El Cuerpo de Cristo y alimento matutino (jueves)

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5 Septiembre 2001
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El Cuerpo de Cristo
continuación
Si algunos hermanos y hermanas sostienen puntos de vista e interpretaciones diferentes de ti y por tanto insisten en establecer una congregación separada, su terreno es equivocado. Como tú estás en el cuerpo de Cristo, tienes el terreno propio y justo. Ellos no tienen base, porque su terreno está basado en puntos de vista e interpretaciones. De las llamadas iglesias en el mundo, sólo las que están en el cuerpo de Cristo son iglesias. El resto no tienen base suficiente para ser consideradas como iglesias.
Si los hijos de Dios ven claramente que el cuerpo es la única base de la iglesia, no van a dividirse en sectas. Está muy bien tener una iglesia con sólo tres o cinco personas, pero puede no ser recto el establecer una con cien o mil personas. Estamos convencidos que la iglesia tiene una sola base: el manifestar plenamente el cuerpo de Cristo. No nos congregamos en ninguna otra posición que la del cuerpo de Cristo. Espero que los creyentes puedan ver que allí donde un grupo en una localidad excede o socava el cuerpo de Cristo, este grupo no puede ser reconocido como una iglesia. El grupo que excede el cuerpo de Cristo es el que recibe a personas que no pertenecen al cuerpo; deja entrar a los no creyentes. Estos grupos pasan a ser una mezcla y pierden la categoría de iglesias. Por otra parte, todo grupo que socava el cuerpo de Cristo es el que hace más estrecha su comunión. Puede ser un grupo de santidad o del séptimo día o un grupo bautista. Estos grupos restringen el cuerpo de Cristo más de lo que es debido; no tienen suficiente base para ser reconocidos como una iglesia.

El Cuerpo la base de la comunión
Volvamos a leer 1 a Corintios 12:12: " Porque así como el cuerpo es uno, y tiene muchos miembros, pero todos los miembros del cuerpo, siendo muchos, son un sólo cuerpo, así también Cristo.
La iglesia sale de Cristo, y por medio de la operación del Espíritu Santo pasa a ser un cuerpo. Todos los miembros están adaptados unos a otros y coordinados uno al otro por medio del Espíritu Santo. Así, la comunicación de los cristianos cae dentro del cuerpo. En otras palabras, la base de la comunión cristiana es el cuerpo.
Somos miembros el uno del otro y estamos en un cuerpo. Naturalmente nuestra comunión se basa en el cuerpo de Cristo. No hay otra relación para la comunión excepto que todos somos miembros del cuerpo de Cristo.
No somos ni todos judíos, ni todos griegos, ni todos libres, ni todos esclavos. No podemos basar nuestra comunión en ninguna de estas relaciones. De ahí que, el cuerpo es la única base de nuestra comunión.
Cualquier otra comunión no puede ser reconocida como comunión cristiana. Ninguna otra comunión, o congregación, o grupo que no esté condicionada por el cuerpo de Cristo es aceptable. Hoy hay un gran número de comunidades llamadas cristianas, pero su comunión no puede basarse en ser miembros el uno del otro en el cuerpo. Pueden basarse en la comunidad de un ritual (como la inmersión), una doctrina (como la justificación por la fe), una forma de gobierno (como la Espicopal), el nombre de una persona (la Wesleyana), cierto sistema (como la Congregacional), o un cierto movimiento (como la Pentecostal).
Así muchas llamadas comuniones cristianas carecen de una base recta delante de Dios. Los hijos de Dios deberían comprender que la iglesia es el cuerpo de Cristo, y en este cuerpo un miembro es la unidad más pequeña. La comunión de todos los miembros se basa en el cuerpo y nada más. Una base así para la comunión identifica a un grupo como comunión cristiana. Como tú y yo somos miembros del cuerpo de Cristo, podemos tener comunión juntos. Una comunión así, miembro con miembro, es la base de la unidad del cuerpo. Por el hecho que compartimos la misma vida en el cuerpo y somos bautizados en el mismo Espíritu Santo, podemos tener comunión unos con otros. Nuestra comunión juntos no debe ser mantenida sobre ninguna otra base.
Toda comunión que no sea la del cuerpo es sectaria y divisiva. Sin mis brazos o piernas organizaran un club de brazos largos y tuvieran comunión a base de la longitud, esta comunión seria ciertamente cismática.
Dejadme repetirlo: la comunión que no está basada en el cuerpo no es comunión cristiana. No podemos aceptar ninguna comunión que sea diferente de la del cuerpo. Es
más, debemos rechazarla de modo positivo. El mantener a la comunión cristiana significa que no podemos ser menores que el cuerpo de Cristo.
Watchman Nee
¡Jesús es el Señor!
Continua….

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SEMANA 1 — DÍA 4
Alimento matutino
Ap. 3:7-8 Escribe al mensajero de la iglesia en Filadelfia: Esto dice el Santo, el Verdadero, el que tiene la llave de David, el que abre y ninguno cierra, y cierra y ninguno abre: Yo conozco tus obras; he aquí, he puesto delante de ti una puerta abierta, la cual nadie puede cerrar; porque tienes poco poder y has guardado Mi palabra, y no has negado Mi nombre.
En griego, la palabra Filadelfia significa amor fraternal…La iglesia en Filadelfia prefigura la vida de iglesia que fue recobrada a principios del siglo XIX por los hermanos que fueron levantados por el Señor en Inglaterra. Así como la iglesia reformada, la cual está representada por la iglesia en Sardis, fue una reacción ante la apóstata Iglesia Católica, la cual está representada por la iglesia en Tiatira, de la misma manera la iglesia del amor fraternal es una reacción ante la muerte de la iglesia reformada. Esta iglesia perdurará como un testimonio en contra del catolicismo apóstata y del protestantismo reformado hasta el retorno del Señor.
En Apocalipsis 3:8b el Señor Jesús dice: “Tienes poco poder y has guardado Mi palabra”.Una característica sobresaliente de la iglesia en Filadelfia es que ella ha guardado la palabra del Señor. Conforme a la historia, ningún otro grupo de cristianos ha guardado la palabra del Señor tan estrictamente como el de la iglesia en Filadelfia. A la iglesia en Filadelfia, la iglesia recobrada, no le interesa las tradiciones, sino la palabra de Dios. (The Conclusion of the New Testament, págs. 2525-2526)
Lectura para hoy
La iglesia en Filadelfia guarda la palabra del Señor con el poco poder que tiene. No debemos pensar que la iglesia en Filadelfia es una iglesia fuerte, poderosa y prevaleciente … Lo que agrada al Señor no es que seamos fuertes, sino que usemos el poco poder que tenemos para hacer lo mejor que podamos. Los fuertes no agradan tanto al Señor como aquellos que hacen lo mejor que pueden con el poco poder que poseen.
En Apocalipsis 3:8 el Señor también dice que la iglesia en Filadelfia no ha negado Su nombre. Los hermanos que fueron levantados por el Señor en Inglaterra a principios del siglo XIX no aceptaron ningún nombre que no fuera el nombre del Señor. La palabra es la expresión del Señor, y el nombre es el Señor mismo. La iglesia apóstata se desvió de la palabra del Señor y se volvió
herética. La iglesia reformada, aunque recobró la palabra del Señor en cierta medida, ha negado el nombre del Señor al adoptar muchos otros nombres, produciendo así muchas denominaciones. La iglesia recobrada no solamente ha regresado plenamente a la palabra del Señor, sino que además ha renunciado a todo nombre que no sea el nombre del Señor Jesucristo. La iglesia recobrada pertenece al Señor de forma absoluta y no tiene nada que ver con las denominaciones (con ningún otro nombre). Desviarse de la palabra del Señor es caer en apostasía, y ponerle a la iglesia otros nombres que no sean el nombre del Señor es cometer fornicación espiritual. Puesto que la iglesia es una virgen pura que ha sido desposada con Cristo (2 Co. 11:2), ella no debe tener otro nombre que no sea el de su esposo. Todo otro nombre es abominable a los ojos de Dios. En la iglesia recobrada…solamente tenemos la palabra pura del Señor. Asimismo, la iglesia recobrada no tiene nada que ver con las denominaciones (otros nombres), sino que retiene únicamente el nombre del Señor Jesucristo. El hecho de desviarse de la Palabra y caer en herejías y el hecho de exaltar tantos nombres distintos al nombre de Cristo, son las características principales del cristianismo degradado. Asimismo, el hecho de regresar a la Palabra pura apartándose de todas las herejías y tradiciones y el hecho de exaltar el nombre del Señor abandonando todo otro nombre, son el testimonio más inspirador de la iglesia recobrada.
El Señor, quien es Aquel que tiene la llave de David y abre y ninguno cierra (Ap. 3:7), ha dado a la iglesia recobrada una “puerta abierta, la cual nadie puede cerrar” [v. 8]. Desde que el recobro de la vida de iglesia apropiada comenzó a principios del siglo XIX hasta el presente, ha habido una puerta que se ha mantenido abierta al recobro del Señor. Cuanto más el sistema del cristianismo ha tratado de cerrar la puerta, más ésta se abre. Pese a tanta oposición, la puerta hoy continúa abierta en todo el mundo. Esto se debe a que la llave está en la mano de Aquel que es la Cabeza de la iglesia, y no en manos de los opositores. (The Conclusion of the New Testament, págs. 2526-2527)
Lectura adicional: The Conclusion of the New Testament, mensaje 238; Life-study of Isaiah, mensaje 42
Witness Lee
¡Jesús es el Señor!