JERUSALEM......O WASHINGTON?...

voz777

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22 Octubre 2004
3.509
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Porqué es que cada día mas y mas personas dentro del cristianismo miran lo que sucede en Washington [USA] y creen que todo lo que aqui se hace esta ligada a los tiempos del fin.

Nunca he mirado en la escritura que esta nación tan solo se mencione para nada [excepto cuando dijó Jesús: Id por todo el mundo y predicar el evangelio] ......entonces cómo es que mas personas dia a dia la toman como si este pais fuese el "centro del mundo" y como si de alguna manera hubiese suplantado a Israel en el "reloj profetico".......Que pasa?



voz
 
Re: JERUSALEM......O WASHINGTON?...

Porqué es que cada día mas y mas personas dentro del cristianismo miran lo que sucede en Washington [USA] y creen que todo lo que aqui se hace esta ligada a los tiempos del fin.

Nunca he mirado en la escritura que esta nación tan solo se mencione para nada [excepto cuando dijó Jesús: Id por todo el mundo y predicar el evangelio] ......entonces cómo es que mas personas dia a dia la toman como si este pais fuese el "centro del mundo" y como si de alguna manera hubiese suplantado a Israel en el "reloj profetico".......Que pasa?



voz

Saludos Voz

Asi es...el poder de Washington, o mas concretamente Estados Unidos, va a disminuir para que el poder final que habra sobre el mundo se haga mas fuerte y empiece a asumir el rol que profeticamente le corresponde..es solo cuestion de tiempo.

¿Alguna pista de cual sera el ultimo poder que se levantara en el mundo?

Dios te Bendiga
 
Re: JERUSALEM......O WASHINGTON?...

Hay naciones que no aparecen mencionadas por nombre y apellido, sino mediante figuras y/o símbolos. Los Estados Unidos, como último bastón del protestantismo debe jugar un papel crucial en los tiempos finales, para bien o para mal, porque de aquel protestatismo sólo está quedando el nombre.

No te dejes engañar por las artucias del diablo. Jerusalén terrenal fue desechada por Dios (ojo: no los judíos individualmente), al crucificar a su Hijo, manifestado por el desgarramiento de la cortina que separaba el lugar santo del lugar santísimo. Nosotros, los cristianos, debemos fijar nuestros ojos en la Jerusalén celestial, que bajará del mismo cielo, y de la cual somos habitantes en potencia, según Hebros 11:16.