A dos semanas ya que puse mi última respuesta al mensaje de Melviton me preocupa su ausencia no sólo del epígrafe “¿Cuán santa o sagrada es la sangre?”, sino del Foro.
Sabíamos que se hallaba muy ocupado pero varias veces le he pedido que cuando por razones de fuerza mayor no pudiera participar en el Foro nos lo hiciera saber con apenas una línea.
Y digo que es preocupante, ya que en forma recíprocamente amable y respetuosa veníamos razonando sobre nuestro asunto.
Es natural que lo primero que uno piense es en un quebranto de salud o problema familiar que a cualquiera inhibe de una participación activa.
El mucho trabajo también puede ser un impedimento, pero en tal caso nos hubiera avisado.
También es posible que con su último aporte al tema diera por concluida su participación allí, pero no lo dijo, y todavía tuve razones que aducir con mi respuesta.
No descarto, incluso, que en algún epígrafe hubiera recibido de algún forista un exabrupto que lo hubiera lastimado, pero eso es cosa que ignoro.
Mi último mensaje a Melviton que ha quedado sin respuesta en el epígrafe citado es el # 576 de pg. 39 y fecha Enero 9 de 2013, del mismo día en que Melviton colocara el último suyo, el # 575.
Cordiales saludos.
