"Biblia pagana” en Uruguay

28 Febrero 1999
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El Intendente del Departamento de Canelones (Uruguay) y eventual presidenciable Yamandú Orsi, envió una nota al Plenario Nacional de su partido (Frente Amplio) donde entre otras cosas expresó:

“En tiempos del culto al yoísmo, al ordeno y mando, créanme que no es poco pertenecer a una fuerza cuyos dirigentes no pueden hacer lo que se les cante, sino que están sujetos, obligados, a cumplir lo que emana de esa síntesis colectiva”, acotó el intendente, y señaló que el programa de su fuerza política será la “biblia pagana y frenteamplista”.

Si en Uruguay, en los ámbitos políticos y gubernamentales, y aun hablando entre los medios de difusión, un jerarca se expresara con alguna referencia a la Biblia cristiana (Antiguo y Nuevo Testamento), de inmediato se le acusaría de clericalismo o atentar contra el laicismo. Los rostros de los testigos de tal declaración se verían horrorizados en las notas periodísticas ¡un susto mayúsculo!

Sin embargo, no me enteré que nadie haya protestado por lo de una “biblia pagana”.

Aun el incrédulo intuye que toda la verdad necesaria al bienestar del ciudadano, su familia y la nación, reside en la Palabra de Dios.

Pues ahora no encuentran nada mejor que reeditarla ¡pero como “biblia pagana”!


Cordiales saludos
 
Hermano Ricardo:

En el Uruguay, un político que se declare abiertamente ateo, ¿gana por ello más o menos rechazo por parte de la ciudadanía, o no influye en absoluto?
¿Y si se muestra como católico practicante?

En mi país tengo la impresión que declararse abiertamente ateo (no sin religión, sino ateo) es ligeramente negativo ante las preferencias electorales y el apoyo popular.
Algo que gana popularidad, sin embargo, es declararse a favor de las tesis de Jesús, sin favorecer ninguna religión en particular. Así lo ha hecho nuestro presidente actual. Dice gente de su movimiento que profesa en su intimidad alguna forma de cristianismo evangélico.

Eso sí: ser abiertamente católico practicante generalmente disminuye el apoyo popular, quizá porque se asocia a apoyo del alto clero, al que a la vez se le asocian conceptos como complicidad con el Estado o corrupción.
 
Hermano Ricardo:

En el Uruguay, un político que se declare abiertamente ateo, ¿gana por ello más o menos rechazo por parte de la ciudadanía, o no influye en absoluto?
¿Y si se muestra como católico practicante?

En mi país tengo la impresión que declararse abiertamente ateo (no sin religión, sino ateo) es ligeramente negativo ante las preferencias electorales y el apoyo popular.
Algo que gana popularidad, sin embargo, es declararse a favor de las tesis de Jesús, sin favorecer ninguna religión en particular. Así lo ha hecho nuestro presidente actual. Dice gente de su movimiento que profesa en su intimidad alguna forma de cristianismo evangélico.

Eso sí: ser abiertamente católico practicante generalmente disminuye el apoyo popular, quizá porque se asocia a apoyo del alto clero, al que a la vez se le asocian conceptos como complicidad con el Estado o corrupción.
-En Uruguay, un político nunca se va a declarar ateo ¡aunque tampoco religioso y cristiano menos! Eso se entiende que está comprimido a su propia personalidad.

-Cuando el 1ero. de Marzo del 2.000 asumió como Presidente el Dr. Jorge Batlle Ibáñez, al ser investido quiso adjudicar tal responsabilidad a algo superior, y cuando iba a decir "a Dios" tartamudeó y optó por decir "a los dioses". Era masón. Quiso conformar a creyentes e incrédulos.


Cordiales saludos
 
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Reacciones: Pancho Frijoles
-En Uruguay, un político nunca se va a declarar ateo ¡aunque tampoco religioso y cristiano menos! Eso se entiende que está comprimido a su propia personalidad.

-Cuando el 1ero. de Marzo del 2.000 asumió como Presidente el Dr. Jorge Batlle Ibáñez, al ser investido quiso adjudicar tal responsabilidad a algo superior, y cuando iba a decir "a Dios" tartamudeó y optó por decir "a los dioses". Era masón. Quiso conformar a creyentes e incrédulos.


Cordiales saludos
Pero José Mújica se decía ateo el igual fue electo.