Hola a todos soy nueva en este foro y vengo a contar mi testimonio.
Primero que nada me costo muchísimo aceptar a Cristo en mi corazón, permitir que entrara en mi vida incluso cuando el siempre estuvo ahí presente. Es muy cierto eso que dicen que tenemos libre albedrío. Lo tengo. Yo por mucho tiempo negué la entrada de Dios a mi vida y eso solamente me llevo a la perdición. A una vida completamente alejada a su amor y su bondad.
Fui una gran pecadora, en cuerpo y alma. Fui rebelde y me revele con lo que parajodicamente me buscaba para sanarme.
Estuve tan mal que llegue a estar 3 veces internada en un centro psiquiátrico, sin respuestas, perdida, moribunda, y sin conocer la salvación.
Luego de una lucha muy intensa y dura conmigo, con el mundo y pareciera con el mismo Dios comencé a leerme la biblia y a entender su palabra.
Su amor me cura cada día, me devuelve la cordura, me da calma en medio de tempestades, y me alivia.
Necesito a Cristo a como el aire para respirar, es mi fiel compañía y es que hace que salga victoriosa en cada batalla.
Con tatuajes en mi piel, con un pasado que a veces me atormenta le pido todos los días a Dios perdón y misericordia, lamentablemente no conocí su palabra y no sabia que él siempre estuvo ahí para abrazarme, apoyarme y llevarme a su salvación.
Hoy por gloria de Dios, estoy, sana, salva. Y contenta de haber encontrado este foro, porque a veces necesito hablar muchas cosas y no consigo donde ni con quien.
Espero aquí sentirme escuchada, comprendida, y querida. Y nunca juzgada, que es lo que a veces me acompaña.
Un abrazo.
Primero que nada me costo muchísimo aceptar a Cristo en mi corazón, permitir que entrara en mi vida incluso cuando el siempre estuvo ahí presente. Es muy cierto eso que dicen que tenemos libre albedrío. Lo tengo. Yo por mucho tiempo negué la entrada de Dios a mi vida y eso solamente me llevo a la perdición. A una vida completamente alejada a su amor y su bondad.
Fui una gran pecadora, en cuerpo y alma. Fui rebelde y me revele con lo que parajodicamente me buscaba para sanarme.
Estuve tan mal que llegue a estar 3 veces internada en un centro psiquiátrico, sin respuestas, perdida, moribunda, y sin conocer la salvación.
Luego de una lucha muy intensa y dura conmigo, con el mundo y pareciera con el mismo Dios comencé a leerme la biblia y a entender su palabra.
Su amor me cura cada día, me devuelve la cordura, me da calma en medio de tempestades, y me alivia.
Necesito a Cristo a como el aire para respirar, es mi fiel compañía y es que hace que salga victoriosa en cada batalla.
Con tatuajes en mi piel, con un pasado que a veces me atormenta le pido todos los días a Dios perdón y misericordia, lamentablemente no conocí su palabra y no sabia que él siempre estuvo ahí para abrazarme, apoyarme y llevarme a su salvación.
Hoy por gloria de Dios, estoy, sana, salva. Y contenta de haber encontrado este foro, porque a veces necesito hablar muchas cosas y no consigo donde ni con quien.
Espero aquí sentirme escuchada, comprendida, y querida. Y nunca juzgada, que es lo que a veces me acompaña.
Un abrazo.