo te hace tropezar, tíralo; mejor te es entrar con un solo ojo en el reino de Dios que con dos ojos ser arrojado en el Gehena.”
Vea también el encabezamiento principal “Gehena,” páginas 228, 229.
No hay esperanza de resurrección para los que finalmente son juzgados “cabras” cuando Cristo en poder del Reino ejecuta juicio
Mat. 25:31-33, 41, 46 “Cuando el Hijo del hombre llegue en su gloria, y todos los ángeles con él, entonces se sentará sobre su glorioso trono. Y todas las naciones serán juntadas delante de él, y separará a la gente unos de otros, así como el pastor separa las ovejas de las cabras. Y pondrá las ovejas a su derecha, pero las cabras a su izquierda. Entonces dirá, a su vez, a los de su izquierda: ‘Váyanse de mí, ustedes que han sido maldecidos, al fuego eterno preparado para el Diablo y sus ángeles.’ Y éstos partirán al cortamiento eterno.”
Vea también 2 Tes. 1:7-9; Rev. 19:11-21