Re: ¿Maria sin Pecado?
Por cierto, las citas que nos trajo Petrino son de biblistas PROTESTANTES.
A continuación una aportación más que nos hace el hermano:
Por cierto, las citas que nos trajo Petrino son de biblistas PROTESTANTES.
A continuación una aportación más que nos hace el hermano:
No había podido entrar al foro desde hace unos días.
Respecto al tema, cruzpe ha respondido muy bien. Solo agregaría unos comentarios.<?xml:namespace prefix = o ns = "urn:schemas-microsoft-comffice
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Kecharitomene significa que la persona a quien se alude el término fue llenada de la gracia de Dios, desde antes de su presencia ante la persona quien aludió el calificativo.
Viene de tres términos del Griego Antiguo: <o></o
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Charito que es la caridad. En el caso de María, o de cualquier otra persona a quien se aluda el término estaríamos, necesariamente, hablando del amor de Dios y, como Dios es amor en Su misma esencia, estamos hablando entonces de la gracia de Dios. Dios no puede transmitir Su amor hacia ninguna persona, sin transmitirse El mismo hacia esa persona. Esto, en sí es la definición de gracia: don de Dios que transmite, desde El, hacia nosotros.<o></o
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Mene: Es un sufijo en Griego Antiguo que significa que cualquiera que sea el calificativo que le precede, se atestigua en su plenitud. Como el adjetivo que le precede es gracia, significa entonces que el Arcángel Gabriel atestiguó que la gracia de Dios estaba en María a la plena capacidad de María. Más aún, algunos expertos Protestantes coinciden no sólo que MENE significa que el adjetivo que le prosigue es encontrado desde antes, sino que este adjetivo estaba presente y seguirá estando presente. Esto es: pasado, presente y futuro.<o></o
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Ke: Es un sufijo que significa que lo que sea que le sigue, ha sido puesto en ese sitio, desde antes de la presencia de el contenedor, ante quien lo observa. Esto significa que María estuvo llena de gracia, desde antes que el Arcángel Gabriel le saludara diciendo: llena de gracia.<o></o
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De lo anterior concluimos que María posee la Gracia (charito) en un grado superlativo y de manera permanente (mene) desde antes que el ángel la saludara (ke).<o></o
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Por otro lado, de Felipe leemos en el original griego, que es llamado pléres cháritos (Hech 6, 8), lo cual significa que la persona está llena de Dios en ese momento. Pero pleres no significa un grado superlativo ni un estado permanente en pasado, presente y futuro, como el sufijo mene. Además, no es lleno de gracia desde siempre.<o></o
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Además, después de la redención obrada por Cristo, los cristianos sí podemos ser pléres cháritos, pues nuestra alma ya ha sido redimida y ya no está bajo la ira de Dios, no está sometida a la esclavitud del pecado, por lo que la gracia puede habitar en ella. Esto era impensable antes de la redención de Cristo. Los seres humanos no podían ser objetos de la Gracia, pues éramos hijos de la Ira y estábamos sometidos al pecado. Pues bien, en ese estado aparece, como una excepción particularísima, la kecharitomene, una criatura llena de Gracia en grado máximo, signo clarísimo de una redención anticipada de la Virgen María. Lo que quiero decir: nadie podía ser kecharitomene antes de la redención de Cristo. En María hay una condición particular.<o></o
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En resumen, los cristianos, después de la redención de Cristo, sí podemos ser pléres cháritos (llenos de gracia, Hech 6, 8), sí podemos ser ejaritosen (agraciados u objetos de la gracia, Ef 1, 6) pero no somos kecharitomene (llenos de Gracia en grado máximo, superlativo, de manera permanente y en tiempo pasado, presente y futuro, Lc 1, 28)