COREA: LOS ÍDOLOS DEL FÚTBOL SE INCLINAN ANTE DIOS
Los pentacampeones brasileños festejaron el título muy cerca de su afición,
aunque antes, arrodillados y con las manos enlazadas, oraron a Dios
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<< SEUL. 1 julio 2002. las oraciones que han practicado los jugadores de
Brasil antes y después de disputar todos los partidos de este Mundial se
reopitió ayer en el centro del terreno de juego del estadio de Yokohama.
Dios, evidentemente, ha respondido a sus peticiones (y desoido a otros
creyentes de otros equipos).>>
=== Futbolistas, técnicos y ayudantes de la selección brasileña,
arrodillados sobre el césped, y con las manos enlazadas y en alto, oraron a
Dios ante más de 69.000 espectadores presentes (y millones de televidentes),
la mayoría de ellos ataviados con la camiseta canarinha, que observaron con
respeto ese momento tan íntimo y feliz de los nuevos campeones del mundo.
=== Al margen de la anécdota, sin duda es el testimonio público de lo que en
privado trasnmiten los creyentes y simpatizantes evangélicos que forman
parte de la selección, como Lucio, Kaká y Denilson. Al menos Dios está por
encima de los altares a los que suben a los futbolistas.
=== Después de la oración, la selección brasileña quiso festejar el
pentacampeonato muy cerca de su afición. Todos los campeones dieron la
vuelta olímpica, y Ronaldo, con su cuerpo envuelto en una inmensa bandera de
Brasil, también fue el gran protagonista durante la celebración, que vivió
otro momento emotivo cuando el capitán, Cafú, recibió la Copa del Mundo.
=== La explosión de júbilo en el estadio de Yokohama se produjo cuando Cafú
recibió la Copa del Mundo y en ese momento surgieron miles de trozos de
papel de plata y pajaritas de colores que cayeron desde lo más alto del
estadio. Una parte del césped cambió en unos pocos minutos del color verde
al plateado, muy cerca del estrado donde brasileños y alemanes habían
recibido los trofeos de campeones y subcampeones. Entonces, todas las
miradas en las pantallas gigantes del estadio se dirigieron a Ronaldo, el
mejor jugador del Mundial, que ya sobre el terreno de juego anunció que
dedicaba este título principalmente a su familia.
Fuente: Las Provincias
Redacción: ICPress
Los pentacampeones brasileños festejaron el título muy cerca de su afición,
aunque antes, arrodillados y con las manos enlazadas, oraron a Dios
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<< SEUL. 1 julio 2002. las oraciones que han practicado los jugadores de
Brasil antes y después de disputar todos los partidos de este Mundial se
reopitió ayer en el centro del terreno de juego del estadio de Yokohama.
Dios, evidentemente, ha respondido a sus peticiones (y desoido a otros
creyentes de otros equipos).>>
=== Futbolistas, técnicos y ayudantes de la selección brasileña,
arrodillados sobre el césped, y con las manos enlazadas y en alto, oraron a
Dios ante más de 69.000 espectadores presentes (y millones de televidentes),
la mayoría de ellos ataviados con la camiseta canarinha, que observaron con
respeto ese momento tan íntimo y feliz de los nuevos campeones del mundo.
=== Al margen de la anécdota, sin duda es el testimonio público de lo que en
privado trasnmiten los creyentes y simpatizantes evangélicos que forman
parte de la selección, como Lucio, Kaká y Denilson. Al menos Dios está por
encima de los altares a los que suben a los futbolistas.
=== Después de la oración, la selección brasileña quiso festejar el
pentacampeonato muy cerca de su afición. Todos los campeones dieron la
vuelta olímpica, y Ronaldo, con su cuerpo envuelto en una inmensa bandera de
Brasil, también fue el gran protagonista durante la celebración, que vivió
otro momento emotivo cuando el capitán, Cafú, recibió la Copa del Mundo.
=== La explosión de júbilo en el estadio de Yokohama se produjo cuando Cafú
recibió la Copa del Mundo y en ese momento surgieron miles de trozos de
papel de plata y pajaritas de colores que cayeron desde lo más alto del
estadio. Una parte del césped cambió en unos pocos minutos del color verde
al plateado, muy cerca del estrado donde brasileños y alemanes habían
recibido los trofeos de campeones y subcampeones. Entonces, todas las
miradas en las pantallas gigantes del estadio se dirigieron a Ronaldo, el
mejor jugador del Mundial, que ya sobre el terreno de juego anunció que
dedicaba este título principalmente a su familia.
Fuente: Las Provincias
Redacción: ICPress