SEMANA 4 — DÍA 2
Alimento matutino
He. 2:3-4 ¿Cómo escaparemos nosotros, si descuidamos una salvación tan grande? La cual, habiendo sido anunciada primeramente por el Señor, nos fue confirmada por los que oyeron, dando Dios testimonio juntamente
con ellos, con señales y prodigios y diversas obras poderosas y repartimientos del Espíritu Santo, según Su voluntad.
En Mateo 28:19 el Señor les encargó a Sus discípulos que bautizaran a las personas en el nombre de la Trinidad Divina, a saber: el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo. A estas alturas, en el libro de Mateo, el Dios Triuno ya había sido completado y había alcanzado Su consumación. Para que la Trinidad Divina pudiera ser completada, para que alcanzara Su consumación, Él tuvo que pasar por un proceso a fin de que la humanidad le fuera añadida…Para ser
el Dios Triuno consumado, el Dios Triuno completo, le eran necesarias tanto la humanidad como la divinidad.
Además de esto, Él necesitaba pasar por una muerte hermosa y todo-inclusiva … Todos necesitamos ser conformados a Su preciosa muerte. La muerte de Cristo es preciosa y dulce, y ésta era necesaria para que el Dios Triuno pudiera ser completado, para que alcanzara Su consumación. La Trinidad Divina es, sin duda, omnipotente, pero sin esta hermosa muerte, no podría resolver nuestros problemas…La muerte de Cristo en la cruz quitó todos los “microbios negativos” que había en el universo. Tal muerte ahora forma parte de la Trinidad Divina.
Después de pasar por el proceso de la crucifixión, Él entró en la esfera de la resurrección y llegó a ser el Espíritu vivificante. Luego, regresó a Sus discípulos en el ámbito y en la realidad de Su resurrección para mandarles que hicieran de los gentiles ciudadanos del reino al bautizarlos en el nombre, es decir, en la persona, la realidad, de la Trinidad Divina. Ahora que la Trinidad Divina ha sido completada y ha alcanzado Su consumación, la gente puede ser
bautizada en ella. El Dios Triuno ya completado, la Trinidad Divina consumada, es perfecto, completo y no tiene carencia alguna. Así, pues, cuando bautizamos a las personas, las introducimos en el Dios Triuno, quien ha sido completado y quien ha alcanzado Su consumación. (Living in and with the Divine Trinity, págs. 49-50)
Lectura para hoy
Hebreos 2:3 y 4 también nos muestra la Trinidad Divina en Su mover divino. Primero, el Señor [el Hijo] anuncia una gran salvación. Luego, Dios [Dios el Padre] da testimonio de esa salvación tan grande con señales y prodigios y diversas obras poderosas y repartimientos del Espíritu Santo. La salvación completa que Dios efectúa, tal salvación tan grande, está totalmente relacionada con los tres de la Deidad.
De la misma manera, en la entidad corporativa del Cuerpo de Cristo, en esta constitución compuesta por millones de miembros, vemos mucha belleza, excelencia y virtud. Millones de miembros se han unido y han conformado cierta constitución al grado en que ahora son miembros los unos de los otros. En esta constitución, en esta entidad corporativa, podemos ver muchas bellezas, excelencias, virtudes y atributos. Finalmente, todos estos millones de miembros serán los constituyentes de la Nueva Jerusalén, la cual será la máxima expresión corporativa del Dios Triuno, una expresión llena de belleza.
Supongamos que en la vida de iglesia hay un grupo de hermanas y hermanos que sirven y viven en la realidad del Cuerpo de Cristo. Ellos sirven en unidad y armonía, todos son humildes, y ninguno de ellos hace nada para sí mismo, ni por sí mismo, ni en beneficio propio. Dicho servicio es realizado en el Cuerpo y despliega gran belleza y excelencia. Si hubiera miles de santos en la tierra viviendo y sirviendo de esta manera, ¡cuánta belleza y excelencia se manifestaría! En la vida de iglesia, en la vida del Cuerpo, en el nuevo hombre, es maravilloso ver santos de diferentes razas y orígenes reuniéndose juntos en unidad. Para tener armonía en la vida de iglesia se requiere que haya humildad y abnegación. La armonía en la vida de iglesia es preciosa. Esta clase de belleza se exhibió primeramente en la Trinidad Divina. La Trinidad Divina fue la primera en exhibir este tipo de belleza en el universo. De entre los tres de la Trinidad, el Hijo fue el primero en mostrarse tan abnegado, tan humilde y tan considerado con los demás. (Living in andwith the DivineTrinity,págs. 51-52)
Lectura adicional: The Intrinsic Problem in the Lord’s Recovery Today and Its Scriptural Remedy, caps. 1-2; Living in and with the Divine Trinity, cap. 5; El misterio de Cristo, cap. 3
Witness Lee
Derechos reservados a: Living Stream Ministry
¡Jesús es el Señor!
Alimento matutino
He. 2:3-4 ¿Cómo escaparemos nosotros, si descuidamos una salvación tan grande? La cual, habiendo sido anunciada primeramente por el Señor, nos fue confirmada por los que oyeron, dando Dios testimonio juntamente
con ellos, con señales y prodigios y diversas obras poderosas y repartimientos del Espíritu Santo, según Su voluntad.
En Mateo 28:19 el Señor les encargó a Sus discípulos que bautizaran a las personas en el nombre de la Trinidad Divina, a saber: el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo. A estas alturas, en el libro de Mateo, el Dios Triuno ya había sido completado y había alcanzado Su consumación. Para que la Trinidad Divina pudiera ser completada, para que alcanzara Su consumación, Él tuvo que pasar por un proceso a fin de que la humanidad le fuera añadida…Para ser
el Dios Triuno consumado, el Dios Triuno completo, le eran necesarias tanto la humanidad como la divinidad.
Además de esto, Él necesitaba pasar por una muerte hermosa y todo-inclusiva … Todos necesitamos ser conformados a Su preciosa muerte. La muerte de Cristo es preciosa y dulce, y ésta era necesaria para que el Dios Triuno pudiera ser completado, para que alcanzara Su consumación. La Trinidad Divina es, sin duda, omnipotente, pero sin esta hermosa muerte, no podría resolver nuestros problemas…La muerte de Cristo en la cruz quitó todos los “microbios negativos” que había en el universo. Tal muerte ahora forma parte de la Trinidad Divina.
Después de pasar por el proceso de la crucifixión, Él entró en la esfera de la resurrección y llegó a ser el Espíritu vivificante. Luego, regresó a Sus discípulos en el ámbito y en la realidad de Su resurrección para mandarles que hicieran de los gentiles ciudadanos del reino al bautizarlos en el nombre, es decir, en la persona, la realidad, de la Trinidad Divina. Ahora que la Trinidad Divina ha sido completada y ha alcanzado Su consumación, la gente puede ser
bautizada en ella. El Dios Triuno ya completado, la Trinidad Divina consumada, es perfecto, completo y no tiene carencia alguna. Así, pues, cuando bautizamos a las personas, las introducimos en el Dios Triuno, quien ha sido completado y quien ha alcanzado Su consumación. (Living in and with the Divine Trinity, págs. 49-50)
Lectura para hoy
Hebreos 2:3 y 4 también nos muestra la Trinidad Divina en Su mover divino. Primero, el Señor [el Hijo] anuncia una gran salvación. Luego, Dios [Dios el Padre] da testimonio de esa salvación tan grande con señales y prodigios y diversas obras poderosas y repartimientos del Espíritu Santo. La salvación completa que Dios efectúa, tal salvación tan grande, está totalmente relacionada con los tres de la Deidad.
De la misma manera, en la entidad corporativa del Cuerpo de Cristo, en esta constitución compuesta por millones de miembros, vemos mucha belleza, excelencia y virtud. Millones de miembros se han unido y han conformado cierta constitución al grado en que ahora son miembros los unos de los otros. En esta constitución, en esta entidad corporativa, podemos ver muchas bellezas, excelencias, virtudes y atributos. Finalmente, todos estos millones de miembros serán los constituyentes de la Nueva Jerusalén, la cual será la máxima expresión corporativa del Dios Triuno, una expresión llena de belleza.
Supongamos que en la vida de iglesia hay un grupo de hermanas y hermanos que sirven y viven en la realidad del Cuerpo de Cristo. Ellos sirven en unidad y armonía, todos son humildes, y ninguno de ellos hace nada para sí mismo, ni por sí mismo, ni en beneficio propio. Dicho servicio es realizado en el Cuerpo y despliega gran belleza y excelencia. Si hubiera miles de santos en la tierra viviendo y sirviendo de esta manera, ¡cuánta belleza y excelencia se manifestaría! En la vida de iglesia, en la vida del Cuerpo, en el nuevo hombre, es maravilloso ver santos de diferentes razas y orígenes reuniéndose juntos en unidad. Para tener armonía en la vida de iglesia se requiere que haya humildad y abnegación. La armonía en la vida de iglesia es preciosa. Esta clase de belleza se exhibió primeramente en la Trinidad Divina. La Trinidad Divina fue la primera en exhibir este tipo de belleza en el universo. De entre los tres de la Trinidad, el Hijo fue el primero en mostrarse tan abnegado, tan humilde y tan considerado con los demás. (Living in andwith the DivineTrinity,págs. 51-52)
Lectura adicional: The Intrinsic Problem in the Lord’s Recovery Today and Its Scriptural Remedy, caps. 1-2; Living in and with the Divine Trinity, cap. 5; El misterio de Cristo, cap. 3
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¡Jesús es el Señor!