Acaso el sufrimiento y sacrificio de nuestro Señor no fue suficiente. Dejame decirte que orar y ayunar es de gran bendición, pero no tiene como fin sufrir, pues es gozo, paz, presencia de Dios, flagelarse y subir un cerro de rodillas es autocastigarse, sentirse culpable y no saber que sólo debemos ir ante el Padre y en el nombre de Jesucristo nuestros pecados son perdonados, no podemos pagar por nuestros pecados, sería como si Dios nos cobrara un dolar por cada respiro, imaginate, así mismo son los pecados, son inpagables para el hombre, sólo el Cordero de Dios, Perfecto y sin mancha pagó por nosotros. Penitencia? por favor! ni Pedro ni Pablo ni ningún apóstol pagó penitencia, sufrieron, porque está escrito que todo cristiano es probado con fuego, pero no porque ellos decidieran flagelarse. Una cosa es el ayuno y otra la penitencia, debemos ayunar para buscar la presencia de Dios pero no para pretender sufrir con Cristo Jesús, pues el sufrimiento que padeció es incomparable con el hecho de no comer carne unos días.