Poesía El Reino que Viene
Día 7 de Octubre del año 2010
El Reino que Viene
Soy embajador de la paz
el ministro del nuevo pacto
y me estoy tomando de las manos
junto con todos mis hermanos
que es como estar, en la iglesia
encadenado por la causa fiel
de Jesucristo, Rey y Señor.
Soy el Alfa...
que busca su Omega.
Soy uno que canta en el desierto
la canción llamada de esperanza,
cuando oigas una voz
que anuncia el reino.
Soy hecho de hierro, soy Juan el efesio
y tengo mi espada al decir de Su Palabra
la sabiduría que es también Verbo.
Soy el principio y llegando al final soy yo.
Canto el amor del Hijo de Dios y al cielo
le canto a la vida por la hija de Tarsis,
canto con gozo y mi sufrir te lo escribo
y canto en el día que hay un Pacto Eterno.
El Comienzo
Dios mi Señor,
es la noche en mi habitación
y él que todo lo puede
me arropa y me ampara
la soledad es testigo.
Una rosa es el Hombre
y el sueño de un lirio
que necesitan cambiar,
para no ser lo que fuimos
y una realidad diferente crear,
ya que es de día
en la Casa del Sol.
Él es Dios,
así seas como una flor vanidosa
bella, joven e impetuosa
para los vientos del Norte
que vendrán a preguntarte
de la noche a la mañana
porque antes,
sujeta a una voluntad involuntaria
consumida en el deseo
eras como la carne
derretida en el suelo.
Eso no lo quiere Jesús
la crueldad de los amos
muy pronto será castigada
con las gotas preciosas
de la cruz del Calvario,
y saldrás revestida de nuevos albores
bañada por un fresco perfume de olvidos
no llores,
Todos,
nosotros somos para Dios
cada uno un oro ungido,
bajo una fina lluvia de plata
Yo antes fui un estorbo; derrocado
era un simple artesano de la Esfinge
un vil cantante entre las plagas
y si más allá viajé por excedido
yo a Elohim del Sinaí lo necesito
y sé me apartará,
con su pueblo escogido.
Porque así le complació primero
y por ser eternamente justo
en su heredar, sé que en mi
todas sus promesas ya no mucho
tardarán.
Amén y Amén.