Quizas usted se pregunte que es el Ministerio.
I. El Ministerio: Es el fluir de vida por el Espiritu, que imparte a
a Cristo en sus santos, para ser perfeccionados
a fin de crecer en vida y ser madurados, para la
edificacion de su iglesia, consumandose en la
Nueva Jerusalen, de acuerdo a su Proposito
Eterno.
(2 Co. 3:6-9; 4: 1-2; Ef. 4:11; 5:25; Ap. 21:1-2)
a) Este ministerio es el ministerio del Nuevo Pacto, el cual es
del Espiritu y de Justicia. (2Co. 3:7-9). El cual es contrario
al ministerio del Antiguo Pacto, que es de condenacion y
muerte.
b) Este ministerio es unico, y tiene como fin, llevar a cabo la
edificacion de Dios en su iglesia, por medio de impartir a
Cristo como vida en sus santos. (1 Ti. 1:3- 4)
c) No hay muchos ministerios, hay un solo ministerio, que es
el del Nuevo Pacto, el cual es llevado a cabo por el Espiritu.
II. El perfeccionamiento de los santos, conforme a este unico mi-
nisterio es llevado a cabo por medio de hombre constituidos
como: apostoles, profetas, evangelistas, pastores y maestros.
(Ef. 4:11)
a) Este unico ministerio esta basado en la enseñanza de los
apostoles. (Hch 2:42)
b) Apostoles, profetas, evangelistas, pastores y maestros, to-
dos son ministros del unico ministerio, el del Nuevo Pacto.
Hay muchos ministros, pero un solo ministerio. (Ef. 4:3-6)
c) Todos los ministros del Nuevo Pacto, son para impartir a Cris-
to en los santos y de esta manera, Dios logra obtener su
iglesia edificada, la cual es su misma expresion.
(Ap. 1:12)
III. Debemos apreciar el Cuerpo de Cristo y no menospreciar a
ningun hermano, si es que estamos viendo el Proposito Eter-
no de Dios, el cual es obtener su iglesia edificada con Dios
mismo, para su consumacion en la Nueva Jerusalen.
(Ap. 1:12; 21:18)
a) Debemos recibir el hablar de Dios, conforme a este unico
ministerio, que imparte a Cristo.
b) Este hablar de Dios, en la enseñanza completa de los
apostoles en el Nuevo Testamento.
c) Las divisiones en el Cuerpo de Cristo vienen, cuando le da-
mos enfasis a cierta enseñanza particular, que no es con-
forme al ministerio del Nuevo Pacto. Y tambien cuando nos
gloriamos en los hombres que ministran.
(1Co. 1:12-13; 3:21-23)
I. El Ministerio: Es el fluir de vida por el Espiritu, que imparte a
a Cristo en sus santos, para ser perfeccionados
a fin de crecer en vida y ser madurados, para la
edificacion de su iglesia, consumandose en la
Nueva Jerusalen, de acuerdo a su Proposito
Eterno.
(2 Co. 3:6-9; 4: 1-2; Ef. 4:11; 5:25; Ap. 21:1-2)
a) Este ministerio es el ministerio del Nuevo Pacto, el cual es
del Espiritu y de Justicia. (2Co. 3:7-9). El cual es contrario
al ministerio del Antiguo Pacto, que es de condenacion y
muerte.
b) Este ministerio es unico, y tiene como fin, llevar a cabo la
edificacion de Dios en su iglesia, por medio de impartir a
Cristo como vida en sus santos. (1 Ti. 1:3- 4)
c) No hay muchos ministerios, hay un solo ministerio, que es
el del Nuevo Pacto, el cual es llevado a cabo por el Espiritu.
II. El perfeccionamiento de los santos, conforme a este unico mi-
nisterio es llevado a cabo por medio de hombre constituidos
como: apostoles, profetas, evangelistas, pastores y maestros.
(Ef. 4:11)
a) Este unico ministerio esta basado en la enseñanza de los
apostoles. (Hch 2:42)
b) Apostoles, profetas, evangelistas, pastores y maestros, to-
dos son ministros del unico ministerio, el del Nuevo Pacto.
Hay muchos ministros, pero un solo ministerio. (Ef. 4:3-6)
c) Todos los ministros del Nuevo Pacto, son para impartir a Cris-
to en los santos y de esta manera, Dios logra obtener su
iglesia edificada, la cual es su misma expresion.
(Ap. 1:12)
III. Debemos apreciar el Cuerpo de Cristo y no menospreciar a
ningun hermano, si es que estamos viendo el Proposito Eter-
no de Dios, el cual es obtener su iglesia edificada con Dios
mismo, para su consumacion en la Nueva Jerusalen.
(Ap. 1:12; 21:18)
a) Debemos recibir el hablar de Dios, conforme a este unico
ministerio, que imparte a Cristo.
b) Este hablar de Dios, en la enseñanza completa de los
apostoles en el Nuevo Testamento.
c) Las divisiones en el Cuerpo de Cristo vienen, cuando le da-
mos enfasis a cierta enseñanza particular, que no es con-
forme al ministerio del Nuevo Pacto. Y tambien cuando nos
gloriamos en los hombres que ministran.
(1Co. 1:12-13; 3:21-23)