ECUADOR: ¿NO TODO EN LA BIBLIA ES "PALABRA DE DIOS"?
Panel sobre Biblia y género cuestiona aspectos fundamentales de la teología
protestante
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<< CUMBAYA, 25 septiembre 2001. Aunque quizás no fue la intención de los
organizadores, un panel sobre Biblia y género derivó aquí hacia un vivo
debate teológico acerca de la revelación, la cristología y el diálogo entre
las religiones. Un debate que tuvo sus protagonistas centrales en dos
teólogas brasileñas.>>
=== En el segundo día de la V Asamblea de la Asociación Ecuménica de
Teólogos y Teólogas del Tercer Mundo (EATWOT por sus siglas en inglés), tres
mujeres de Indonesia, Brasil y África del Sur presentaron sus visiones
acerca de la lectura de la Biblia en una perspectiva de género y abrieron
una caja de Pandora que difícilmente podrá cerrarse en los días que restan
del encuentro en Cumbayá.
=== Si es cierto que la fe cristiana acepta la autoridad de las Escrituras
como una autoridad que proviene de Dios, y que ese Dios se revela en esas
mismas Escrituras, también es verdad que no siempre coincidieron respecto de
la interpretación de algunos textos.
=== Pero si las diferencias en el pasado obedecieron a disputas e intereses
eclesiásticos y políticos, ahora la perspectiva de género parece levantar
nuevos e insalvables escollos en el camino de una interpretación homogénea
de la Biblia, especialmente por su cuestionamiento de que la revelación
bíblica sea íntegramente "palabra de Dios".
=== Las teólogas sudafricana e indonesia concentraron sus discursos en un
análisis sociológico de la situación de la mujer y se refirieron a historias
y ejemplos concretos de cómo algunos textos bíblicos pueden leerse desde la
perspectiva de género. En opinión de algunos delegados, la perspectiva de
género aumenta la dificultad en el ya complicado un diálogo entre la Biblia
y la espiritualidad indígena. Ese diálogo sería posible si existiera
compatibilidad y construcción de la unidad, pero el cristianismo propone una
fe personalizada en un Dios "varón" que es ajeno a la espiritualidad
indígena, señaló un teólogo mexicano.
=== Silvia Regina, teóloga brasileña y profesora de la Universidad Bíblica
Latinoamericana (UBL), describió las diferentes etapas en la reflexión
teológica de los últimos años. Destacó que "ningún proceso de lectura
bíblica, de exégesis o hermenéutica, es neutral o imparcial, sino que está
marcado por nuestro género, nuestra nacionalidad, nuestra edad, nuestra
clase y la etnia a la que pertenecemos", para agregar que los textos
bíblicos son también fruto de una realidad caracterizada por relaciones de
género. Por ello, dijo, "es necesario deconstruir el texto para restituirle
su mensaje original". Señaló asimismo que "hay textos bíblicos que no nos
sirven, ellos no pueden ser Palabra de Dios y no podemos considerarlos como
propuestas de vida para nosotros".
=== Una afirmación que encontró un fuerte eco en la intervención de otra
teóloga brasileña, la metodista Tania Mara Vieira Sampaio, quien señaló que
la Biblia "no es un manual que tiene todas las recetas, sino el conjunto de
las experiencias de fe de gente en distintas épocas y situaciones." Mara
añadió que es preciso relativizar los textos bíblicos y vaciar aquellos que
están "demasiado lleno de la dogmática y la teología". "No podemos leer
Jueces 19 (la historia del levita y su concubina) y proclamar que es Palabra
de Dios", dijo.
=== Respondiendo a la preocupación de otro participante acerca de dónde
queda la cristología en la lectura de la Biblia con una perspectiva de
género, Vieira Sampaio se refirió a la necesidad de revisar el planteamiento
cristológico. "La cristología aparece solamente a partir de los siglos IV o
V cuando era importante para el poder político afirmar que Cristo es el
Señor", declaró.
=== Más allá del cuestionamiento a la cristología, también se objetó el
concepto de un Dios único, incluso si es entendido como "padre" y "madre".
"Es preciso reconocer una nueva condición divina; que Dios no es un dios
único, sino plural", dijo Vieira Sampaio. Ese reconocimiento, concluyó la
profesora de la UBL, le permitirá al cristianismo rescatar la imagen de un
Dios humilde, sencillo, que dialoga. Y es, además, "el primer paso para
construir una cultura de paz".
Fuente: Alc
Redacción: ICPRESS
Panel sobre Biblia y género cuestiona aspectos fundamentales de la teología
protestante
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<< CUMBAYA, 25 septiembre 2001. Aunque quizás no fue la intención de los
organizadores, un panel sobre Biblia y género derivó aquí hacia un vivo
debate teológico acerca de la revelación, la cristología y el diálogo entre
las religiones. Un debate que tuvo sus protagonistas centrales en dos
teólogas brasileñas.>>
=== En el segundo día de la V Asamblea de la Asociación Ecuménica de
Teólogos y Teólogas del Tercer Mundo (EATWOT por sus siglas en inglés), tres
mujeres de Indonesia, Brasil y África del Sur presentaron sus visiones
acerca de la lectura de la Biblia en una perspectiva de género y abrieron
una caja de Pandora que difícilmente podrá cerrarse en los días que restan
del encuentro en Cumbayá.
=== Si es cierto que la fe cristiana acepta la autoridad de las Escrituras
como una autoridad que proviene de Dios, y que ese Dios se revela en esas
mismas Escrituras, también es verdad que no siempre coincidieron respecto de
la interpretación de algunos textos.
=== Pero si las diferencias en el pasado obedecieron a disputas e intereses
eclesiásticos y políticos, ahora la perspectiva de género parece levantar
nuevos e insalvables escollos en el camino de una interpretación homogénea
de la Biblia, especialmente por su cuestionamiento de que la revelación
bíblica sea íntegramente "palabra de Dios".
=== Las teólogas sudafricana e indonesia concentraron sus discursos en un
análisis sociológico de la situación de la mujer y se refirieron a historias
y ejemplos concretos de cómo algunos textos bíblicos pueden leerse desde la
perspectiva de género. En opinión de algunos delegados, la perspectiva de
género aumenta la dificultad en el ya complicado un diálogo entre la Biblia
y la espiritualidad indígena. Ese diálogo sería posible si existiera
compatibilidad y construcción de la unidad, pero el cristianismo propone una
fe personalizada en un Dios "varón" que es ajeno a la espiritualidad
indígena, señaló un teólogo mexicano.
=== Silvia Regina, teóloga brasileña y profesora de la Universidad Bíblica
Latinoamericana (UBL), describió las diferentes etapas en la reflexión
teológica de los últimos años. Destacó que "ningún proceso de lectura
bíblica, de exégesis o hermenéutica, es neutral o imparcial, sino que está
marcado por nuestro género, nuestra nacionalidad, nuestra edad, nuestra
clase y la etnia a la que pertenecemos", para agregar que los textos
bíblicos son también fruto de una realidad caracterizada por relaciones de
género. Por ello, dijo, "es necesario deconstruir el texto para restituirle
su mensaje original". Señaló asimismo que "hay textos bíblicos que no nos
sirven, ellos no pueden ser Palabra de Dios y no podemos considerarlos como
propuestas de vida para nosotros".
=== Una afirmación que encontró un fuerte eco en la intervención de otra
teóloga brasileña, la metodista Tania Mara Vieira Sampaio, quien señaló que
la Biblia "no es un manual que tiene todas las recetas, sino el conjunto de
las experiencias de fe de gente en distintas épocas y situaciones." Mara
añadió que es preciso relativizar los textos bíblicos y vaciar aquellos que
están "demasiado lleno de la dogmática y la teología". "No podemos leer
Jueces 19 (la historia del levita y su concubina) y proclamar que es Palabra
de Dios", dijo.
=== Respondiendo a la preocupación de otro participante acerca de dónde
queda la cristología en la lectura de la Biblia con una perspectiva de
género, Vieira Sampaio se refirió a la necesidad de revisar el planteamiento
cristológico. "La cristología aparece solamente a partir de los siglos IV o
V cuando era importante para el poder político afirmar que Cristo es el
Señor", declaró.
=== Más allá del cuestionamiento a la cristología, también se objetó el
concepto de un Dios único, incluso si es entendido como "padre" y "madre".
"Es preciso reconocer una nueva condición divina; que Dios no es un dios
único, sino plural", dijo Vieira Sampaio. Ese reconocimiento, concluyó la
profesora de la UBL, le permitirá al cristianismo rescatar la imagen de un
Dios humilde, sencillo, que dialoga. Y es, además, "el primer paso para
construir una cultura de paz".
Fuente: Alc
Redacción: ICPRESS