Alimento diario

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5 Septiembre 2001
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LA ECONOMIA DE DIOS

1 y 2 Timoteo y Tito

----- Versículos de la Biblia -----

Leer con oración: Colosenses 2: 8, 2; Efesios 5: 32

“Mirad que nadie os engañe por medio de filosofías y huecas sutilezas, según la tradición de los hombres, conforme a los rudimentos del mundo, y no según Cristo (Colosenses 2: 8)

SEGÚN CRISTO

Ayer Vimos las pasiones y las concupiscencias de la carne, las cuales incluyen los malos pensamientos de la mente humana caída. En Colosenses 2: 8 podemos ver otro problema, que es la parte buena de la mente: “Mirad que nadie os engañe por medio de filosofías y huecas sutilezas, según la tradición de los hombres, conforme a los rudimentos del mundo, y no según Cristo”. El hombre considera estas cosas como algo precioso. No obstante, cosas así nos sacan del espíritu. Todas esas cosas pueden parecer buenas a los ojos del hombre, pero debemos tener cuidado con ellas porque nos desvían de la meta verdadera que es Cristo.
Las huecas sutilezas son cosas de la religión, cosas vacías. Son sutilezas y mentiras que quieren sustituir a Cristo. No son según Cristo. Otro elemento es la tradición de los hombres. La tradición implica costumbres. Son cosas aparentemente buenas, pero nos sacan del espíritu. Los rudimentos del mundo son cosas básicas de la cultura humana, de las culturas de los pueblos. Sin cultura, los pueblos serían como bárbaros, incultos, por eso la cultura es bien vista por los hombres. No obstante, si no ponemos cuidado, esas cosas nos sacaran del espíritu. Debemos mantenernos vigilantes.
Podemos rechazar los pensamientos malos, pero muchos apreciamos las cosas buenas, los buenos pensamientos. Pero así como Gálatas nos muestra que las cosas malas de la carne deben ser rechazadas, Colosenses nos muestra principalmente que debemos tener cuidado con las cosas buenas de la mente, para que no seamos sacados del espíritu. Para que tengamos la visión de la economía neotestamentaria de Dios, necesitamos ser uno con el Señor, necesitamos estar y ser uno con la iglesia, y finalmente necesitamos estar en el espíritu y ser uno con el Espíritu.
Efesios y colosenses refuerzan la economía neotestamentaria de Dios. La economía divina habla principalmente del misterio de Dios, que es Cristo (Col 2: 2), y del misterio de Cristo, que es la iglesia (Ef 5: 32). Por eso vemos que la economía neotestamentaria de Dios es practicada en la iglesia. Teniendo esa visión, seguimos adelante.

Palabra clave: Cristo

Pregunta: ¿Qué son las huecas sutilezas, tradiciones de los hombres y rudimentos del mundo?

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¡¡¡Oh Señor Jesús!!! Cómo disfruto invocar tu nombre.