Amigo Haaz:
Sonó un poco irreverente el referirte a la Eucaristía como "comer una galleta" (en tu frase: " No sea ignorante, la vida eterna la tenemos por recibir a Jesús como Señor y Salvador, no por comer una galleta"). El hecho de que interpretes de una manera diferente las Escrituras no te da derecho a referirte despectivamente a las creencias de otros cristianos.
Te cuento en qué basamos los católicos nuestra creencia en "la galleta":
Jesús, se presentó a sí mismo como "El Pan de Vida" (Jn 6,35.48), como el "Pan bajado del Cielo" (Jn 6,32). En la última Cena, partió el pan, lo bendijo y lo dio a los apóstoles diciéndoles: "Tomen y coman, porque este ES mi cuerpo" (1Cor 11,24). Luego hizo lo mismo con el vino, diciéndoles: "Tomen y beban, porque esta ES mi sangre" (Mc 14,24). Y no solo eso, sino que concluyó diciéndoles: "Hagan esto en memoria mía" (1Cor 11,25). Por eso, los cristianos, a partir de la resurrección de Jesucristo, hemos repetido ese gesto "en memoria suya", aceptando que, por el poder de Dios, el pan que ha sido bendecido ES su cuerpo, y el vino que ha sido bendecido ES su sangre. Y no lo hacemos simplemente para saciar el hambre con "la galleta", sino con la fe en las palabras del mismo Jesucristo que dijo "Quien come mi carne y bebe mi sangre, tendrá la Vida Eterna" (Jn 6,51.54). (Y ojo, que dijo ademas: "El que no come mi carne y bebe mi sangre, no tendrá Vida Eterna" Jn 6,53).
Esto fue así desde los inicios del cristianismo. En los hechos se narra cómo los primeros cristianos se reunían y "partían el pan" (He 2,42). También en las cartas encontramos testimonios contundentes, como por ejemplo en la carta a los Corintios, cuando Pablo reprende a los Corintios que no toman con reciben dignamente la eucaristía (1Co11,27)
Así es que, para nosotros, eso a lo que llamas "la galleta" ES EL CUERPO DE CRISTO, el Pan de Vida, que comiéndolo nos da la Vida Eterna, y quien no lo come, no podrá tener Vida Eterna...
Un abrazo.
Miguel
Sonó un poco irreverente el referirte a la Eucaristía como "comer una galleta" (en tu frase: " No sea ignorante, la vida eterna la tenemos por recibir a Jesús como Señor y Salvador, no por comer una galleta"). El hecho de que interpretes de una manera diferente las Escrituras no te da derecho a referirte despectivamente a las creencias de otros cristianos.
Te cuento en qué basamos los católicos nuestra creencia en "la galleta":
Jesús, se presentó a sí mismo como "El Pan de Vida" (Jn 6,35.48), como el "Pan bajado del Cielo" (Jn 6,32). En la última Cena, partió el pan, lo bendijo y lo dio a los apóstoles diciéndoles: "Tomen y coman, porque este ES mi cuerpo" (1Cor 11,24). Luego hizo lo mismo con el vino, diciéndoles: "Tomen y beban, porque esta ES mi sangre" (Mc 14,24). Y no solo eso, sino que concluyó diciéndoles: "Hagan esto en memoria mía" (1Cor 11,25). Por eso, los cristianos, a partir de la resurrección de Jesucristo, hemos repetido ese gesto "en memoria suya", aceptando que, por el poder de Dios, el pan que ha sido bendecido ES su cuerpo, y el vino que ha sido bendecido ES su sangre. Y no lo hacemos simplemente para saciar el hambre con "la galleta", sino con la fe en las palabras del mismo Jesucristo que dijo "Quien come mi carne y bebe mi sangre, tendrá la Vida Eterna" (Jn 6,51.54). (Y ojo, que dijo ademas: "El que no come mi carne y bebe mi sangre, no tendrá Vida Eterna" Jn 6,53).
Esto fue así desde los inicios del cristianismo. En los hechos se narra cómo los primeros cristianos se reunían y "partían el pan" (He 2,42). También en las cartas encontramos testimonios contundentes, como por ejemplo en la carta a los Corintios, cuando Pablo reprende a los Corintios que no toman con reciben dignamente la eucaristía (1Co11,27)
Así es que, para nosotros, eso a lo que llamas "la galleta" ES EL CUERPO DE CRISTO, el Pan de Vida, que comiéndolo nos da la Vida Eterna, y quien no lo come, no podrá tener Vida Eterna...
Un abrazo.
Miguel