Heroes de la Fe

Tobi

2
21 Noviembre 2000
16.179
10
1.- Israel condecora a la familia Ten Boom por salvar cientos de judíos en la II Guerra Mundial

AMSTERDAM, 29/04/2008 (s ACI, Corrie ten Boom House Foundation, Bos News Life, ChristianNewswire. / Joel Forster, ProtestanteDigital)
Con el paso del tiempo, la historia de la familia Ten Boom – de fe protestante- se ha convertido en una de las más recordadas de entre las muchas que destapó la Segunda Guerra Mundial. La figura de Corrie Ten Boom se ha conocido por todo el mundo a través del libro “El refugio secreto” (1971), que incluso se ha convertido en película.

Ahora, el estado de Israel ha querido mostrar su agradecimiento a una familia que dio refugio a centenares de judíos –jugándose la vida- durante la ocupación nazi en Holanda, y ha condecorado póstumamente a Casper y a Betsy Ten Boom (padre e hija mayor de Corrie, muertos durante la II Guerra mundial).

El embajador de Israel en Holanda, Harry Kney-Tal, otorgó a título póstumo el premio “Righteous Among the Nations”, en recuerdo a personas que durante el genocidio judío se comprometieron con las víctimas e hicieron frente al régimen nazi. Fue en un acto solemne en la población en que vivieron los Ten Boom, llamada Harleem, dónde aún hoy se puede visitar la casa que refugió a muchos perseguidos. En la ceremonia, se remarcó que fue su firme fe cristiana lo que movió a los Ten Boom a ocultar en su casa tanto a judíos como a otros opositores holandeses al régimen nazi.

UN HOGAR COMO CENTRO DE REFUGIADOS
Según explica la Fundación Corrie ten Boom, “entre el año 1943 y 1944, vivían usualmente en casa de la familia, de forma ilegal, entre 6 y 7 personas”. Muchos de ellos eran judíos que huían de la Gestapo, pero también pasaron por el escondite muchos personas que pertenecían a la oposición política a Hitler en Holanda. La casa de esta familia de fe protestante –formada por Casper, Betsy y Corrie- se convirtió en un refugio oculto por el que pasaron hasta 800 judíos. Muchos de ellos, en realidad sólo pasaron algunas horas o días entre sus paredes, mientras se les buscaba un lugar más seguro a donde realojarles.

La actividad de ésta familia se acabó en febrero de 1944, después que la Gestapo descubriera la casa. Casper, Betsy y Corrie fueron arrestados rápidamente, pero las 6 personas que en ese momento se encontraban escondidas en la casa no fueron encontradas. Pese a que la policía secreta registró sistemáticamente la casa, “cuatro judíos y dos miembros de la resistencia más, pudieron pasar desapercibidos detrás de una falsa pared en el dormitorio de Corrie”, como explica la fundación. De ésta forma, mientras la familia era deportada, los 6 fugitivos que en ese momento estaban cobijados en su hogar, consiguieron ser liberados dos días después y 5 de ellos pudieron salvar la vida.

El padre de la familia, Casper, murió pocos días después de ser arrestado. Sus hijas fueron deportadas al que sería después recordado como un de los más grandes campos de concentración nazi, el de Ravensbruck.

Allí, las dos hermanas explicaron la razón por la que se encontraban en prisión y sobre todo el motivo que les había llevado a arriesgar su vida por salvar la de muchos otros. Betsy y Corrie hablaron de su fe en Jesús a muchas mujeres con las que compartían celda y torturas, y explicaron que lo que les había empujado a actuar en favor de los perseguidos era su fe en Jesús como Dios y Salvador de sus vidas.

Su impactante convicción y testimonio llevó a que muchas mujeres judías en ese campo de concentración a que decidieran creer en ese mismo Dios. Incluso alguna de sus carceleras, una vez finalizada la guerra.

LA HISTORIA RECORRE EL MUNDO
Besty, la mayor de las hermanas, murió en Ravensbruck a los 59 años. Pero Corrie consiguió salir viva, con un idea clara. Según explica la fundación, Corrie se dio cuenta que “su vida era un regalo de Dios”, y necesitaba compartir lo que ella y su hermana habían aprendido en el campo de concentración: “Dios nos dará el amor suficiente para poder perdonar a nuestros enemigos”.

Así pues, la menor de los Ten Boom dedicó más de 30 años a visitar decenas de países con el objetivo de explicar lo que había ocurrido con su vida, y sobretodo, la forma en que había visto la actuación del poder y el amor de Dios, en medio del terror nazi.

Su historia, pues, recorrió el mundo, tocó muchas conciencias y extendió el mensaje de cómo había habido gente que por tener en más alta estima a Dios que a sus propias vidas, arriesgó todo lo que tenían para dedicarse exclusivamente a otros, a su prójimo.

Corrie murió a los 91 años, en 1983, habiendo recibido un gran reconocimiento internacional. Desde la reina de Holanda hasta el Museo del Holocausto en Jerusalén, muchos le reconocieron su papel crucial tanto en la Segunda Guerra Mundial como en el trabajo para el recuerdo de las víctimas y el lenguaje del perdón sin negar la memoria de lo ocurrido.

Ahora, pues, Israel ha condecorado también a los dos otros héroes de su familia, que a diferencia de Corrie, sí perdieron su vida a manos de los nazis tras la decisión de oponerse a la injusticia. Una decisión que según testigos, Casper Ten Boom justificó convencido poco tiempo antes de morir: “Sería un honor dar mi vida por el antiguo pueblo de Dios”.
 
Re: Heroes de la Fe

¡¡Excelente aporte!!

¡Impactante, conmovedor!


Dios le bendiga hno. Tobi por este aporte
 
Re: Heroes de la Fe

No es necesario que ninguna "iglesia" haga santa a Corrie, pues su testimonio es lo suficientemente impactante para mostrar a quien servía y a quien dedicó su vida; además, muchas almas conocieron a Cristo por medio de ella.

Mateo 25

Y dirá el Rey a los que estén a su derecha: ‘Vengan ustedes, los que han sido bendecidos por mi Padre; reciban el reino que está preparado para ustedes desde que Dios hizo el mundo. 35Pues tuve hambre, y ustedes me dieron de comer; tuve sed, y me dieron de beber; anduve como forastero, y me dieron alojamiento. 36Estuve sin ropa, y ustedes me la dieron; estuve enfermo, y me visitaron; estuve en la cárcel, y vinieron a verme.’ 37Entonces los justos preguntarán: ‘Señor, ¿cuándo te vimos con hambre, y te dimos de comer? ¿O cuándo te vimos con sed, y te dimos de beber? 38¿O cuándo te vimos como forastero, y te dimos alojamiento, o sin ropa, y te la dimos? 39¿O cuándo te vimos enfermo o en la cárcel, y fuimos a verte?’ 40El Rey les contestará: ‘Les aseguro que todo lo que hicieron por uno de estos hermanos míos más humildes, por mí mismo lo hicieron.’
 
Re: Heroes de la Fe

1.- Israel condecora a la familia Ten Boom por salvar cientos de judíos en la II Guerra Mundial

AMSTERDAM, 29/04/2008 (s ACI, Corrie ten Boom House Foundation, Bos News Life, ChristianNewswire. / Joel Forster, ProtestanteDigital)
Con el paso del tiempo, la historia de la familia Ten Boom – de fe protestante- se ha convertido en una de las más recordadas de entre las muchas que destapó la Segunda Guerra Mundial. La figura de Corrie Ten Boom se ha conocido por todo el mundo a través del libro “El refugio secreto” (1971), que incluso se ha convertido en película.

Ahora, el estado de Israel ha querido mostrar su agradecimiento a una familia que dio refugio a centenares de judíos –jugándose la vida- durante la ocupación nazi en Holanda, y ha condecorado póstumamente a Casper y a Betsy Ten Boom (padre e hija mayor de Corrie, muertos durante la II Guerra mundial).

El embajador de Israel en Holanda, Harry Kney-Tal, otorgó a título póstumo el premio “Righteous Among the Nations”, en recuerdo a personas que durante el genocidio judío se comprometieron con las víctimas e hicieron frente al régimen nazi. Fue en un acto solemne en la población en que vivieron los Ten Boom, llamada Harleem, dónde aún hoy se puede visitar la casa que refugió a muchos perseguidos. En la ceremonia, se remarcó que fue su firme fe cristiana lo que movió a los Ten Boom a ocultar en su casa tanto a judíos como a otros opositores holandeses al régimen nazi.

UN HOGAR COMO CENTRO DE REFUGIADOS
Según explica la Fundación Corrie ten Boom, “entre el año 1943 y 1944, vivían usualmente en casa de la familia, de forma ilegal, entre 6 y 7 personas”. Muchos de ellos eran judíos que huían de la Gestapo, pero también pasaron por el escondite muchos personas que pertenecían a la oposición política a Hitler en Holanda. La casa de esta familia de fe protestante –formada por Casper, Betsy y Corrie- se convirtió en un refugio oculto por el que pasaron hasta 800 judíos. Muchos de ellos, en realidad sólo pasaron algunas horas o días entre sus paredes, mientras se les buscaba un lugar más seguro a donde realojarles.

La actividad de ésta familia se acabó en febrero de 1944, después que la Gestapo descubriera la casa. Casper, Betsy y Corrie fueron arrestados rápidamente, pero las 6 personas que en ese momento se encontraban escondidas en la casa no fueron encontradas. Pese a que la policía secreta registró sistemáticamente la casa, “cuatro judíos y dos miembros de la resistencia más, pudieron pasar desapercibidos detrás de una falsa pared en el dormitorio de Corrie”, como explica la fundación. De ésta forma, mientras la familia era deportada, los 6 fugitivos que en ese momento estaban cobijados en su hogar, consiguieron ser liberados dos días después y 5 de ellos pudieron salvar la vida.

El padre de la familia, Casper, murió pocos días después de ser arrestado. Sus hijas fueron deportadas al que sería después recordado como un de los más grandes campos de concentración nazi, el de Ravensbruck.

Allí, las dos hermanas explicaron la razón por la que se encontraban en prisión y sobre todo el motivo que les había llevado a arriesgar su vida por salvar la de muchos otros. Betsy y Corrie hablaron de su fe en Jesús a muchas mujeres con las que compartían celda y torturas, y explicaron que lo que les había empujado a actuar en favor de los perseguidos era su fe en Jesús como Dios y Salvador de sus vidas.

Su impactante convicción y testimonio llevó a que muchas mujeres judías en ese campo de concentración a que decidieran creer en ese mismo Dios. Incluso alguna de sus carceleras, una vez finalizada la guerra.

LA HISTORIA RECORRE EL MUNDO
Besty, la mayor de las hermanas, murió en Ravensbruck a los 59 años. Pero Corrie consiguió salir viva, con un idea clara. Según explica la fundación, Corrie se dio cuenta que “su vida era un regalo de Dios”, y necesitaba compartir lo que ella y su hermana habían aprendido en el campo de concentración: “Dios nos dará el amor suficiente para poder perdonar a nuestros enemigos”.

Así pues, la menor de los Ten Boom dedicó más de 30 años a visitar decenas de países con el objetivo de explicar lo que había ocurrido con su vida, y sobretodo, la forma en que había visto la actuación del poder y el amor de Dios, en medio del terror nazi.

Su historia, pues, recorrió el mundo, tocó muchas conciencias y extendió el mensaje de cómo había habido gente que por tener en más alta estima a Dios que a sus propias vidas, arriesgó todo lo que tenían para dedicarse exclusivamente a otros, a su prójimo.

Corrie murió a los 91 años, en 1983, habiendo recibido un gran reconocimiento internacional. Desde la reina de Holanda hasta el Museo del Holocausto en Jerusalén, muchos le reconocieron su papel crucial tanto en la Segunda Guerra Mundial como en el trabajo para el recuerdo de las víctimas y el lenguaje del perdón sin negar la memoria de lo ocurrido.

Ahora, pues, Israel ha condecorado también a los dos otros héroes de su familia, que a diferencia de Corrie, sí perdieron su vida a manos de los nazis tras la decisión de oponerse a la injusticia. Una decisión que según testigos, Casper Ten Boom justificó convencido poco tiempo antes de morir: “Sería un honor dar mi vida por el antiguo pueblo de Dios”.


Que bendición de vida ejemplar hermano Tobi, gracias por compartirnoslo.

Un saludos
 
Re: Heroes de la Fe

Si el gobierno de Israel lo ha reconocido, nostros no somos menos en reconocer cuando la fe es capaz de mostrar el amor a todo aquel que es perseguido por la causa que fuere.
Hechos 17:26-28
26.- Y de una sangre ha hecho todo el linaje de los hombres, para que habiten sobre toda la faz de la tierra; y les ha prefijado el orden de los tiempos, y los límites de su habitación;
27.- para que busquen a Dios, si en alguna manera, palpando, puedan hallarle, aunque ciertamente no está lejos de cada uno de nosotros.
28.- Porque en él vivimos, y nos movemos, y somos; como algunos de vuestros propios poetas también han dicho: Porque linaje suyo somos

Dañar a un solo ser humano por causa de raza o religion es dañar a toda la humanidad.

Bendiciones