BUSCANDO UNA RELIGIÓN
Cuando se habla de religión, parece que nadie se pone de acuerdo con nadie; todos hablan, todos gritan, y otros, peor aun, solamente callan. Parece que hablar de religión fuera incitar a la violencia.
Por qué no te detienes un instante en tu caminar apurado y lleno de situaciones difíciles y te preguntas si estás en la religión verdadera -si es que tienes alguna-, es que tiene que haber una religión verdadera. Detente y estudia la historia de tu religión, su trayectoria. Es verdad que no debemos mirar el pasado pero recuerda que el pasado es la base de todo ser, cosa o circunstancia. Estudia el pasado de tu religión, y después, compara todos sus actos con las sagradas escrituras -para eso debes leer muy bien la Biblia, para evitar malas interpretaciones-, si encuentras que tu religión ha hecho todo lo contrario de lo que exige la Biblia, entonces sal de ella lo más pronto posible porque no sabes cuando te hallará la muerte y ya no tengas oportunidad de arrepentimiento. Con esto no estoy diciendo que la religión te salve, pero sin religión no puedes agradar a Jehová; porque el tuvo su pueblo -el pueblo de Israel-, entonces, sigue teniendo un pueblo, y sigue siendo el mismo pueblo de Israel -a pesar de que le han negado-, pero son aquellos que sin negarle le siguieron, y nosotros los que no somos de la raza judía venimos a ser parte del pueblo de Jehová por medio de la sangre de nuestro señor Jesucristo. Es algo así como que somos judíos adoptados.
No aceptes una religión sin antes estudiar mucho sus antecedentes, eso sí, una vez encontrándola lucha por conservar tu integridad cristiana, y digo cristiana, porque fuera de Jesucristo no hallarás religión alguna.
Que el Espíritu Santo sea con ustedes.
Preguntas o sugerencias dirigirse a: [email protected]
Por el escritor: Ricardo Ricardez
Cuando se habla de religión, parece que nadie se pone de acuerdo con nadie; todos hablan, todos gritan, y otros, peor aun, solamente callan. Parece que hablar de religión fuera incitar a la violencia.
Por qué no te detienes un instante en tu caminar apurado y lleno de situaciones difíciles y te preguntas si estás en la religión verdadera -si es que tienes alguna-, es que tiene que haber una religión verdadera. Detente y estudia la historia de tu religión, su trayectoria. Es verdad que no debemos mirar el pasado pero recuerda que el pasado es la base de todo ser, cosa o circunstancia. Estudia el pasado de tu religión, y después, compara todos sus actos con las sagradas escrituras -para eso debes leer muy bien la Biblia, para evitar malas interpretaciones-, si encuentras que tu religión ha hecho todo lo contrario de lo que exige la Biblia, entonces sal de ella lo más pronto posible porque no sabes cuando te hallará la muerte y ya no tengas oportunidad de arrepentimiento. Con esto no estoy diciendo que la religión te salve, pero sin religión no puedes agradar a Jehová; porque el tuvo su pueblo -el pueblo de Israel-, entonces, sigue teniendo un pueblo, y sigue siendo el mismo pueblo de Israel -a pesar de que le han negado-, pero son aquellos que sin negarle le siguieron, y nosotros los que no somos de la raza judía venimos a ser parte del pueblo de Jehová por medio de la sangre de nuestro señor Jesucristo. Es algo así como que somos judíos adoptados.
No aceptes una religión sin antes estudiar mucho sus antecedentes, eso sí, una vez encontrándola lucha por conservar tu integridad cristiana, y digo cristiana, porque fuera de Jesucristo no hallarás religión alguna.
Que el Espíritu Santo sea con ustedes.
Preguntas o sugerencias dirigirse a: [email protected]
Por el escritor: Ricardo Ricardez