"Jesús le contestó: “”Yo soy el camino, la verdad y la vida. Nadie puede llegar al Padre si no es por medio de mí".
Cómo hemos de entender lo que dice él, texto de Juan 14:6
- Autor Daniel1546
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Efe-E-Pe
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Es interesante como están surgiendo de repente tantas preguntas sobre la Verdad en el foro. Es fundamental en el hecho religioso, pues la Verdad es de Dios y esa Verdad nos conduce a Dios, es factual, no mero credo o mera doctrina. Incluso para el ateo hay una Verdad que busca con verdadera inquietud aunque no quiera asociarla con Dios, no pasa nada, hay una Verdad, es indudable.
¿Es la Verdad lo que nos puede unir a toda la especie humana?, ¿es la Verdad la Salvación?
Sin duda. Por eso la filosofía, la ciencia, la religión, la matemática, en definitiva: todos la buscamos. Los políticos hablan en muchas ocasiones de ella mintiendo con descaro. Las castas sacerdotales no cesan de manipularla en su interés, los pseudocientíficos la retuercen para hacer encajar sus chaladuras en medio de la vorágine actual de personas perdidas, vacías, carentes de Verdad.
¿Qué encarnó Jesús de Nazaret?, ¿qué nos llamó la atención para que su Verdad pudiera poner todo patas arriba?, en pocos siglos cayó el imperio romano, nacieron nuevos imperios, y en occidente tuvimos una época sumamente oscura cara al conocimiento y la tiniebla superó a la luz. Apenas pudo el Islam en sus buenos inicios traer saber a Europa sin poder llegar a cruzar la península Ibérica. El cristianismo transmitió la Verdad y a su vez la destrozó, ¡qué contrariedad!
Los judíos recibieron la Verdad, pero la crucificaron, ¡insensatos!, ¡no saben lo que hacen!!
Al final los musulmanes fueron cada vez más fundamentalistas y terminaron destrozando su propio saber, su propia historia y sus propios vestigios de una época que no regresará, en apariencia.
Y ahora... en este siglo... ¿dónde está la Verdad? Desde luego que queda claro que las religiones lamentablemente han manipulado, tergiversado, retorcido y machacado con saña esa Verdad que nos hizo. La ciencia en vez de buscar el bien común, el Reino del Amor, ha ido cada vez abrazando más ese destrozaverdades llamado "poder", ya sea político, ya sea capitalismo o ya sea militar, así se pone al servicio de lo que no nos beneficia a la Humanidad, ahí nunca estará la Verdad.
¿Y qué es la Verdad?, en su verdadera esencia están todas las respuestas, en su verdadero poder halló San Agustín respuestas que todavía hoy impresionan a los científicos en lo relativo al espacio-tiempo, Isaías dedujo la esfericidad de la Tierra, los grandes sabios hallaron principios inmanentes de nuestra mente, los médicos la observaban y aprendían. La Verdad se deja observar, se deja buscar, se hace la encontradiza. La Verdad nos busca, sale a nuestro encuentro. La Verdad no se halla sino en los espíritus libres, en los rincones donde se avanza hacia un futuro mejor, se halla en esas pequeñas ocasiones de iluminación que abren portales que escapan de nuestro alcance para recibir respuestas que nos acercan, precisamente, a la Verdad.
¿Es la Verdad lo que nos puede unir a toda la especie humana?, ¿es la Verdad la Salvación?
Sin duda. Por eso la filosofía, la ciencia, la religión, la matemática, en definitiva: todos la buscamos. Los políticos hablan en muchas ocasiones de ella mintiendo con descaro. Las castas sacerdotales no cesan de manipularla en su interés, los pseudocientíficos la retuercen para hacer encajar sus chaladuras en medio de la vorágine actual de personas perdidas, vacías, carentes de Verdad.
¿Qué encarnó Jesús de Nazaret?, ¿qué nos llamó la atención para que su Verdad pudiera poner todo patas arriba?, en pocos siglos cayó el imperio romano, nacieron nuevos imperios, y en occidente tuvimos una época sumamente oscura cara al conocimiento y la tiniebla superó a la luz. Apenas pudo el Islam en sus buenos inicios traer saber a Europa sin poder llegar a cruzar la península Ibérica. El cristianismo transmitió la Verdad y a su vez la destrozó, ¡qué contrariedad!
Los judíos recibieron la Verdad, pero la crucificaron, ¡insensatos!, ¡no saben lo que hacen!!
Al final los musulmanes fueron cada vez más fundamentalistas y terminaron destrozando su propio saber, su propia historia y sus propios vestigios de una época que no regresará, en apariencia.
Y ahora... en este siglo... ¿dónde está la Verdad? Desde luego que queda claro que las religiones lamentablemente han manipulado, tergiversado, retorcido y machacado con saña esa Verdad que nos hizo. La ciencia en vez de buscar el bien común, el Reino del Amor, ha ido cada vez abrazando más ese destrozaverdades llamado "poder", ya sea político, ya sea capitalismo o ya sea militar, así se pone al servicio de lo que no nos beneficia a la Humanidad, ahí nunca estará la Verdad.
¿Y qué es la Verdad?, en su verdadera esencia están todas las respuestas, en su verdadero poder halló San Agustín respuestas que todavía hoy impresionan a los científicos en lo relativo al espacio-tiempo, Isaías dedujo la esfericidad de la Tierra, los grandes sabios hallaron principios inmanentes de nuestra mente, los médicos la observaban y aprendían. La Verdad se deja observar, se deja buscar, se hace la encontradiza. La Verdad nos busca, sale a nuestro encuentro. La Verdad no se halla sino en los espíritus libres, en los rincones donde se avanza hacia un futuro mejor, se halla en esas pequeñas ocasiones de iluminación que abren portales que escapan de nuestro alcance para recibir respuestas que nos acercan, precisamente, a la Verdad.
Jehová le encargó a su Hijo un papel muy importante, y esa es la razón principal por la que solo podemos acercarnos a Dios a través de Jesús. El Padre lo convirtió en la figura central, el elemento clave en el desarrollo de todos sus propósitos (2 Corintios 1:20; Colosenses 1:18-20). Para comprender ese papel tan importante, debemos reflexionar sobre lo que ocurrió en el jardín de Edén, cuando la primera pareja humana se unió a la rebelión de Satanás contra Jehová (Génesis 2:16, 17; 3:1-6).
En Juan 13:33, Jesús dijo: “Hijos míos, todavía estaré con vosotros un poco más de tiempo; me buscaréis, pero como dije a los judíos, os digo ahora a vosotros: A donde yo voy, vosotros no podéis ir”. Esto llevó a Pedro a preguntar a dónde iba (versículo 36). Pedro y los demás no entendieron que Jesús estaba hablando de su muerte y ascensión al cielo. La respuesta de Jesús fue: “A donde yo voy, no me podéis seguir ahora, pero me seguiréis más tarde”. Pedro seguía sin entender y declaró que seguiría a Jesús a cualquier parte e incluso daría su vida si fuera necesario. A medida que Jesús continuaba enseñando pacientemente a sus discípulos, comenzó a hablar más claramente sobre el cielo, describiendo el lugar que iba a preparar para ellos (Juan 14:2-3). Entonces Jesús dijo: “Sabéis el camino al lugar adonde yo voy” (versículo 4). Hablando por los demás, Tomás dijo que ellos no sabían a dónde iba, así que ¿cómo iban a saber cómo seguirlo allí? Fue en respuesta a esta pregunta que Jesús pronunció una de las siete famosas declaraciones “Yo soy”.
Yo soy – En el idioma griego, “Yo soy” es una forma muy intensa de referirse a uno mismo. Sería comparable a decir, “Yo mismo, y sólo Yo, soy”. En varias otras ocasiones en los Evangelios encontramos a Jesús usando estas palabras. En Mateo 22:32 Jesús cita Éxodo 3:6, donde Dios usa la misma forma intensiva para decir, “Yo soy el Dios de Abraham, y el Dios de Isaac, y el Dios de Jacob”. En Juan 8:58, Jesús dijo, “De cierto, de cierto os digo: Antes que Abraham fuese, yo soy”. Los judíos entendieron claramente que Jesús se estaba llamando a sí mismo Dios porque tomaron piedras para apedrearlo por cometer blasfemia al equipararse a Dios. En Mateo 28:20, cuando Jesús dio la Gran Comisión, le dio énfasis al decir, “Yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo”. Cuando los soldados vinieron a buscar a Jesús en el jardín la noche antes de su crucifixión, Él les dijo: “Yo soy”, y sus palabras fueron tan poderosas que los soldados cayeron al suelo (Juan 18:4-6). Estas palabras reflejan el mismo nombre de Dios en hebreo, Yahweh, que significa “ser” o “el que existe por sí mismo”. Es el nombre del poder y la autoridad, y Jesús lo reclamó como suyo.
El camino: Jesús usó el artículo definido para distinguirse como “el único camino”. Un camino es un sendero o ruta, y los discípulos habían expresado su confusión sobre a dónde iba y cómo podían seguirlo. Como les había dicho desde el principio, Jesús les estaba diciendo nuevamente (y a nosotros): “Síganme”. No hay otro camino al cielo, no hay otro camino al Padre. Pedro reiteró esta misma verdad años después a los gobernantes de Jerusalén, diciendo acerca de Jesús: “En ningún otro hay salvación, porque no hay otro nombre bajo el cielo dado a los hombres en que podamos ser salvos” (Hechos 4:12). La naturaleza exclusiva del único camino a la salvación se expresa en las palabras “Yo soy el camino”.
La verdad – Nuevamente Jesús usó el artículo definido para enfatizar que Él es “la única verdad”. El Salmo 119:142 dice: “Tu ley es la verdad”. En el Sermón del Monte, Jesús recordó a Sus oyentes varios puntos de la Ley, y luego dijo: “Pero yo os digo…” (Mateo 5:22, 28, 32, 34, 39, 44), equiparándose así a Sí mismo con la Ley de Dios como la norma autoritativa de justicia. De hecho, Jesús dijo que Él vino a cumplir la Ley y los profetas (Mateo 5:17). Jesús, como la Palabra encarnada de Dios (Juan 1:1), es la fuente de toda verdad.
La vida – Jesús acababa de hablarles a Sus discípulos acerca de Su muerte inminente, y ahora estaba afirmando ser la fuente de toda vida. En Juan 10:17-18, Jesús declaró que daría su vida por sus ovejas y luego la recuperaría. Habló de su autoridad sobre la vida y la muerte como algo que le había sido otorgado por el Padre. En Juan 14:19, dio la promesa de que “porque yo vivo, vosotros también viviréis”. La liberación que estaba a punto de proporcionar no era una liberación política o social (que la mayoría de los judíos buscaban), sino una verdadera liberación de una vida de esclavitud al pecado y a la muerte a una vida de libertad en la eternidad.
Con estas palabras, Jesús se estaba declarando a sí mismo el gran “Yo Soy”, el único camino al cielo, la única medida verdadera de justicia y la fuente de la vida física y espiritual. Estaba afirmando su derecho a ser el Dios de la Creación, el Señor que bendijo a Abraham y el Santo que habita la eternidad. Lo hizo para que los discípulos pudieran enfrentar los días oscuros que se avecinaban y llevar adelante la misión de declarar el evangelio al mundo. Por supuesto, sabemos por las Escrituras que todavía no entendían, y se necesitaron varias visitas de su Señor resucitado para sacarlos de su incredulidad. Una vez que entendieron la verdad de Sus palabras, se convirtieron en personas cambiadas, y el mundo nunca volvió a ser el mismo.
Entonces, ¿cómo lo seguimos hoy? De la misma manera que lo hicieron los discípulos hace mucho tiempo. Oyeron las palabras de Jesús y las creyeron. Tomaron Sus palabras y las obedecieron. Confesaron sus pecados a Jesús como su Señor y Dios. Creyeron que Él murió para tomar el castigo de sus pecados y redimirlos.
Saludos
Una y mil veces hay que explicarle a los Tj que Jesús es el verbo que sale de la boca del Padre.
Ese verbo que ya estaba con Dios y era Dios, y se hizo carne, y fue llamado Yeshua.
La mayoría no entiende la teofania divina, y creen que ser Hijo de Dios es a la manera humana de un padre carnal con su hijo carnal, cómo dos personas distintas.
El mundo ciertamente nunca volvió a ser el mismo, ¿pero fue mejor el mundo?
Es importante reflexionar sobre los acontecimientos históricos posteriores. No olvidemos aquellas peleas cristianas en pos de la verdad, la definición paulina del cristianismo y tantas herejías que empezaron poco a poco a formar un "Jesucristo" que en poco o nada se parecía a si mismo, si es que de verdad entendemos el evangelio que citas de San Juan, que no es más que una experiencia y conforma la teología del cristianismo basada en un mandamiento supremo, el del amor entre todo ser humano.
La consecuencia del cristianismo + poder fue que Roma y el emperador Constantino jugaron hábilmente la gran baza de la religión para incrementar el fanatismo. Nos joda o no el poder + religión siempre han dado como resultado la misma base de locura humana, allá donde se junta biología y religión fanática se antepone la guerra, en ocasiones el odio al conocimiento y la absoluta falta de amor.
Cuando progresivamente el imperio romano fue declinando, la superstición ganó cada vez más enteros, la desorganización fue cada vez mayor y todos echaron mano de "Cristo" para justificar en sus respectivos reinos cristianos absolutas salvajadas, siempre en pugna con el poder de Roma y un eterno equilibrio-desequilibrio que hacía de la cultura un enemigo a batir, no fuera que la gente pensase demasiado, no interesaba, nunca interesó, ni tampoco interesa ahora.
Hasta el siglo XIII no regresó la filosofía, fue gracias a la intensa labor de los copistas que salvaron desde el VIII numerosos documentos en la abadías, las que eran entonces "guardianas" del saber.
Europa especialmente vivió una época muy oscura, si alguno se aventura en saber cómo vivía una persona en la época de la "cruel" Roma y cómo vivía en la época feudal, creo que no tendrá la menor duda en escoger Roma. El destrozo causado a la cultura clásica fue tal que hasta el Renacimiento no se retomaron con fuerza todos aquellos avances de la época de Ptolomeo que en buena parte perecieron bajo la furia de algunos que en poco o nada habían aprendido de su Maestro, dando con motivaciones políticas rienda suelta a su barbarie en Alejandría, que pagó la pobre Hipatia.
Todavía hoy muchos cristianos fundamentalistas ignoran a Eratóstenes, que con ingenio y pocos medios fue capaz de medir el radio de la Tierra. Ahí les tenemos, defendiendo absurdeces. Mi mayor temor es que estemos regresando a una edad media tecnológica, pues el saber no consiste en tener información, sino en poder razonar, conocer y entender, en abrir la mente al Infinito, desgraciadamente el auge de los tecnofascismos repletos eso si de elementos cristianos, parece que desean regresar a la edad media.
Añadiendo más información a tu buen comentario:
Una información nos pregunta: ¿Qué es la palabra de Dios? ¿Puede referirse también a una persona?
La respuesta que da la Biblia; Es un poco largo, pero no tiene desperdicio:
En la Biblia, la expresión “la palabra de Dios” por lo general se refiere a cualquier mensaje o conjunto de mensajes del Creador (Lucas 11:28). En unos cuantos pasajes, “La Palabra de Dios” y “la Palabra” es un título que se le da a una persona (Apocalipsis) 19:13; Juan 1:14).Un mensaje divino. A menudo, los profetas afirmaban que su mensaje era palabra de Dios. Por ejemplo, cuando Jeremías comenzaba a profetizar decía: “Empezó a ocurrirme la palabra de Jehová” (Jeremías 1:4, 11, 13; 2:1). Antes de informar a Saúl que Dios lo había elegido para ser rey, el profeta Samuel le dijo: “Detente ahora para que te deje oír la palabra de Dios” (1 Samuel 9:27).
Una persona. En algunas ocasiones, se utiliza el título “la Palabra” para hablar de Jesucristo, tanto como criatura espiritual en el cielo como hombre perfecto en la Tierra. ¿Cómo sabemos que se refiere a Jesús? Veamos algunas razones.
- La Palabra fue la primera creación. “En el principio la Palabra era, estaba en el principio con Dios” (Juan 1:1, 2). Jesús es “el primogénito de toda la creación; él es antes de todas las otras cosas” (Colosenses 1:13-15, 17).
- La Palabra llegó a ser un humano y vivió en la Tierra. Juan 1:14 dice: “La Palabra vino a ser carne y residió entre nosotros”. Jesucristo “se despojó a sí mismo y tomó la forma de un esclavo y llegó a estar en la semejanza de los hombres” (Filipenses 2:5-7).
- La Palabra es el hijo de Dios. En el mismo versículo que dice que “la Palabra vino a ser carne”, el apóstol Juan añadió: “Tuvimos una vista de su gloria, gloria como la que pertenece a un hijo unigénito de parte de un padre” (Juan 1:14). Y fue el propio Juan que escribió: “Jesucristo es el Hijo de Dios” (1 Juan 4:15).
- La Palabra tiene las cualidades de un dios. En la Biblia leemos que “la Palabra era un dios” o “era divina” (Juan 1:1; Los escritos originales de la comunidad del discípulo “amigo” de Jesús, del biblista católico Senén Vidal). Jesús es un fiel reflejo de la gloria de Dios y “la representación exacta de su mismo ser” (Hebreos 1:2, 3).
- La Palabra es un rey. Según las Escrituras, la Palabra de Dios tiene “muchas diademas”, o coronas, sobre su cabeza (Apocalipsis 19:12, 13). La Palabra también recibe el título de “Rey de reyes y Señor de señores” (Apocalipsis 19:16). Y de Jesús se dice que es “el Rey de los que reinan y Señor de los que gobiernan como señores” (1 Timoteo 6:14, 15).
- La Palabra es el portavoz de Dios. Según parece, la persona que lleva este título es alguien a quien Dios utiliza para transmitir información e instrucciones. Jesús cumplió esa función. Él mismo declaró: “El Padre mismo, que me ha enviado, me ha dado mandamiento en cuanto a qué decir y qué hablar [...]. Por lo tanto, las cosas que hablo, así como el Padre me las ha dicho, así las hablo” (Juan 12:49, 50).
Ricardo, por supuesto, todos los cristianos lo entienden. "Jesús le contestó: “”Yo soy el camino, la verdad y la vida. Nadie puede llegar al Padre si no es por medio de mí". Juan 14:6.
Pero muchos lo interpretan de varias maneras. Por ejemplo: Muchos piensan que al morir Jesús automáticamente todos los cristianos que ejerzan fe en ese sacrificio de Jesús subirán al cielo, como bien sabes, solo un grupo reducido tendrán ese privilegio de ser reyes y sacerdotes con Jesús.
Gobernarán, con Cristo, por los 1000. Años predichos, y gobernarán a los que pasen el Armagedón, todos los resucitados, desde Abel, hasta el día de juicio de la gran tribulación, como sabes Ricardo, antes de que acabe la gran tribulación, los Ungidos por Espíritu que queden en la tierra, ascenderán al cielo en un abrir y cerrar de ojos, sus cuerpos se quedarán aquí en la tierra, y a continuación Dios traerá el Armagedón.
Un detalle que te quería comentar y es bueno que todos lo sepan, durante la gran Tribulación se seguirá predicando las buenas noticias del Reino de Dios, ¿Sabes por qué?, Porque a muchos que en este sistema se les ha predicado sobre los acontecimientos predichos que sucederán, muchos discernirán que eso se había predicado, y cambiarán de postura, y Dios se alegrará de su arrepentimiento, y los aceptará y serán librados del Armagedón.
SALUDOS, RICARDO
-Soy consciente que hay versículos bíblicos que requieren de interpretación, y que entre varias opciones resulta difícil decidirse por alguna. Pero esto no es así siempre ni con todos.
-Pretender interpretar un texto claro probablemente signifique hacerle decir lo que queremos que diga. Juan 14:6 es así de sencillo, pero luego Felipe necesitará que Jesús ahonde la explicación.
No amigo, no estás comprendiendo mi postura.
Hay algo que se llama "las dos manifestaciones de Dios Padre"
El espíritu Santo y el Verbo Divino.
No existe tal cosa cómo que el Padre le dió un título a Jesús.
Jesus mismo es el verbo hecho hombre.
Es fácil de entender pero te cuesta aceptarlo.
Uds los TJ cambiaron sus escrituras para acomodar las herejias del analfabeto CT Rusell. El texto original del koine griego dice bien claro quien es Jesuscristo.
Logos es el término griego que se traduce como “palabra”, “discurso”, “principio” o “pensamiento”. En la filosofía griega, también se refería a una razón universal y divina o a la mente de Dios.
En el Nuevo Testamento, el Evangelio de Juan comienza diciendo: “En el principio era el Verbo, y el Verbo estaba con Dios, y el Verbo era Dios. Este estaba en el principio con Dios. Todas las cosas por medio de él fueron hechas, y sin él nada de lo que ha sido hecho, fue hecho. En él estaba la vida, y la vida era la luz de los hombres” (Juan 1:1-4). Aquí queda claro que el “Verbo” o Logos es una referencia a Jesucristo. Es El, Jesuscristo el Creador de TODAS las cosas.
Mas claro ni el agua. Pero como no se acomodaba a la teologia torcida de de CT Rusell, decidio cambiar el texto en su version diabolica y asi engatuzar a todos los demas analfabetos y ciegos espirituales. Y hasta el sol de hoy
Jesucristo ES DIOS, Eterno, Infinito, Omniciente, Omnipotente, Inefable, Inmutable y Perfecto. Es el Alfa y el Omega, el principio y el fin; de eternidad a eternidad.
Lees la escrituras pero no las entiendes porque tu mente esta cerrada por la herejia. Hasta que no le ruegues a Dios que abra tus ojos seguiras hundido en la perdicion en que te encuentras.
"Yo soy el Alfa y la Omega," dice el Señor Dios, "el que es y que era y que ha de venir, el Todopoderoso." Apo 1:8 -- Este es claramente Dios hablando y describiendose a si mismo. El texto no tiene ambiguedad ninguna.
Uno de los significados de que Jesús sea el “Alfa y la Omega” es que Él estuvo en el principio de todas las cosas y estará al final. Equivale a decir que siempre existió y siempre existirá. Fue Cristo, como segunda Persona de la Trinidad, quien llevó a cabo la creación: “Todas las cosas por medio de él fueron hechas, y sin él nada de lo que ha sido hecho, fue hecho” (Juan 1:3), y su Segunda Venida será el principio del fin de la creación tal como la conocemos (2 Pedro 3:10). Como Dios encarnado, Él no tiene principio, ni tendrá fin con respecto al tiempo, siendo de eternidad a eternidad.
" Cuando Lo vi, caí como muerto a Sus pies. Y El puso Su mano derecha sobre mí, diciendo: "No temas, Yo soy el Primero y el Ultimo, y el que vive, y estuve muerto. Pero ahora estoy vivo por los siglos de los siglos, y tengo las llaves de la muerte y del Hades". Apo 1:17-18
Ahi esta otra vez. Dios mismo hablando. Pero cuando Dios estuvo muerto? Y cuando resucito de entre los muertos? En la cruz en Golgota y en la tumba en el jardin de Getsemane!!! Mas claro ni el agua.
Te das cuenta de tu seguera espiritual? Te percatas que te han mentido y has aceptado la mentira sin cuestionarla y aun cuando la evidencia en la escrituras te pega en la cara te reusas a creerla. No te das cuenta de la profundidad de tu error?
Este es mi ultimo epigrafe en respuesta a los tuyos. He hecho todo lo posible por demostrarte que estas dentro de una secta peligrosisima e irremediablemente perdido, de acuerdo a la palabra de Dios. Aun cuanto te niegues a aceptar lo que te he presentado, estoy seguro que despues de leerlo nunca podras olvidarlo. Solo deseo que Dios se apiade de ti y te permita un apice de luz atraves de Su espiritu para que puedas despertar y abrir los ojos a la fe verdadera. La fe que te lleve a creer que SOLO Cristo Jesus puede limpiar tus pecados con Su sangre divina a traves de su sacrificio Sempiterno.
Estoy seguro que no me vas a contestar ya que no encontraras argumento biblico ninguno que pueda contradecir la palabra de Dios cuando es transparente y describe la voz del Dios verdadero.
De veras te deseo lo mejor.
Efe-E-Pe
Círculos concéntricos
No está bien solo leer lo que a uno le gusta...
Jesús dijo:
- No se turbe vuestro corazón; creéis en Dios, creed también en mí. En la casa de mi Padre muchas moradas hay; si así no fuera, yo os lo hubiera dicho; voy, pues, a preparar lugar para vosotros. Y si me fuere y os preparare lugar, vendré otra vez, y os tomaré a mí mismo, para que donde yo estoy, vosotros también estéis. Y sabéis a dónde voy, y sabéis el camino.
- Señor -preguntó Tomás-, no sabemos a dónde vas; ¿cómo, pues, podemos saber el camino?
- Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí. Si me conocieseis, también a mi Padre conoceríais; y desde ahora le conocéis, y le habéis visto.
- Señor -dijo Felipe-, muéstranos el Padre, y nos basta.
- ¿Tanto tiempo hace que estoy con vosotros, y no me has conocido, Felipe? El que me ha visto a mí, ha visto al Padre; ¿cómo, pues, dices tú: Muéstranos el Padre? ¿No crees que yo soy en el Padre, y el Padre en mí? Las palabras que yo os hablo, no las hablo por mi propia cuenta, sino que el Padre que mora en mí, él hace las obras. Creedme que yo soy en el Padre, y el Padre en mí; de otra manera, creedme por las mismas obras. De cierto, de cierto os digo: El que en mí cree, las obras que yo hago, él las hará también; y aun mayores hará, porque yo voy al Padre. Y todo lo que pidiereis al Padre en mi nombre, lo haré, para que el Padre sea glorificado en el Hijo. Si algo pidiereis en mi nombre, yo lo haré.
¿Ves por qué te digo que las citas se tiene que leer COMPLETAS? En todo lo que Jesús dijo, quedas como un mentirosillo.
Ese es el mal de este foro, la "sola scriptura" y no entender el conjunto.
Yo creo que de la Biblia uno puede crear cualquier Dios imaginable si se lo propone con citas de aquí y de allá, y no digamos lo que acabo de replicar al respecto de Lucas decapitando personas en su parábola de las minas que es de su autoría claramente interpolada y diferente de la de los talentos de Mateo que es otro evangelista muy dado a añadir hornos eternos.
Por eso afirmo siempre que puedo, que sin entender el evangelio de San Juan es imposible entender la nueva Alianza y la revelación en la Cruz. Jesús habría sido un profeta más, a lo sumo un mesías extraño que como en Marcos sacó demonios a mil e hizo algunos milagros.
Pero si no añadimos el Sermón de la Montaña o entendemos el mandamiento supremo del evangelio de Juan el cristianismo cojea y mucho, como tantos "cojos" que Jesús salvó y los puso a andar, ¿para qué?, precisamente para caminar ese Camino, es más que un camino, mucho más.