Re: Yugo desigual
Gracias por compartir esto conmigo.
Quisiera continuar con las preguntas.
Usted entiende entonces que una persona cristiana puede tomar de pareja a un ateo y/o una persona que no comparta su fe?
Yo lo que entiendo, es que hay cosas que escapan a nuestro entendimiento pues son exclusividades del propósito de Dios para cada uno de nosotros.
El amor entre las parejas es el método que usa Dios para atraerlos al matrimonio. Creo fielmente que Dios planea nuestro matrimonio, aún aquellos que humanamente fracasan. Una vez allí, en el seno del matrimonio Dios coimienza a operar en el corazón con mayor disposición a él, sin importar el credo religioso de ese corazón. Una vez manifestado a ese corazón, lo usa para que el otro corazón también le conozca y así espiritualizar el acto carnal del matrimonio. A partir de ese momento ya no son solamente una carne, sino que son un mismo corazón para Dios.
No le corresponde a los participantes determinar que les sirve y que no, pues no sería un principio muy cristiano el querer emparejar según nuestra propia conveniencia y no según nos lo indica nuestro corazón, que es donde Dios habla y da instrucciones a los hombres.
Entonces en el caso suyo u otro similar, no afecta espiritualmente el que una persona creyente se case con otra que no lo sea y/o que practique una creencia religiosa totalmente distinta a la Biblica?
La palabra advierte que el avisado ve venir el mal y se aparta. No creo que alguien que quiera hacerse de pareja con fines matrimoniales, lo haga buscando donde no debe o donde no hay nadie que sea de su mismo parecer, pensar y sentir. Pero si tu corazón se va detrás de una pareja que no es conveniente según los tradiciones o pensamiento religiso del que estamos rodeados, es porque allí es donde Dios inclinó ese corazón para hacerlo partícipe de su propósito para con ese corazón tan evidentemente para el ojo humano contrario al otro miembro de la pareja.
Yo comprendí el plan de Dios hasta que este fue en mi corazón, ni mi esposa se imaginó como sucederían las cosas, pues si por un lado yo deseaba que nuestro matrimonio terminara, mi esposa aún mas, pues su sufrimiento llenaba todas las formas imaginables, con el comportamiento de aquel ateo a su lado.
Ya hace más de 15 años que Dios se hizo uno con nosotros como pareja y ahora entiendo que la razón de nuestra justificación era la más importante para Dios, pues no era yo su propósito final, sino mis hijos los cuales por ser nosotros justificados Dios les garantizó para siempre que no mendingaran pan ni estar nunca desamparados.
Porque de ser asi, entonces como es que Pablo en 1 Corintios 7, le advierte al conyuge creyente que si el incredulo consiente en estar con el/ella, puede permanecer, pero de no ser asi, entonces que se separe? Aqui Pablo habla claramente sobre el matrimonio, cuando uno de los dos ya es creyente pero si conyuge no lo es, entonces ciertamente afecta al creyente, el que el otro no lo sea.
Dios da oportunidad por todos los medios, nosotros no podemos forzar absolutamente nada, pues el que convence de pecado y de juicio es el Espíritu Santo. Si el miembro de la pareja a quién le ha dado oportunidad de abrir su corazón, poniéndole un vocero por parte de Dios a su lado, para que le de testimonio de Dios, éste no debe intentar lo que para Dios ya no tiene remedio:
"Mas ellos hacían escarnio de los mensajeros de Dios, y menospreciaban sus palabras, burlándose de sus profetas, hasta que subió la ira de Jehová contra su pueblo, y no hubo ya remedio."
No creo que el creyente sea afectado, mas bién el afectado es el no creyente. El miembro creyente de la pareja cumplió lo dispuesto por Dios y este le mostrará el camino que debe seguir y sanará las heridas de su corazón si hubieren tales heridas.
Dios te bendice!
Greivin.