Una curiosidad.
Ese Dalai Lama de mensaje # 1 ¿No es el mismo que le dijo a un niño que le chupara la lengua?
Y en cuanto al tema, no debiéramos extrañarnos, por cuanto ese siempre ha sido el propósito del personaje que describe Isaías 14:14.
Ese propósito fue inoculado en la raza humana, en los días del Edén (Gén_3:5), hasta el día de hoy, donde contemplamos foristas que se creen con autoridad para reducir al Creador a nivel de ellos, de una criatura, sin darse cuenta de que están siendo fieles a la enseñanza de su padre espiritual (Jn.8:44).