Practicando los libros de 1 y 2 de Tesalonicenses
Semana 22 --- Ser glorificado en Sus santos
Domingo --- Leer con oración: 2 Co 8:1-4
“Pues doy testimonio de que con agrado han dado conforme a sus fuerzas, y aun más allá de sus fuerzas, pidiéndonos con muchos ruegos que les concediésemos el privilegio de participar en este servicio para los santos” (2 Co 8:3-4)
EL MINISTERIO DE RIQUEZAS MATERIALES ES PARA GLORIFICAR A DIOS
Segunda de Corintios 8:1-4 dice: “Asimismo, hermanos, os hacemos saber la gracia de Dios que se ha dado a las iglesias de Macedonia; que en grande prueba de tribulación, la abundancia de su gozo y su profunda pobreza abundaron en riquezas de su generosidad. Pues doy testimonio de que con agrado han dado conforme a sus fuerzas, y aun más allá de sus fuerzas, pidiéndonos con muchos ruegos que les concediésemos el privilegio de participar en este servicio para los santos”. El termino servicio también puede ser traducido por ministerio. Las iglesias de Macedonia eran muy pobres, pero querían participar del ministerio de ofrendas de riquezas materiales. Ofrendar es recibir gracia. Cuanto más ofrendamos, más gracia recibimos. El ministerio de riquezas materiales es para glorificar a Dios; por medio de él, Dios es glorificado en los santos.
Que todos podamos practicar según la palabra de Dios, y así ¡no será mera doctrina para nosotros! Necesitamos practicarla para ser dignos del reino de Dios y estar dispuestos a sufrir, pues por medio del sufrimiento, nos negamos a nosotros mismos y así la vida podrá crecer. Cuando el Señor vuelva, delante de Su tribunal, no seremos juzgados simplemente por tener pecados o no, porque los pecados confesados a Él ya los limpió con Su sangre preciosa. Pero en los aires, delante del tribunal de Cristo, el Señor va a juzgar si nuestro espíritu, alma y cuerpo están íntegros, totalmente santificados, llenos de vida, o no. Si las tres partes de nuestro ser estuvieran llenas de vida, entraremos en la gloria del Señor, reinaremos con Él y disfrutaremos de las bodas del Cordero durante mil años en el gozo de nuestro Señor en la gloria. ¡Aleluya!
Estas palabras, que fueron de animo para una iglesia nueva como Tesalónica, actualmente nos sirven a nosotros, pues también nosotros al igual que ellos las practicamos: en cada ciudad por donde vamos, predicamos el evangelio hasta que una iglesia sea levantada, cuidando de los santos para presentarlos firmes delante del Tribunal de Cristo. ¡Aleluya!
Punto Clave: Por medio de los sufrimientos nos negamos a nosotros mismos.
Pregunta: ¿Cuál es la finalidad de las riquezas materiales para con nosotros?
Dong Yu Lan
Derechos reservados a: "Editora Arvore da Vida"
¡Jesús es el Señor!
Semana 22 --- Ser glorificado en Sus santos
Domingo --- Leer con oración: 2 Co 8:1-4
“Pues doy testimonio de que con agrado han dado conforme a sus fuerzas, y aun más allá de sus fuerzas, pidiéndonos con muchos ruegos que les concediésemos el privilegio de participar en este servicio para los santos” (2 Co 8:3-4)
EL MINISTERIO DE RIQUEZAS MATERIALES ES PARA GLORIFICAR A DIOS
Segunda de Corintios 8:1-4 dice: “Asimismo, hermanos, os hacemos saber la gracia de Dios que se ha dado a las iglesias de Macedonia; que en grande prueba de tribulación, la abundancia de su gozo y su profunda pobreza abundaron en riquezas de su generosidad. Pues doy testimonio de que con agrado han dado conforme a sus fuerzas, y aun más allá de sus fuerzas, pidiéndonos con muchos ruegos que les concediésemos el privilegio de participar en este servicio para los santos”. El termino servicio también puede ser traducido por ministerio. Las iglesias de Macedonia eran muy pobres, pero querían participar del ministerio de ofrendas de riquezas materiales. Ofrendar es recibir gracia. Cuanto más ofrendamos, más gracia recibimos. El ministerio de riquezas materiales es para glorificar a Dios; por medio de él, Dios es glorificado en los santos.
Que todos podamos practicar según la palabra de Dios, y así ¡no será mera doctrina para nosotros! Necesitamos practicarla para ser dignos del reino de Dios y estar dispuestos a sufrir, pues por medio del sufrimiento, nos negamos a nosotros mismos y así la vida podrá crecer. Cuando el Señor vuelva, delante de Su tribunal, no seremos juzgados simplemente por tener pecados o no, porque los pecados confesados a Él ya los limpió con Su sangre preciosa. Pero en los aires, delante del tribunal de Cristo, el Señor va a juzgar si nuestro espíritu, alma y cuerpo están íntegros, totalmente santificados, llenos de vida, o no. Si las tres partes de nuestro ser estuvieran llenas de vida, entraremos en la gloria del Señor, reinaremos con Él y disfrutaremos de las bodas del Cordero durante mil años en el gozo de nuestro Señor en la gloria. ¡Aleluya!
Estas palabras, que fueron de animo para una iglesia nueva como Tesalónica, actualmente nos sirven a nosotros, pues también nosotros al igual que ellos las practicamos: en cada ciudad por donde vamos, predicamos el evangelio hasta que una iglesia sea levantada, cuidando de los santos para presentarlos firmes delante del Tribunal de Cristo. ¡Aleluya!
Punto Clave: Por medio de los sufrimientos nos negamos a nosotros mismos.
Pregunta: ¿Cuál es la finalidad de las riquezas materiales para con nosotros?
Dong Yu Lan
Derechos reservados a: "Editora Arvore da Vida"
¡Jesús es el Señor!