El arminianismo es una doctrina teológica cristiana fundada por Jacobo Arminio a principios del siglo XVII en los Países Bajos.
Esta doctrina se desarrolló como una respuesta al calvinismo, especialmente en lo que respecta a la predestinación y la gracia divina.
1. Libre Albedrío: Los seres humanos tienen la capacidad de aceptar o rechazar la gracia de Dios. La salvación no está predestinada de manera incondicional, sino que depende de la respuesta del individuo a la gracia divina.
2. Gracia Preveniente: Dios concede una gracia inicial a todas las personas, permitiéndoles tener la capacidad de elegir la salvación. Esta gracia no es irresistible; las personas pueden rechazarla.
3. Expiación Universal: Cristo murió por todos los seres humanos, no solo por los elegidos. La salvación está disponible para todos, pero solo aquellos que creen en Cristo, la recibirán.
4. Resistencia a la Gracia: Las personas pueden resistir la gracia de Dios. La salvación no es impuesta, sino que requiere la cooperación del individuo.
5. Perseverancia Condicional: Es posible que los creyentes pierdan su salvación si se apartan de la fe. La seguridad de la salvación depende de la continua fe y obediencia del creyente.
Como puede observarse, también posee puntos controversiales, como por ejemplo este último de la perseverancia del creyente, lo que haría que la salvación fuese por obras.
Esta doctrina se desarrolló como una respuesta al calvinismo, especialmente en lo que respecta a la predestinación y la gracia divina.
Principales Puntos del Arminianismo:
1. Libre Albedrío: Los seres humanos tienen la capacidad de aceptar o rechazar la gracia de Dios. La salvación no está predestinada de manera incondicional, sino que depende de la respuesta del individuo a la gracia divina.
2. Gracia Preveniente: Dios concede una gracia inicial a todas las personas, permitiéndoles tener la capacidad de elegir la salvación. Esta gracia no es irresistible; las personas pueden rechazarla.
3. Expiación Universal: Cristo murió por todos los seres humanos, no solo por los elegidos. La salvación está disponible para todos, pero solo aquellos que creen en Cristo, la recibirán.
4. Resistencia a la Gracia: Las personas pueden resistir la gracia de Dios. La salvación no es impuesta, sino que requiere la cooperación del individuo.
5. Perseverancia Condicional: Es posible que los creyentes pierdan su salvación si se apartan de la fe. La seguridad de la salvación depende de la continua fe y obediencia del creyente.
Como puede observarse, también posee puntos controversiales, como por ejemplo este último de la perseverancia del creyente, lo que haría que la salvación fuese por obras.