Precisamente el clero catòlico romano son los que acomodan las cosas segùn su conveniencia; pues para empezar, aquì en España, por hacer la ceremonia o rito religioso por la Iglesia catòlica romana, tienen que dar una cantidad de dinero, no estipulada, al que oficia dicho rito; por ej., en el caso de una hermana mìa, hace aprox. 15 años, cuando hicieron la ceremonia religiosa, dieron unas 5.000 pesetas (aprox. 30 euros) al cura que oficiò el rito. Ademàs, aunque digan ellos, el clero catòlico romano, que el matrimonio es indisoluble, en realidad, es indisoluble si no tiene vd. dinero, porque si tiene vd. miles de euros, enseguida disuelven el matrimonio (le dan el divorcio), algo que en la Biblia, sòlo puede ser si uno de los cònyuges ha cometido adulterio (fornicaciòn), que es la ùnica razòn vàlida que da Jesucristo para el divorcio o disolver un matrimonio (Mateo 19:9), pero el clero, previo pago de varios miles de euros, han dado el divorcio, o han disuelto el matrimonio, por cosas tontas, como por ej., que cuando uno se casò no era suficientemente maduro, aunque fuera mayor de edad, osea, llevàndole la contraria al Hijo de Dios, quien sòlo menciona el adulterio como el ùnico motivo para disolver un matrimonio, y quièn ademàs dijo, "recibieron gratis den gratis", algo que el clero, entre otras cosas, no ha aprendido aùn; asì es como ha funcionado hasta ahora, desgraciadamente, aquì en España, aprovechàndose de la pobre gente ignorante, de los incautos, que no saben leer, o no leen, o de los que por hipocresìa, siguen el juego al clero por intereses comerciales. Pues los verdaderos cristianos nos adherimos a lo que dice la mayor autoridad que hay, en cuestiones espirituales y èticas o morales, que es la Palabra de Dios, NO seguimos doctrinas de hombres contrarias a la Biblia; y en la Palabra de Dios, en tiempos de Jesucristo, cuando un hombre y una mujer se iban a casar, simplemente se llevaba el hombre a su futura mujer a su casa ante todos los demàs, y con èso, ya estaban casados, pero despuès, tenìan que registrar su matrimonio segùn las leyes del imperio romano, en ese caso (Mateo 1:18-24; Lucas 2:1-5); asì que para los cristianos hoy dìa, igualmente, se nos dice que tenemos que cumplir con las leyes de los hombres, siempre y cuando no vayan en contra de la Ley de Dios (Hechos 5:29; Romanos 13:1-7); por tanto, si una pareja, hombre y mujer, no registran su matrimonio en el Registro Civil, estarìan desobedeciendo una ley humana, y por tanto, como dice el apòstol Pablo, estarìan yendo en contra del arreglo de Dios (Romanos 13:1,2).