EL DERRAMAMIENTO DEL ESPIRITU AL FINAL DE LOS TIEMPOS
En Joél 2:27se lee:
" Y conoceréis que en medio de Israel estoy yo, y que yo soy Jehová vuestro Dios, y no hay otro; y mi pueblo nunca jamás será avergonzado".
Esto se refiere a algo que sucederá después del recogimiento del remanente de Jacob en tiempos angustiosos, cuando Jehová volverá a manifestarse en medio de su pueblo. Será el advenimiento del Mesías. A ese remanente rescatado de la "angustia de Jacob" se refiere el versículo 32 del mismo capitulo:
"porque en el monte de Sión y en Jerusalén habrá salvación, como ha dicho Jehová, y entre el remanente al cual él habrá llamado"
Y es a ese remanente rescatado de entre las naciones en ese momento final de la historia, y a la tierra bíblica de Israel (*) que se refiere el muy conocido versículo que se inserta en medio de esos dos (versículo 28):
" Y después de esto (es decir, del recogimiento del remanente) derramaré mi Espíritu sobre toda carne (del remanente recogido de entre las naciones, no de todo el mundo), y profetizarán vuestros hijos y vuestras hijas; vuestros ancianos soñarán sueños, y vuestros jóvenes verán visiones".
Es natural que exista un derramamiento del Espíritu en ese clímax, ya que el remanente de Jacob precisará de espíritu de revelación para reconocerse como un solo pueblo unido a Juda y a los patriarcas de Israel después de mas de 2.700 años de exilio y dispersión. Este derramamiento es el espíritu de Elías de que habla Malaquías 4:5-6, que une el corazón de los hijos - es decir, el corazón del remanente recogido de la dispersión de entre las naciones y que había olvidado a sus padres - con el corazón de los padres - es decir, los patriarcas del Israel bíblico.
El versículo de Malaquías 4:5-6 alude a la resurrección del hijo de la viuda de Serepta por Elías, y del hijo de la sunamita por Eliseo (**).
¿Cuándo sucederá este evento cúspide de la historia?: podemos deducirlo por las circunstancias extremas que relata el versículo que viene inmediatamente a continuación:
"Y daré prodigios en el cielo y en la tierra,
sangre, y fuego, y columnas de humo.
El sol se convertirá en tinieblas, y la luna en sangre, antes que venga el día grande y espantoso de Jehová".
Es decir, acontecerá un poco antes del fin de este mundo o el "día de Jehová". El texto de Joel 2:28 de ninguna manera puede aplicarse a la iglesia cristiana que se habrá transmutado en ese entonces convirtiéndose en la congregación del Israel de Dios en su propia tierra.
En su dia entnderemos eso y alabaremos al Dios der Israel por su misericordia y su poder.
jerusun
Notas
(*) en Joel 2:23, un poco antes de los pasajes citados en este comentario, se lee:
"Vosotros también, hijos de Sión, alegraos y gozaos en Jehová vuestro Dios; porque os ha dado la primera lluvia a su tiempo,y hará descender sobre vosotros lluvia temprana y tardía como al principio".
Si bien la expresión "lluvia temprana y tardía" puede ser espiritualizada como una alusión a las bendiciones del Dios Vivo, la verdad es que alude específicamente a un régimen de lluvia que solo se da en la geografía de Israel. La lluvia temprana es la que quebraba el terrón seco y duro de los campos, luego de cinco meses de clima extremamente seco y hacia posible la siembra; y la lluvia tardía permitía la maduración final de la cosecha de granos. Un retraso o alteración de este régimen de lluvias era fatal para la economía del Israel bíblico y podia significar el hambre. Muchas veces Dios/Elohim advirtió que pagaría la rebelión de Israel con la alteración del régimen de lluvia temprana y/o tardía. Y a menudo lo hizo. Este versículo - entonces - indica que en el Nuevo Israel el vital ciclo de lluvias sería de nuevo normalizado. Pero además, indica que será en el territorio de Israel y solo allí que será derramado el Espíritu Santo en el final de los tiempos. Por lo menos en lo que se refiere al derramamiento del versículo 2:28.
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(**) hay que recordar que Eliseo recibió una doble porción de la unción de Elías, y con ella resucito al hijo de la sunamita y se lo entrego a sus padres. La unción de Elíseo - entonces - proviene de Elías, y la resurrección del hijo de la viuda de Sarepta y del hijo de la sunamita es un tipo - en muchos sentidos - de este derramamiento final del Espíritu que "resucitara" a la "Casa de Israel".
En Joél 2:27se lee:
" Y conoceréis que en medio de Israel estoy yo, y que yo soy Jehová vuestro Dios, y no hay otro; y mi pueblo nunca jamás será avergonzado".
Esto se refiere a algo que sucederá después del recogimiento del remanente de Jacob en tiempos angustiosos, cuando Jehová volverá a manifestarse en medio de su pueblo. Será el advenimiento del Mesías. A ese remanente rescatado de la "angustia de Jacob" se refiere el versículo 32 del mismo capitulo:
"porque en el monte de Sión y en Jerusalén habrá salvación, como ha dicho Jehová, y entre el remanente al cual él habrá llamado"
Y es a ese remanente rescatado de entre las naciones en ese momento final de la historia, y a la tierra bíblica de Israel (*) que se refiere el muy conocido versículo que se inserta en medio de esos dos (versículo 28):
" Y después de esto (es decir, del recogimiento del remanente) derramaré mi Espíritu sobre toda carne (del remanente recogido de entre las naciones, no de todo el mundo), y profetizarán vuestros hijos y vuestras hijas; vuestros ancianos soñarán sueños, y vuestros jóvenes verán visiones".
Es natural que exista un derramamiento del Espíritu en ese clímax, ya que el remanente de Jacob precisará de espíritu de revelación para reconocerse como un solo pueblo unido a Juda y a los patriarcas de Israel después de mas de 2.700 años de exilio y dispersión. Este derramamiento es el espíritu de Elías de que habla Malaquías 4:5-6, que une el corazón de los hijos - es decir, el corazón del remanente recogido de la dispersión de entre las naciones y que había olvidado a sus padres - con el corazón de los padres - es decir, los patriarcas del Israel bíblico.
El versículo de Malaquías 4:5-6 alude a la resurrección del hijo de la viuda de Serepta por Elías, y del hijo de la sunamita por Eliseo (**).
¿Cuándo sucederá este evento cúspide de la historia?: podemos deducirlo por las circunstancias extremas que relata el versículo que viene inmediatamente a continuación:
"Y daré prodigios en el cielo y en la tierra,
sangre, y fuego, y columnas de humo.
El sol se convertirá en tinieblas, y la luna en sangre, antes que venga el día grande y espantoso de Jehová".
Es decir, acontecerá un poco antes del fin de este mundo o el "día de Jehová". El texto de Joel 2:28 de ninguna manera puede aplicarse a la iglesia cristiana que se habrá transmutado en ese entonces convirtiéndose en la congregación del Israel de Dios en su propia tierra.
En su dia entnderemos eso y alabaremos al Dios der Israel por su misericordia y su poder.
jerusun
Notas
(*) en Joel 2:23, un poco antes de los pasajes citados en este comentario, se lee:
"Vosotros también, hijos de Sión, alegraos y gozaos en Jehová vuestro Dios; porque os ha dado la primera lluvia a su tiempo,y hará descender sobre vosotros lluvia temprana y tardía como al principio".
Si bien la expresión "lluvia temprana y tardía" puede ser espiritualizada como una alusión a las bendiciones del Dios Vivo, la verdad es que alude específicamente a un régimen de lluvia que solo se da en la geografía de Israel. La lluvia temprana es la que quebraba el terrón seco y duro de los campos, luego de cinco meses de clima extremamente seco y hacia posible la siembra; y la lluvia tardía permitía la maduración final de la cosecha de granos. Un retraso o alteración de este régimen de lluvias era fatal para la economía del Israel bíblico y podia significar el hambre. Muchas veces Dios/Elohim advirtió que pagaría la rebelión de Israel con la alteración del régimen de lluvia temprana y/o tardía. Y a menudo lo hizo. Este versículo - entonces - indica que en el Nuevo Israel el vital ciclo de lluvias sería de nuevo normalizado. Pero además, indica que será en el territorio de Israel y solo allí que será derramado el Espíritu Santo en el final de los tiempos. Por lo menos en lo que se refiere al derramamiento del versículo 2:28.
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(**) hay que recordar que Eliseo recibió una doble porción de la unción de Elías, y con ella resucito al hijo de la sunamita y se lo entrego a sus padres. La unción de Elíseo - entonces - proviene de Elías, y la resurrección del hijo de la viuda de Sarepta y del hijo de la sunamita es un tipo - en muchos sentidos - de este derramamiento final del Espíritu que "resucitara" a la "Casa de Israel".