“Porque yo sé los pensamientos que tengo acerca de vosotros,
dice Jehová,
pensamientos de paz, Y NO DE MAL,
para daros el fin que esperáis.
Entonces me invocaréis,
y vendréis y ORARÉIS A MÍ,
y yo os oiré;
y me buscaréis y me hallaréis,
porque me buscaréis de TODO VUESTRO CORAZÓN”.
JEREMÍAS 29:11-13
“Clama a mí,
y yo te responderé,
y te enseñaré COSAS GRANDES Y OCULTAS que tú no conoces ”.
JEREMÍAS 33:3
A mis amados hermanos y hermanas en Cristo Jesús:
Dura es la circunstancia, que creía lejana, que me toca vivir actualmente. Casi siempre estamos mirando los toros desde la barrera, hasta que el GRAN ORDENADOR nos da la alternativa para lidiar con la bestia. Siempre son los otros que son abrazados y abrasados por el dolor, ¡no yo!
En medio de mi abatimiento descubro que no tengo otro lugar donde ir sino al regazo de mi Señor. ¡Gloria a Dios, mi verdadero Padre!
Queriendo enfocar mi ATENCIÓN, mi energía toda, en ORACIÓN al DIOS DE ISRAEL, me he topado con algunos sermones predicados por un hermosísimo hermano en el SEÑOR JESUCRISTO que hace ya muchos años que, dejando de morir en este mundo, vive ante Su divina presencia.
La identidad de este hermano, quien BASADO EN SU DEVOCIÓN A LA ORACIÓN en su tiempo fue dirigido por el Espíritu para construir y dirigir una gran congregación independiente, no es importante. Lo que sí es realmente importante es que este hombre que hoy mora en el Paraíso, fue un AUTÉNTICO CREYENTE EN CRISTO y fervoroso maestro de las Escrituras guiado por el ESPÍRITU SANTO que ha dejado tras sí un hermoso eco de esperanza a través de sus palabras; exquisitas palabras que nos instruyen maravillosamente sobre el VITAL TEMA que la oración es.
Es mi mayor deseo en este momento, justo antes de comenzar a verter en lengua castellana el mensaje que el ESPÍRITU expresara a través de nuestro hermano, que el mismo sea de gran provecho para todos y que provoque en todos no sólo el ENRIQUECEDOR DESEO DE ORAR sino que también provoque en nosotros el deseo de compartir nuestras experiencias en este terreno con todos.
Dios, Padre nuestro, ten misericordia de nosotros y enséñanos a administrar el diario maná que graciosamente nos envías; mantén Tu Santo Espíritu en nosotros para que así podamos clamar desde el fondo de nuestras extenuadas almas:
¡ABBA, PADRE, CÚMPLASE TU SAGRADA VOLUNTAD Y NO LA MÍA!
En Cristo Jesús,
Caleb Joshua
dice Jehová,
pensamientos de paz, Y NO DE MAL,
para daros el fin que esperáis.
Entonces me invocaréis,
y vendréis y ORARÉIS A MÍ,
y yo os oiré;
y me buscaréis y me hallaréis,
porque me buscaréis de TODO VUESTRO CORAZÓN”.
JEREMÍAS 29:11-13
“Clama a mí,
y yo te responderé,
y te enseñaré COSAS GRANDES Y OCULTAS que tú no conoces ”.
JEREMÍAS 33:3
A mis amados hermanos y hermanas en Cristo Jesús:
Dura es la circunstancia, que creía lejana, que me toca vivir actualmente. Casi siempre estamos mirando los toros desde la barrera, hasta que el GRAN ORDENADOR nos da la alternativa para lidiar con la bestia. Siempre son los otros que son abrazados y abrasados por el dolor, ¡no yo!
En medio de mi abatimiento descubro que no tengo otro lugar donde ir sino al regazo de mi Señor. ¡Gloria a Dios, mi verdadero Padre!
Queriendo enfocar mi ATENCIÓN, mi energía toda, en ORACIÓN al DIOS DE ISRAEL, me he topado con algunos sermones predicados por un hermosísimo hermano en el SEÑOR JESUCRISTO que hace ya muchos años que, dejando de morir en este mundo, vive ante Su divina presencia.
La identidad de este hermano, quien BASADO EN SU DEVOCIÓN A LA ORACIÓN en su tiempo fue dirigido por el Espíritu para construir y dirigir una gran congregación independiente, no es importante. Lo que sí es realmente importante es que este hombre que hoy mora en el Paraíso, fue un AUTÉNTICO CREYENTE EN CRISTO y fervoroso maestro de las Escrituras guiado por el ESPÍRITU SANTO que ha dejado tras sí un hermoso eco de esperanza a través de sus palabras; exquisitas palabras que nos instruyen maravillosamente sobre el VITAL TEMA que la oración es.
Es mi mayor deseo en este momento, justo antes de comenzar a verter en lengua castellana el mensaje que el ESPÍRITU expresara a través de nuestro hermano, que el mismo sea de gran provecho para todos y que provoque en todos no sólo el ENRIQUECEDOR DESEO DE ORAR sino que también provoque en nosotros el deseo de compartir nuestras experiencias en este terreno con todos.
Dios, Padre nuestro, ten misericordia de nosotros y enséñanos a administrar el diario maná que graciosamente nos envías; mantén Tu Santo Espíritu en nosotros para que así podamos clamar desde el fondo de nuestras extenuadas almas:
¡ABBA, PADRE, CÚMPLASE TU SAGRADA VOLUNTAD Y NO LA MÍA!
En Cristo Jesús,
Caleb Joshua