Aprender a ver
Capítulo 1 de 2
Lucas 5:17-24
Aconteció un día, que él estaba enseñando, y estaban sentados los fariseos y doctores de la ley, los cuales habían venido de todas las aldeas de Galilea, y de Judea y Jerusalén; y el poder del Señor estaba con él para sanar. Y sucedió que unos hombres que traían en un lecho a un hombre que estaba paralítico, procuraban llevarle adentro y ponerle delante de él. Pero no hallando cómo hacerlo a causa de la multitud, subieron encima de la casa, y por el tejado le bajaron con el lecho, poniéndole en medio, delante de Jesús. Al ver él la fe de ellos, le dijo: Hombre, tus pecados te son perdonados. Entonces los escribas y los fariseos comenzaron a cavilar, diciendo: ¿Quién es éste que habla blasfemias? ¿Quién puede perdonar pecados sino sólo Dios? Jesús entonces, conociendo los pensamientos de ellos, respondiendo les dijo: ¿Qué caviláis en vuestros corazones? ¿Qué es más fácil, decir: Tus pecados te son perdonados, o decir: Levántate y anda?
Pues para que sepáis que el Hijo del Hombre tiene potestad en la tierra para perdonar pecados (dijo al paralítico): A ti te digo: Levántate, toma tu lecho, y vete a tu casa.
Estas son noches de unción y de enseñanza.
II Corintios 4:18
No mirando nosotros las cosas que se ven, sino las que no se ven; pues las cosas que se ven son temporales, pero las que no se ven son eternas.
No miramos las cosas que se ven, sino las que no se ven. Pues las cosas que se ven son temporales, pero las que no, son eternas.
Podemos hablar de las terrenales y eternas. Pero déjeme hablar acerca de ver las cosas que no se ven, no las que se ven. Como podemos caminar bajo el poder de Dios si las cosas que vemos nos afectan en nuestra manera de hablar, de sentir, de creer, más que las cosas que no vemos. Por ejemplo, quieres ser sano de la enfermedad y todo tu énfasis está en ella. Lo que dicen los médicos, los pacientes; pasas media hora hablando de eso, sin un sólo versículo bíblico. Te están afectando más las cosas que se ven que las que no se ven. O tienes un pleito con una persona, y ves el problema y no los demonios que no ves que están provocando lo que ves. ¿Cómo puedes ser espiritual si el mundo nos condiciona la conducta a nosotros?
II Corintios 5:7
Porque por fe andamos, no por vista.
Para caminar en el poder de Dios, caminas por lo que ves o no ves. ¿O será que lo que tenemos que aprender es a ver? Tenemos que aprender a ver. Vamos a ver lo que la vista tiene que ver con el poder de Dios. Cuando vemos algo, inmediatamente, recibimos una influencia para actuar. Por ejemplo, si eres una persona llena de prejuicios por lo que ves, no vas a poder caminar en el poder de Dios. Vamos a Juan 4:35 y vamos a ver algunas cosas que pasan o pueden pasar cosas en nuestra vida de acuerdo a lo que vemos.
No decis vosotros aun faltan cuatro meses para que llegue la ciega, he aquí os digo Alzad vuestros ojos y mirad los campos porque ya están blancos para la cosecha.
Ustedes dicen que faltan cuatro meses, yo les digo alcen sus ojos porque ya está lista la cosecha. La diferencia en lo que decimos está en lo que vemos; ellos decían una cosa, por lo que ellos veían; Jesús decía otra por lo que él veía. Nos está diciendo que él quiso enseñar a sus discípulos a ver lo que él mira, para que podamos decir lo que Él dice. Jesús decía: “Yo veo a mi Padre hacer las cosas y hago lo que veo a mi Padre hacer. Si no aprendo a ver como Él hace, tampoco voy a hacer”.
Voy aprender a ver como Él ve para poder decir lo que Él dice. ¿Cuántos aceptamos que hemos hablado en lo que vemos, no en lo que Jesús dice? Cuando voy a México, les digo: “Ya dejen de decir que este país es duro; ese país tiene los cielos abiertos”. Siempre que voy a ministrar noches de gloria, estoy solo. Mi esposa puede estar en el mismo dormitorio, pero se va a otra área para dejarme a mí adorar a Dios para poder ver lo que Él ve, para poder hacer lo que Él hace. Y estoy en pañales, pero voy en el proceso, por eso se puede decir: “Hay alguien vestido de tal color sanando”. Llegó una niña cuyo pulmón había sido perforado. Estaba en el hospital, cuando dije la descripción de ella y que Dios la estaba sanando, y quedó sana. Eso vi, eso hablé, y eso pasó. Llegó la niña en la cruzada a testificar. Por eso dice la Palabra que los que son guiados por el Espíritu Santo piensan en las cosas del Espíritu Santo, y se ocupan. Hay que ocuparse en las cosas del Espíritu Santo. A veces estoy leyendo la Palabra en una cafetería, recibiendo del Señor, y se acerca alguien y me dice: “Ahora que lo veo desocupado…”, quien le dijo que estoy desocupado, es ahora que estoy ocupado. Cuando el Señor vio que aquellos no veían, les enseñó que el problema que tenían era que no estaban viendo como El deseaba que vieran. Vamos a empezar a ver diferentes cosas y de acuerdo a lo que veamos, es lo que tenemos que hacer.
Mateo 9:36
Y al ver las multitudes, tuvo compasión de ellas; porque estaban desamparadas y dispersas como ovejas que no tienen pastor.
Lo que El vio le produjo un sentimiento. Lo que veo afecta mis pensamientos, sentimientos, mi manera de hablar, porque estaban desamparados y dispersos como ovejas que no tienen pastor. Ovejas con pastor no están dispersas. El modelo de Jesús persigue que podamos tener, pastorear, juntos en pequeños grupos a las personas para satisfacer la compasión que Jesús tuvo o respetando la compasión que Jesús tiene por la gente.
Cuando Él vio, sintió, conoció y habló.
Entonces dijo a sus discípulos: A la verdad la mies es mucha, mas los obreros pocos. Rogad, pues, al Señor de la mies, que envíe obreros a su mies.
Cuando el vio la multitud dispersa, no dijo “tráiganlos los voy a sanar”. Los envió a hacerlo y les dio una orden, rueguen. Cuando Jesús vio eso, ¿hizo algún milagro? No. ¿O rogó para que existieran obreros? Mucha gente cuando mira la multitud lo menos que hace es eso. Quiere decir que no miran como Jesús mira, ni siguen la instrucción que Jesús dio. Pues se ponen a rogar por la multitud, cuando Jesús rogó por obreros. Cuantos hemos orado por la mies, para que un día se conviertan y Jesús los toque. Todo el mundo ora por los perdidos, pero El nunca dijo eso. El dijo que oraran por los obreros. Ver como Jesús ve, puede cambiar mi visión. No es mi visión, sino la de El. Dijo: “Necesito gente”. Cuando vio la mies, corrigió la manera de ver, porque sino la mies se pierde.
En la primera, corrigió, en la segunda, rogó.
Capítulo 1 de 2
Lucas 5:17-24
Aconteció un día, que él estaba enseñando, y estaban sentados los fariseos y doctores de la ley, los cuales habían venido de todas las aldeas de Galilea, y de Judea y Jerusalén; y el poder del Señor estaba con él para sanar. Y sucedió que unos hombres que traían en un lecho a un hombre que estaba paralítico, procuraban llevarle adentro y ponerle delante de él. Pero no hallando cómo hacerlo a causa de la multitud, subieron encima de la casa, y por el tejado le bajaron con el lecho, poniéndole en medio, delante de Jesús. Al ver él la fe de ellos, le dijo: Hombre, tus pecados te son perdonados. Entonces los escribas y los fariseos comenzaron a cavilar, diciendo: ¿Quién es éste que habla blasfemias? ¿Quién puede perdonar pecados sino sólo Dios? Jesús entonces, conociendo los pensamientos de ellos, respondiendo les dijo: ¿Qué caviláis en vuestros corazones? ¿Qué es más fácil, decir: Tus pecados te son perdonados, o decir: Levántate y anda?
Pues para que sepáis que el Hijo del Hombre tiene potestad en la tierra para perdonar pecados (dijo al paralítico): A ti te digo: Levántate, toma tu lecho, y vete a tu casa.
Estas son noches de unción y de enseñanza.
II Corintios 4:18
No mirando nosotros las cosas que se ven, sino las que no se ven; pues las cosas que se ven son temporales, pero las que no se ven son eternas.
No miramos las cosas que se ven, sino las que no se ven. Pues las cosas que se ven son temporales, pero las que no, son eternas.
Podemos hablar de las terrenales y eternas. Pero déjeme hablar acerca de ver las cosas que no se ven, no las que se ven. Como podemos caminar bajo el poder de Dios si las cosas que vemos nos afectan en nuestra manera de hablar, de sentir, de creer, más que las cosas que no vemos. Por ejemplo, quieres ser sano de la enfermedad y todo tu énfasis está en ella. Lo que dicen los médicos, los pacientes; pasas media hora hablando de eso, sin un sólo versículo bíblico. Te están afectando más las cosas que se ven que las que no se ven. O tienes un pleito con una persona, y ves el problema y no los demonios que no ves que están provocando lo que ves. ¿Cómo puedes ser espiritual si el mundo nos condiciona la conducta a nosotros?
II Corintios 5:7
Porque por fe andamos, no por vista.
Para caminar en el poder de Dios, caminas por lo que ves o no ves. ¿O será que lo que tenemos que aprender es a ver? Tenemos que aprender a ver. Vamos a ver lo que la vista tiene que ver con el poder de Dios. Cuando vemos algo, inmediatamente, recibimos una influencia para actuar. Por ejemplo, si eres una persona llena de prejuicios por lo que ves, no vas a poder caminar en el poder de Dios. Vamos a Juan 4:35 y vamos a ver algunas cosas que pasan o pueden pasar cosas en nuestra vida de acuerdo a lo que vemos.
No decis vosotros aun faltan cuatro meses para que llegue la ciega, he aquí os digo Alzad vuestros ojos y mirad los campos porque ya están blancos para la cosecha.
Ustedes dicen que faltan cuatro meses, yo les digo alcen sus ojos porque ya está lista la cosecha. La diferencia en lo que decimos está en lo que vemos; ellos decían una cosa, por lo que ellos veían; Jesús decía otra por lo que él veía. Nos está diciendo que él quiso enseñar a sus discípulos a ver lo que él mira, para que podamos decir lo que Él dice. Jesús decía: “Yo veo a mi Padre hacer las cosas y hago lo que veo a mi Padre hacer. Si no aprendo a ver como Él hace, tampoco voy a hacer”.
Voy aprender a ver como Él ve para poder decir lo que Él dice. ¿Cuántos aceptamos que hemos hablado en lo que vemos, no en lo que Jesús dice? Cuando voy a México, les digo: “Ya dejen de decir que este país es duro; ese país tiene los cielos abiertos”. Siempre que voy a ministrar noches de gloria, estoy solo. Mi esposa puede estar en el mismo dormitorio, pero se va a otra área para dejarme a mí adorar a Dios para poder ver lo que Él ve, para poder hacer lo que Él hace. Y estoy en pañales, pero voy en el proceso, por eso se puede decir: “Hay alguien vestido de tal color sanando”. Llegó una niña cuyo pulmón había sido perforado. Estaba en el hospital, cuando dije la descripción de ella y que Dios la estaba sanando, y quedó sana. Eso vi, eso hablé, y eso pasó. Llegó la niña en la cruzada a testificar. Por eso dice la Palabra que los que son guiados por el Espíritu Santo piensan en las cosas del Espíritu Santo, y se ocupan. Hay que ocuparse en las cosas del Espíritu Santo. A veces estoy leyendo la Palabra en una cafetería, recibiendo del Señor, y se acerca alguien y me dice: “Ahora que lo veo desocupado…”, quien le dijo que estoy desocupado, es ahora que estoy ocupado. Cuando el Señor vio que aquellos no veían, les enseñó que el problema que tenían era que no estaban viendo como El deseaba que vieran. Vamos a empezar a ver diferentes cosas y de acuerdo a lo que veamos, es lo que tenemos que hacer.
Mateo 9:36
Y al ver las multitudes, tuvo compasión de ellas; porque estaban desamparadas y dispersas como ovejas que no tienen pastor.
Lo que El vio le produjo un sentimiento. Lo que veo afecta mis pensamientos, sentimientos, mi manera de hablar, porque estaban desamparados y dispersos como ovejas que no tienen pastor. Ovejas con pastor no están dispersas. El modelo de Jesús persigue que podamos tener, pastorear, juntos en pequeños grupos a las personas para satisfacer la compasión que Jesús tuvo o respetando la compasión que Jesús tiene por la gente.
Cuando Él vio, sintió, conoció y habló.
Entonces dijo a sus discípulos: A la verdad la mies es mucha, mas los obreros pocos. Rogad, pues, al Señor de la mies, que envíe obreros a su mies.
Cuando el vio la multitud dispersa, no dijo “tráiganlos los voy a sanar”. Los envió a hacerlo y les dio una orden, rueguen. Cuando Jesús vio eso, ¿hizo algún milagro? No. ¿O rogó para que existieran obreros? Mucha gente cuando mira la multitud lo menos que hace es eso. Quiere decir que no miran como Jesús mira, ni siguen la instrucción que Jesús dio. Pues se ponen a rogar por la multitud, cuando Jesús rogó por obreros. Cuantos hemos orado por la mies, para que un día se conviertan y Jesús los toque. Todo el mundo ora por los perdidos, pero El nunca dijo eso. El dijo que oraran por los obreros. Ver como Jesús ve, puede cambiar mi visión. No es mi visión, sino la de El. Dijo: “Necesito gente”. Cuando vio la mies, corrigió la manera de ver, porque sino la mies se pierde.
En la primera, corrigió, en la segunda, rogó.