Así de ciegos.
Leopoldo aun pensaba en el documental visto,
y en eso llegó Evaristo, que a su lado se sentaba.
-¿Sabes que el murciélago es de limitada visión?
Más del día ellos no son; sólo de noche los ves.-
-Y papá...¿porqué razón? La luz les vendría muy bien.-
- Para poder ver también, las orejas son opción.
Y al volar, muy a pesar, por miles entre las rocas,
verás abiertas sus bocas y a ninguno tropezar.-
-Ciegos; y vuelan unidos, y ¿todo esto en tinieblas?-
-Si mijo, pues ni con niebla, se detienen los sonidos.
En sus piruetas aéreas, frecuencias ellos emiten;
las ondas que se transmiten, rebotan con la materia,
y al ser otra vez captadas, por un diseño preciso,
que el Creador a ellos les hizo, de orejas bien equipadas,
sin tropezar maniobran, en sus vuelos malabares,
pues como grandes radares, sus bocas y orejas obran.-
-Asombroso.- -Si Evaristo.- Y en silencio meditaba
-Papá, ¿sabes qué pensaba? Ya yo sé... lo tengo. ¡Listo!-
-Este viernes me pidieron predicar en el servicio,
y aunque ya tenía indicio, por versos que me vinieron.
Aún sin título estaba , pero gracias a Dios doy,
pues lo que he aprendido hoy, me dió lo que me faltaba.-
-¿Y qué mensaje te ha dado, el Señor, querido hijo?-
-De lo que el concilio dijo, cuando el ciego fué sanado.
Hablaré de los que viendo, parecen no tener ojos;
que oyen, mas a su antojo, del Señor siguen huyendo.
Ese es un tema gordo. Y me lo dió Dios. ¿Papá viste?-
-¿Qué título le pusiste?- Pregunta ansioso, Leopoldo.
-Por el tema que yo abordo, es este: (y dice en sosiego)
Hay gente que están más ciegos, que un murciélago sordo.-
Erskine. 2005
Leopoldo aun pensaba en el documental visto,
y en eso llegó Evaristo, que a su lado se sentaba.
-¿Sabes que el murciélago es de limitada visión?
Más del día ellos no son; sólo de noche los ves.-
-Y papá...¿porqué razón? La luz les vendría muy bien.-
- Para poder ver también, las orejas son opción.
Y al volar, muy a pesar, por miles entre las rocas,
verás abiertas sus bocas y a ninguno tropezar.-
-Ciegos; y vuelan unidos, y ¿todo esto en tinieblas?-
-Si mijo, pues ni con niebla, se detienen los sonidos.
En sus piruetas aéreas, frecuencias ellos emiten;
las ondas que se transmiten, rebotan con la materia,
y al ser otra vez captadas, por un diseño preciso,
que el Creador a ellos les hizo, de orejas bien equipadas,
sin tropezar maniobran, en sus vuelos malabares,
pues como grandes radares, sus bocas y orejas obran.-
-Asombroso.- -Si Evaristo.- Y en silencio meditaba
-Papá, ¿sabes qué pensaba? Ya yo sé... lo tengo. ¡Listo!-
-Este viernes me pidieron predicar en el servicio,
y aunque ya tenía indicio, por versos que me vinieron.
Aún sin título estaba , pero gracias a Dios doy,
pues lo que he aprendido hoy, me dió lo que me faltaba.-
-¿Y qué mensaje te ha dado, el Señor, querido hijo?-
-De lo que el concilio dijo, cuando el ciego fué sanado.
Hablaré de los que viendo, parecen no tener ojos;
que oyen, mas a su antojo, del Señor siguen huyendo.
Ese es un tema gordo. Y me lo dió Dios. ¿Papá viste?-
-¿Qué título le pusiste?- Pregunta ansioso, Leopoldo.
-Por el tema que yo abordo, es este: (y dice en sosiego)
Hay gente que están más ciegos, que un murciélago sordo.-
Erskine. 2005