Versión Salmo 23:
Dios es mi amigo, nada me falta.
Siempre me acompaña,
por prados de fresca hierba,
hacia las aguas tranquilas
por camino de justicia su nombre también me guía.
Aunque sufra malos ratos
él está conmigo
nunca tengo miedo
su vara y su cayado me infunden aliento.
Adereza mesa delante de mi
en presencia de mis angustiadores y calumniadores.
Él unge mi cabeza con aceite
mi copa rebosa de su bondad.
El prepara una fiesta y me invita
¡siento profunda alegría!
porque Dios es mi casa
en cada uno de mis días.
Amén
Dios es mi amigo, nada me falta.
Siempre me acompaña,
por prados de fresca hierba,
hacia las aguas tranquilas
por camino de justicia su nombre también me guía.
Aunque sufra malos ratos
él está conmigo
nunca tengo miedo
su vara y su cayado me infunden aliento.
Adereza mesa delante de mi
en presencia de mis angustiadores y calumniadores.
Él unge mi cabeza con aceite
mi copa rebosa de su bondad.
El prepara una fiesta y me invita
¡siento profunda alegría!
porque Dios es mi casa
en cada uno de mis días.
Amén