A todos mis amados hermanos

Lenin

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10 Septiembre 1999
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Hola, mi nombre es Lenin, les hablo desde Quito - Ecuador. Me atrajo mucho este tema y sus opiniones y creo que en todo esto existe bastante sinceridad y amor por El Señor. Tambien he dirigido la alabanza en mi congregacion durante siete años seguidos, muchas veces solo y otras acompañado, muchas ves lleno de gozo y otras veces con algo de tristeza en mi corazon.

De la experiencia que he podido adquirir es que efectivamente la alabanza ha experimentado muchos cambios en su expresion. La intencion del corazon de los hombres de Dios en todas las edades ha permanecido inalterable, solo ha cambiado su forma expresiva. Ahora podemos diferenciar facilmente canticos de alabanza, de restauracion, de compañerismo, de compromiso con el Señor, de guerra espiritual, de adoracion, de ministracion, de suplica, de accion de gracias, de arrepentimiento, etc, etc. Sin embargo muchas veces nos guiamos por la "novedad" y por estar al dia en las ultimas canciones producidas, no dicernimos adecuadamente su contenido, resultando en el hecho que, entonamos un cantico de compañerismo mientras pensamos que le estamos adorando a Dios. Pero lo mas grave es que muchas congregaciones han desviado su atencion a la famosa "guerra espiritual" y nos pasamos entretenidos un tiempo precioso, desafiandole al maligno en vez de adorarle al Rey de Reyes. Les recuerdo que el cristiano vive continuamente en guerra pero su principal llamado no es la guerra sino adorarle al Señor, y paradojicamente, el arma mas poderosa de guerra es la adoracion al Señor. Asi que mucho ganaremos sin en vez de decirle: Diablo estas derrotado, decimos Señor Jesus, te adoro con todas mis fuerzas.


Por otra parte, tengamos presente que dentro de todo proceso de cambio se hallan implicitos elementos positivos y otros negativos; me refiero a que debiendo ser el ministerio de la adoracion el primero en la vida del cristiano, aun mas importante que el servicio (primer y gran mandamiento), creo que este ministerio deberiamos llevarlo personalmente a la intimidad con nuestro Señor y alli mismo perfeccionarlo, mas que ponerlo al mismo nivel de los otros ministerios eclesiasticos que son netamente ministerios de servicio.(Atráeme en pos de ti. ¡Corramos! El rey me ha llevado a sus habitaciones Cantares 1:4).

Por esta razon el Señor Jesucristo establecio el orden espiritual para la direccion de su amada iglesia: (Efesios 4:11 Y él mismo constituyó a unos apóstoles, a otros profetas, a otros evangelistas, y a otros pastores y maestros). Notemos que aqui no se encuentra un ministerio musical sino uno de adoracion implicito en cada uno de ellos.

Para finalizar, creo que la mayoria de cristianos y especialmente los musicos conocemos el origen de la musica, su asociacion a la creacion de Luzbel, y la tremenda influencia que satanas ejerce sobre la musica hoy mismo y aun dentro de algunas congregaciones. Conociendo que en el acto de adoracion se conjuga tanto el espiritu humano como su alma y aun su cuerpo,esto demanda del joven muchisima consagracion para no dar un aporte de vanidad ni de intereses netamente efimeros. Si alguien no esta muy seguro de su consagracion y santidad, por favor no pase al pulpito; esto trae juicio. (... en todo santuario se ofrece a mi nombre incienso y ofrenda pura. Porque grande es mi nombre entre las naciones, ha dicho Jehova de los Ejércitos. Malaquias 1:11)

Desde mi punto de vista, creo que debemos centrarnos en la adoracion mas a nivel personal que desde el pulpito de una congregacion (sin restarle importancia a la direccion desde el pulpito); y mi recomendacion seria que como ministros servidores y embajadores de Cristo le demos mas fuerza a la proclamacion del evangelio y al "discipulado" al interior de las congregaciones y aun desde el mismo pulpito.
La razon de que en ocasiones he dirigido con algo de tristeza en mi corazon es que me di cuenta que la gente mas iva a la iglesia por los canticos que por la misma Palabra de Vida, y cuando los canticos terminaban, la gente se iva. Esto no debe ser asi, ni tampoco debemos idearnos argumentos humanos para atraer a la gente, pues la bendita Palabra de Dios es poderosa y suficiente para redarguir los corazones y para llevar a cabo los enteros propositos de Dios, con o sin musica.

Bendiciones a todos

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El señor te bendiga y te guarde. Haga resplandecer su rostro sobre ti y tenga de ti misericordia. Alce el Señor su rostro sobre ti y te coceda la paz.
 
¡El Señor le bendiga Lenin!

Una canción no es nada más que eso mientras se cante con los labios... una alabanza es una alabanza por que se canta en el corazón; pues nace en el corazón y es en “espíritu y en verdad” como debemos rendir alabanza.

Lo que dice usted es una realidad, la música a través del tiempo cambia e incluso una canción que puede ser de gran bendición para uno puede resultar ruidosa o hasta insípida para otro, pues el que alaba no debe alabar de labios, sino de su corazón. Aun la cultura es un factor que influye sobre la expresión de la alabanza en su forma, pues su ritmo, estilo, y configuración pueden ser diferente en gran manera; pero si se alaba con el corazón de cierto se agrada a Dios.

Es por eso que yo no pongo objeción alguna por cuestiones de Estilos musicales y forma, pues un corazón agradecido es un corazón que alaba a Dios, y si nosotros calláramos, entonces como dice el señor “Las piedras hablarían”.

Dios habita en medio de la alabanza; pero nos da a conocer su voluntad perfecta a través de su Santo Espíritu y su Santa Palabra, lo uno sin lo otro es como comer y no respirar, o respirar y dejar de comer, van unidos.

Por otra parte es imposible conocer a Dios y no alabarle, y no alabarle conociéndole; por eso una persona que verdaderamente ama a Dios le alaba y escudriña su Palabra; tal vez por esto se dijo de David que fue un hombre conforme al corazón de Dios.

Que la paz y el gozo del Señor llenen tu corazón.

En Cristo Jesús, se despide

]_^[YO1]^_ [
 
Hermano Lenin:

Estoy de acuerdo con su mensaje, pero con el perdon del Webmaster y de mis hermanos, me permito pedirle mi hermano que por favor me conteste al e-mail: [email protected]

Necesito saber un poco mas de la adoracion.

Dios les bendiga ricamente.

Gracias una vez mas.
 
De: Jorge

Para: Lenin

Paz a vos, hermano, Dios te bendiga y te guarde.

Estoy totalmente de acuerdo con tu comentario, esepto en lo de los ritmos, hay que alabar a Dios, sin anteponerlo a el escuchar su Palabra, y podria agregar, que lo que cantes en alabanza, debe ser deacuerdo a lo que dicen las Escrituras, es decir, no cantar nada que no valla con las Escrituras. Sino talves nos pasaria lo mismo que a los dos hijos de Aarón el Sumo Sacerdote, que por ofreser incienso extraño, fueron consumidos por el furor de Dios.

Con respecto a lo que dices de los ritmos, me parese que aunque es correcto afirmar que no importa el ritmo que le impongas a una alavanza, esta debe ser acoorde a lo que estas cantando, es decir cantamos para alabar a Dios, no para alabarnos a nosotros, un canto en forma de cumbia, me parese que seria como extrañar las cebollas de egipto, pues la cumbia es un ritmo demasiado cadencioso y mibible como para ser un canto de alavanza a Dios, lo mismo sucederia con el rap, o el rock & roll, entenses debemos tener cuidado de no mesclar cebollas de egipto con mana del cielo.

Digo esto no menospreciando los ritmos de canciones populares, pues existen muchas que son bellas, pero no es bueno mesclarlas. Imaginense una alabanza en ridmo de merenge, o peor aun en ritmo de lambada. Decia Pablo:

1CO 14:40 Pero que todo se haga decentemente y con orden.

Depende del ritmo, mucho, para considerarse alabanza, pero tambien depende de lo que se diga en el, para que no sea un incienso extraño a Dios y seamos consumidos por su enojo.

Dios te bendiga y te guarde.

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Que la paz del Dios de Israel sea con todos ustedes.

1CO 10:32 No seáis motivo de tropiezo ni a judíos, ni a griegos, ni a la iglesia de Dios;

Su hermano Jorge Vital. :)

Desde H. Matamoros, Tams. México
 
HOLA HERMANO:
HAY OCACIONES QUE ES VERDAD LO QUE UD. MENCIONA, SIN EMBARGO RECORDEMOS QUE DIOS HABITA EN MEDIO DE LA HALABANZA Y QUE HAY VERSICULOS DE LA BIBLIA QUE MENCIONAN LA GRANDEZA DE ALABAR A DIOS, SIN EMBARGO HAY PERSONAS QUE SE DEJAN LLEVAR POR OTRO LADO Y ENPIEZAN CON SUS RITMOS RARONGOS QUE DESVIAN LA ATENCION DE LA ALBANZA, CREO QUE EN ESO TIENE RAZON.
SIN EMBARGO NO ESTOY DE ACUERDO QUE LAS COSAS NO SE RIJAN EN EL PULPITO, YA QUE EN ESTA SE PREDICA EL EVANGELIO Y LOS PASTORES DESDE AHI PASTOREAN A TODAS LAS PERSONAS QUE ESTAN EN LA IGLESIA, CREO QUE PARA TODO SE TIENE UN ORDEN
 
Hermano Lenin:

Ha sido muy grato leer tu artículo. Te sugiero inscribirlo en el Foro General, porque es muy valioso y aclarador, y allí tendrá un mayor acceso de lectores.

Servimos al Señor en la alabanza, y esto es motivo de gran gozo, pues es un privilegio que no todos tienen.
Damos gracias a Dios, porque no ha sido por nuestros méritos, sino por su grande misericordia que nos puso en este ministerio. Nunca olvidemos esto, para que la vanagloria no suba a nuestro corazón. ¡Solo a Dios nuestro Padre y a Jesucristo nuestro Señor y Salvador sea la gloria, la honra y la alabanza!

Es verdad que servimos, ora con gozo, ora con algo de tristeza; comparto contigo este sentir. Y es una motivación para interceder diariamente ante el Señor, con el fin de ofrecernos a él en sacrificio vivo, y nos conduzca por su Espíritu Santo, para serles aceptos. La alabanza que agrada el corazón del Señor es la que proviene de él mismo, la que él ha inspirado por su Espíritu. No lo que proviene del hombre, de la mente humana, o del sentimiento humano, de la emoción humana. Hay alabanzas hechas en la carne, y aunque pueden estar basadas en la Palabra misma de Dios, no transmiten vida, no glorifican al Señor; es como quemar incienso extraño en el Santuario.

No todo lo novedoso es bueno. Y el renovar la alabanza no significa cantar sólo canciones recién hechas. Hay himnos como “Castillo Fuerte” (compuesto por Martín Lutero hace varios siglos), por ejemplo, cuya frescura permanece, pues fue inspirado por Dios ¡Eso es cántico nuevo! Se hace nuevo al interpretarlo con el corazón lleno de fe en el Señor. No desechamos todo lo reciente. Pero, oremos siempre al Señor que nos conceda gracia, discernimiento para aprobar lo que él aprueba; no dejándonos seducir por ritmos, tipos de orquestaciones, armonizaciones de voces, ni aun textos rigurosamente bíblicos, sino ser persuadidos por su Espíritu, que no juzga según las apariencias, sino según verdad.

Es necesario examinar cada cántico. Siempre primero orar al Señor antes de introducir en la Iglesia un nuevo tema. Luego, hacernos asesorar de otros hermanos con mayor sabiduría espiritual. Analizar el texto a la luz de la Palabra. Y si recibimos una canción de una fuente externa, y haya que hacerle algún cambio para que concuerde con la Escritura, mejor desecharla. No poner parche o remiendo de tela nueva en un paño viejo.

También nos enseñe el Señor a discernir el momento oportuno para interpretar uno u otro cántico en la congregación; cuándo es tiempo de alabanza, o de adoración, o de consagración. Una canción puesta en el momento inadecuado, por muy inspirada que sea, puede apagar al Espíritu y arruinar la comunión de los hermanos con el Señor.

Asimismo, estoy de acuerdo contigo en que no debemos cantarle al Diablo, ni reprenderle con canciones. Sería como honrarlo, de alguna manera. Hemos sido llamados para adorar a Dios en espíritu y en verdad, para cantar sus maravillas, sus proezas y Su victoria sobre el enemigo; pero la canción va dirigida sólo a Él. ¡Bendito y alabado sea Su Nombre! No te preocupes de lo que hacen en otras congregaciones... Tú, ¡alaba a tu Señor, canta para Tu Señor! Es verdad cuando dices que “la mas poderosa arma de guerra es la adoración al Señor”. ¡Gracias doy a Dios por esta claridad que ha puesto en tu corazón! Siga Él aumentándote en gracia, para Su sola gloria.

Concuerdo contigo en que nuestro principal ministerio es adorar a nuestro Dios, y ejercitarnos diariamente en ello. Prepararnos en casa, con oración (aun con ayuno), y alabarle con nuestros instrumentos (NUNCA como un mero ensayo), sabiendo que siempre Él nos oye. Y, si lo hacemos así en privado, Él nos recompensará en público, no en que seamos vistos ni felicitados de los hombres (¡Dios nos libre de ello!) sino en percibir que Él nos socorre en la ministración, y la asamblea, el pueblo de Dios se goza en Su alabanza.

No hagamos alianza con el mundo; no introduzcamos los ritmos ni las formas musicales del mundo a la Iglesia. Preocupémonos si el mundo nos aplaude: en muchos conciertos de música cristiana se oyen las silbatinas, el griterío y otras expresiones que no vienen del Señor. Que la gente no venga a nosotros por la forma en que cantamos, que venga por el Señor. Que no venga a pasarlo bien, que venga a conocerle y a alabarle, porque Él es bueno y su misericordia es para siempre.

Mi muy querido consiervo y hermano: valora grandemente el don que Dios te ha concedido por gracia. Y ten presente siempre esto: Cuando el Señor venga, en breve, a buscar a sus redimidos, ya no habrá evangelistas, ni pastores, ni dones de sanidad, etc.; pero los músicos continuaremos nuestro ministerio de adorarle y alabarle por los siglos de los siglos. ¡Cuán grande es su misericordia!

¿Queremos servir allí, eternamente, en la Corte del Rey de reyes? ¡Este es nuestro llamamiento santo!
Sirvámosle, pues, desde ahora. Con sencillez, con humildad, con temor y temblor. Sin jactancia. Seámosle fieles, porque tiene galardón para nosotros. Nunca nos gloriemos en nosotros mismos, porque nada bueno hay en nosotros. ¡Sólo a Él sea la gloria!

Gracia y paz del Señor te sean multiplicadas.


(Desde Temuco, sur de Chile, en lo último de la tierra).