EL SUDARIO DE TURÍN CRECE CASI CUATRO CENTÍMETROS TRAS SU RESTAURACIÓN
La principal sorpresa ha sido descubrir nítidamente, en la parte posterior del lienzo, todas las manchas de sangre que figuran en la parte anterior mientras que falta, en cambio, la imagen del cuerpo
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<< ROMA, 23 septiembre 2002.- El Sudario de Turín tiene un aspecto distinto al del último medio siglo. La restauración llevada a cabo en secreto durante dos meses ha permitido estudiar la parte posterior del supuesto lienzo sepulcral de Jesús, descoser los remiendos de 1534, retirar los detritos acumulados entre el lienzo y el forro, eliminar las arrugas y realizar un «atlas digital» de las dos caras.>>
=== El primer cambio que llama la atención es la nueva forma de los 16 agujeros triangulares, en cuatro líneas simétricas a lo largo del lienzo, causados por el incendio de 1532 en la Capilla de Chambery cuando una gota de plata fundida atravesó la arqueta donde se guardaba, cuidadosamente plegado, el Sudario. Dos años más tarde, las clarisas de Chambery remendaron los agujeros con corporales y reforzaron el lienzo cosiéndolo a un gran fragmento de tela de Holanda que ha ocultado durante casi cinco siglos la parte posterior.
=== Los agujeros -según las fotografías que presentó el sábado en Turín el cardenal Severino Poletto, custodio de la reliquia por delegación del Papa- son ahora más pequeños e irregulares, pues las clarisas habían ocultado, junto con el borde de las quemaduras, partes del tejido sano para dar un poco más de regularidad al «parche». La retirada de los remiendos confirmó que, como se temía, el borde quemado ha «avanzado» a lo largo de los años «comiendo» la tela antes intacta. Para frenar el proceso se ha retirado toda la carbonilla, dejando sólo los bordes marrones de la antigua quemadura.
FALTA LA IMAGEN POSTERIOR
=== Pero la principal sorpresa ha sido descubrir nítidamente, en la parte posterior del lienzo, todas las manchas de sangre que figuran en la parte anterior mientras que falta, en cambio, la imagen del cuerpo, formada de algún modo todavía desconocido. Como se sabía, entre el lienzo y la tela de Holanda se habían acumulado detritos orgánicos, polvo y suciedad a lo largo de casi cinco siglos, pero también se han encontrado partículas de sangre seca que se han catalogado y custodiado en contenedores sellados como el resto del material. Ningún elemento ha sido destruido, y la procedencia de cada uno se ha registrado con precisión utilizando las coordenadas de estudio del Sudario. Se han tomado también, utilizando cinta adhesiva y microaspiradoras, algunas muestras de la parte posterior del Sudario antes de coserlo a una nueva tela estéril.
=== El secreto en que se ha llevado a cabo una operación de gran envergadura ha causado malestar entre los sindonólogos y los expertos científicos que han participado, sobre todo en torno a la ostensión del año 2000, en los congresos científicos destinados a estudiar el Sudario y aconsejar modos de conservarlo pues la imagen del «Hombre del Sudario» se va difuminando con el paso de los años debido a un proceso natural de oxidación.
=== Desde el año 2000, el lienzo se conserva desplegado dentro de un contenedor de alta tecnología con paredes de cristal blindado y una atmósfera de gas inerte que impide el desarrollo de bacterias anaerobias.
(Fuente: Abc. Redacción. ICPress)
La principal sorpresa ha sido descubrir nítidamente, en la parte posterior del lienzo, todas las manchas de sangre que figuran en la parte anterior mientras que falta, en cambio, la imagen del cuerpo
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<< ROMA, 23 septiembre 2002.- El Sudario de Turín tiene un aspecto distinto al del último medio siglo. La restauración llevada a cabo en secreto durante dos meses ha permitido estudiar la parte posterior del supuesto lienzo sepulcral de Jesús, descoser los remiendos de 1534, retirar los detritos acumulados entre el lienzo y el forro, eliminar las arrugas y realizar un «atlas digital» de las dos caras.>>
=== El primer cambio que llama la atención es la nueva forma de los 16 agujeros triangulares, en cuatro líneas simétricas a lo largo del lienzo, causados por el incendio de 1532 en la Capilla de Chambery cuando una gota de plata fundida atravesó la arqueta donde se guardaba, cuidadosamente plegado, el Sudario. Dos años más tarde, las clarisas de Chambery remendaron los agujeros con corporales y reforzaron el lienzo cosiéndolo a un gran fragmento de tela de Holanda que ha ocultado durante casi cinco siglos la parte posterior.
=== Los agujeros -según las fotografías que presentó el sábado en Turín el cardenal Severino Poletto, custodio de la reliquia por delegación del Papa- son ahora más pequeños e irregulares, pues las clarisas habían ocultado, junto con el borde de las quemaduras, partes del tejido sano para dar un poco más de regularidad al «parche». La retirada de los remiendos confirmó que, como se temía, el borde quemado ha «avanzado» a lo largo de los años «comiendo» la tela antes intacta. Para frenar el proceso se ha retirado toda la carbonilla, dejando sólo los bordes marrones de la antigua quemadura.
FALTA LA IMAGEN POSTERIOR
=== Pero la principal sorpresa ha sido descubrir nítidamente, en la parte posterior del lienzo, todas las manchas de sangre que figuran en la parte anterior mientras que falta, en cambio, la imagen del cuerpo, formada de algún modo todavía desconocido. Como se sabía, entre el lienzo y la tela de Holanda se habían acumulado detritos orgánicos, polvo y suciedad a lo largo de casi cinco siglos, pero también se han encontrado partículas de sangre seca que se han catalogado y custodiado en contenedores sellados como el resto del material. Ningún elemento ha sido destruido, y la procedencia de cada uno se ha registrado con precisión utilizando las coordenadas de estudio del Sudario. Se han tomado también, utilizando cinta adhesiva y microaspiradoras, algunas muestras de la parte posterior del Sudario antes de coserlo a una nueva tela estéril.
=== El secreto en que se ha llevado a cabo una operación de gran envergadura ha causado malestar entre los sindonólogos y los expertos científicos que han participado, sobre todo en torno a la ostensión del año 2000, en los congresos científicos destinados a estudiar el Sudario y aconsejar modos de conservarlo pues la imagen del «Hombre del Sudario» se va difuminando con el paso de los años debido a un proceso natural de oxidación.
=== Desde el año 2000, el lienzo se conserva desplegado dentro de un contenedor de alta tecnología con paredes de cristal blindado y una atmósfera de gas inerte que impide el desarrollo de bacterias anaerobias.
(Fuente: Abc. Redacción. ICPress)