la salvación de los protestantes

22 Febrero 2006
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Una cosa que he constatado en este foro es que para los protestantes la salvación es una cosa individual. Y la basan en una relación personal con Dios. Podríamos decir que son cristianos porque de esta forma consiguen su salvación individual, mientras los demás se condenan. De forma que su salvación parece más una autosatisfacción que se acrecienta viendo como "los demás" se condenan. Es algo parecido a la postura del hijo que se queda en casa y se indigna porque sea recibido el hijo pródigo. Y esto viene dado porque consideran la relación con Dios de una forma personal, como si no se hubiera encarnado.

Sin embargo, la postura cristiana es completamente diferente. A cristo lo tenemos que encontrar en los hombres. "La vida histórica del Cristo histórico y la vida histórica del Cristo místico no son, pues, dos vidas distintas, sino una sola vida bajo dos aspectos: el uno, simbólico y ejemplar; el otro, simbolizado y real. No separéis a la Iglesia y a Cristo: ¡son una sola carne!".
Después de Cristo no existen ya dos amores realmente distintos. El amor al prójimo es amor a Dios. "El segundo mandamiento es igual al primero." La caridad fraternal es teologal. El prójimo ha sido elevado, juntamente con Dios, a la dignidad de término de la caridad.

Esta caridad, virtud teologal, no tiene sino un solo y el mismo objeto formal: Dios. Y tres términos: Dios, el prójimo y nosotros mismos. Pero, desde la ascensión, ya no alcanza el primero sino a través del segundo: la Iglesia, en tanto que ésta contiene y llama a todos los hombres. "Es preciso afirmar que, concretamente, estos objetos [Dios y nuestros hermanos] no se encuentran y no nos son accesibles sino en el misterio de la Iglesia, comunidad divino, humana de bienaventuranza."

El enemigo irreconciliable, de la encarnación es el fariseo, el hombre que, so pretexto de su celo con respecto a Dios, detesta y condena al hombre Dios. Los fariseos creen que odian tan sólo a un hombre. Pero, en realidad, se han decidido por rechazar a Dios.

El fariseísmo se perpetúa en todos aquellos que intentan convertir sus buenas relaciones con Dios en una excusa de sus malas relaciones con el vecino. ("Pues llega la hora en que todo el que os quite la vida, pensará prestar un servicio a Dios" ). En tiempos de Cristo habían inventado que podían rehuir el pago de una pensión alimenticia a sus allegados si consagraban sus bienes a Dios. ¡Y como ya os podéis imaginar, de unos bienes consagrados a Dios era de todo punto imposible deducir una pensión alimenticia! Tener en regla sus cuentas con Dios les procuraba una buena conciencia en lo que se refería a sus cuentas con los demás.


Cristo trastocó todo esto cuando nos dijo: Tienes las mismas cuentas a establecer con Dios que con tu prójimo. No estás más cerca de Dios que de tu vecino. ¡La única prueba decisiva de que amas a Dios es que ames asimismo a los demás!
La herejía más peligrosa para la Iglesia es la que estriba en desencarnar a Cristo, en re purificar a Dios de su Cuerpo, en situarlo de nuevo en su cielo (¡so pretexto de "prestar un servicio a Dios"! ).

Si Dios estuviera en su cielo, podríamos odiar al prójimo con toda seguridad. O, mejor aún, sin siquiera tomarnos este trabajo (porque detestarlo todavía es ocuparnos de él), podríamos olvidarle, ignorarle, permanecer muy tranquilos en casa con nuestra enclenque religión dominguera, dirigir nuestros respetos al Todopoderoso, y, durante la semana, obrar a nuestra guisa. ¡Qué paz la nuestra!

Pero, desgraciadamente, la religión de la encarnación nada tiene de apacible. Es una inquietud permanente: Dios está aquí. "Tuve hambre. Tuve sed. Me oprimieron". Todas las estructuras de la sociedad son anticristianas: capitalismo, proletariado, privilegios de clase, privilegios de dinero, privilegios de raza y de color, privilegios de educación y de cultura, por doquier se alzan privilegios y barreras, y, pues, por doquier existen opresiones ¡pero Cristo no se halla entre los privilegiados!


El juicio final no versará sobre nuestras relaciones con Dios, porque se prestan a demasiadas ilusiones. "No todo el que dice: ¡Señor, Señor!, entrará en el reino de los cielos, sino el que hace la voluntad de mi Padre, que está en los cielos. Muchos me dirán aquel día: ¡Señor, Señor!, ¿no profetizamos en tu nombre, y en nombre tuyo arrojamos los demonios, y en tu nombre hicimos muchos milagros? Yo entonces les diré: Nunca os conocí “”.

.

San Mateo es decisivo cuando habla contra ésa hipocresía: anuncia la gran sorpresa, la asombrosa novedad (el mandamiento "nuevo”, profetiza el pasmo general: ¡Dios se había encarnado, Dios era hombre!

El texto comienza majestuosamente, en el estilo idealista de la religión celeste: "Cuando el Hijo del hombre venga en su gloria y todos los ángeles con Él, se sentará sobre su trono de gloria, y se reunirán en su presencia todas las gentes... Entonces dirá el rey a los que están a su derecha: Venid, benditos de mi Padre, tomad posesión del reino preparado para vosotros desde la creación del mundo".

¡Nada hay que sea más transcendente! Pero después, brutalmente, pasamos al realismo más absoluto y experimentamos el impacto de la sorpresa. ¿ Qué dice este rey señoreando desde lo alto del cielo? "Tuve hambre... Tuve sed... Estaba desnudo... preso...” Después de la religión "en el cielo", he aquí la religión encarnada. ¡Dios nos devuelve a la tierra!

Y más fuerte aún: El Señor predice que la enseñanza religiosa será siempre deficiente: ni los malditos, ni siquiera los justos, esperaban ser juzgados de aquella manera. ¡Nadie les había prevenido! No sabían que el segundo mandamiento era igual al primero, ignoraban la encarnación.
Fijaos en que este juicio escatológico no menciona las catástrofes habituales. Quizás sea para sugerirnos que la verdadera catástrofe, la gran sacudida (de la que las demás no son sino meras figuras), será el descubrimiento de la identidad de Cristo y de nuestros hermanos, La sorpresa será tan violenta como si las estrellas del cielo cayeran sobre la tierra.


Cuando por primera vez nos dicen: "No estás más cerca de Dios que de tu vecino", la sacudida que experimentamos es harto violenta. Yo me creía muy cerca de Dios debido a mis arrobos y a mis plegarias, a mi estudio de la biblia, etc. Pero si es verdad que no amo más a Dios que lo que amo a mis vecinos (mi vecino de calle, mi vecino de mesa, mi vecino de trabajo, mi vecino de autobús), entonces, resulta en verdad terrible, pero no amo apenas a Dios.. Esto lo cambia todo. Semejante puntualización es trastornadora. He de pasar del "infinito" al primer plano. "Pero, Señor, ¿acaso no comí y bebí contigo?" "¡No te conozco!"
¿acaso no leía la biblia y oraba todos los días? ."¡No te conozco!"
 
Re: la salvación de los protestantes

Una cosa que he constatado en este foro es que para los protestantes la salvación es una cosa individual. Y la basan en una relación personal con Dios. Podríamos decir que son cristianos porque de esta forma consiguen su salvación individual, mientras los demás se condenan. De forma que su salvación parece más una autosatisfacción que se acrecienta viendo como "los demás" se condenan. Es algo parecido a la postura del hijo que se queda en casa y se indigna porque sea recibido el hijo pródigo. Y esto viene dado porque consideran la relación con Dios de una forma personal, como si no se hubiera encarnado.

Sin embargo, la postura cristiana es completamente diferente. A cristo lo tenemos que encontrar en los hombres. "La vida histórica del Cristo histórico y la vida histórica del Cristo místico no son, pues, dos vidas distintas, sino una sola vida bajo dos aspectos: el uno, simbólico y ejemplar; el otro, simbolizado y real. No separéis a la Iglesia y a Cristo: ¡son una sola carne!".
Después de Cristo no existen ya dos amores realmente distintos. El amor al prójimo es amor a Dios. "El segundo mandamiento es igual al primero." La caridad fraternal es teologal. El prójimo ha sido elevado, juntamente con Dios, a la dignidad de término de la caridad.

Esta caridad, virtud teologal, no tiene sino un solo y el mismo objeto formal: Dios. Y tres términos: Dios, el prójimo y nosotros mismos. Pero, desde la ascensión, ya no alcanza el primero sino a través del segundo: la Iglesia, en tanto que ésta contiene y llama a todos los hombres. "Es preciso afirmar que, concretamente, estos objetos [Dios y nuestros hermanos] no se encuentran y no nos son accesibles sino en el misterio de la Iglesia, comunidad divino, humana de bienaventuranza."

El enemigo irreconciliable, de la encarnación es el fariseo, el hombre que, so pretexto de su celo con respecto a Dios, detesta y condena al hombre Dios. Los fariseos creen que odian tan sólo a un hombre. Pero, en realidad, se han decidido por rechazar a Dios.

El fariseísmo se perpetúa en todos aquellos que intentan convertir sus buenas relaciones con Dios en una excusa de sus malas relaciones con el vecino. ("Pues llega la hora en que todo el que os quite la vida, pensará prestar un servicio a Dios" ). En tiempos de Cristo habían inventado que podían rehuir el pago de una pensión alimenticia a sus allegados si consagraban sus bienes a Dios. ¡Y como ya os podéis imaginar, de unos bienes consagrados a Dios era de todo punto imposible deducir una pensión alimenticia! Tener en regla sus cuentas con Dios les procuraba una buena conciencia en lo que se refería a sus cuentas con los demás.


Cristo trastocó todo esto cuando nos dijo: Tienes las mismas cuentas a establecer con Dios que con tu prójimo. No estás más cerca de Dios que de tu vecino. ¡La única prueba decisiva de que amas a Dios es que ames asimismo a los demás!
La herejía más peligrosa para la Iglesia es la que estriba en desencarnar a Cristo, en re purificar a Dios de su Cuerpo, en situarlo de nuevo en su cielo (¡so pretexto de "prestar un servicio a Dios"! ).

Si Dios estuviera en su cielo, podríamos odiar al prójimo con toda seguridad. O, mejor aún, sin siquiera tomarnos este trabajo (porque detestarlo todavía es ocuparnos de él), podríamos olvidarle, ignorarle, permanecer muy tranquilos en casa con nuestra enclenque religión dominguera, dirigir nuestros respetos al Todopoderoso, y, durante la semana, obrar a nuestra guisa. ¡Qué paz la nuestra!

Pero, desgraciadamente, la religión de la encarnación nada tiene de apacible. Es una inquietud permanente: Dios está aquí. "Tuve hambre. Tuve sed. Me oprimieron". Todas las estructuras de la sociedad son anticristianas: capitalismo, proletariado, privilegios de clase, privilegios de dinero, privilegios de raza y de color, privilegios de educación y de cultura, por doquier se alzan privilegios y barreras, y, pues, por doquier existen opresiones ¡pero Cristo no se halla entre los privilegiados!


El juicio final no versará sobre nuestras relaciones con Dios, porque se prestan a demasiadas ilusiones. "No todo el que dice: ¡Señor, Señor!, entrará en el reino de los cielos, sino el que hace la voluntad de mi Padre, que está en los cielos. Muchos me dirán aquel día: ¡Señor, Señor!, ¿no profetizamos en tu nombre, y en nombre tuyo arrojamos los demonios, y en tu nombre hicimos muchos milagros? Yo entonces les diré: Nunca os conocí “”.

.

San Mateo es decisivo cuando habla contra ésa hipocresía: anuncia la gran sorpresa, la asombrosa novedad (el mandamiento "nuevo”, profetiza el pasmo general: ¡Dios se había encarnado, Dios era hombre!

El texto comienza majestuosamente, en el estilo idealista de la religión celeste: "Cuando el Hijo del hombre venga en su gloria y todos los ángeles con Él, se sentará sobre su trono de gloria, y se reunirán en su presencia todas las gentes... Entonces dirá el rey a los que están a su derecha: Venid, benditos de mi Padre, tomad posesión del reino preparado para vosotros desde la creación del mundo".

¡Nada hay que sea más transcendente! Pero después, brutalmente, pasamos al realismo más absoluto y experimentamos el impacto de la sorpresa. ¿ Qué dice este rey señoreando desde lo alto del cielo? "Tuve hambre... Tuve sed... Estaba desnudo... preso...” Después de la religión "en el cielo", he aquí la religión encarnada. ¡Dios nos devuelve a la tierra!

Y más fuerte aún: El Señor predice que la enseñanza religiosa será siempre deficiente: ni los malditos, ni siquiera los justos, esperaban ser juzgados de aquella manera. ¡Nadie les había prevenido! No sabían que el segundo mandamiento era igual al primero, ignoraban la encarnación.
Fijaos en que este juicio escatológico no menciona las catástrofes habituales. Quizás sea para sugerirnos que la verdadera catástrofe, la gran sacudida (de la que las demás no son sino meras figuras), será el descubrimiento de la identidad de Cristo y de nuestros hermanos, La sorpresa será tan violenta como si las estrellas del cielo cayeran sobre la tierra.


Cuando por primera vez nos dicen: "No estás más cerca de Dios que de tu vecino", la sacudida que experimentamos es harto violenta. Yo me creía muy cerca de Dios debido a mis arrobos y a mis plegarias, a mi estudio de la biblia, etc. Pero si es verdad que no amo más a Dios que lo que amo a mis vecinos (mi vecino de calle, mi vecino de mesa, mi vecino de trabajo, mi vecino de autobús), entonces, resulta en verdad terrible, pero no amo apenas a Dios.. Esto lo cambia todo. Semejante puntualización es trastornadora. He de pasar del "infinito" al primer plano. "Pero, Señor, ¿acaso no comí y bebí contigo?" "¡No te conozco!"
¿acaso no leía la biblia y oraba todos los días? ."¡No te conozco!"

saludos

de donde trajo su copy and paste?


Pero, desde la ascensión, ya no alcanza el primero sino a través del segundo: la Iglesia


Sin embargo, la postura cristiana es completamente diferente. A cristo lo tenemos que encontrar en los hombres. "La vida histórica del Cristo histórico y la vida histórica del Cristo místico no son, pues, dos vidas distintas, sino una sola vida bajo dos aspectos: el uno, simbólico y ejemplar; el otro, simbolizado y real. No separéis a la Iglesia y a Cristo: ¡son una sola carne!".

quien es la iglesia para usted?
 
Re: la salvación de los protestantes

Una cosa que he constatado en este foro es que para los protestantes la salvación es una cosa individual. Y la basan en una relación personal con Dios. Podríamos decir que son cristianos porque de esta forma consiguen su salvación individual, mientras los demás se condenan. De forma que su salvación parece más una autosatisfacción que se acrecienta viendo como "los demás" se condenan. Es algo parecido a la postura del hijo que se queda en casa y se indigna porque sea recibido el hijo pródigo. Y esto viene dado porque consideran la relación con Dios de una forma personal, como si no se hubiera encarnado.

Sin embargo, la postura cristiana es completamente diferente. A cristo lo tenemos que encontrar en los hombres. "La vida histórica del Cristo histórico y la vida histórica del Cristo místico no son, pues, dos vidas distintas, sino una sola vida bajo dos aspectos: el uno, simbólico y ejemplar; el otro, simbolizado y real. No separéis a la Iglesia y a Cristo: ¡son una sola carne!".
Después de Cristo no existen ya dos amores realmente distintos. El amor al prójimo es amor a Dios. "El segundo mandamiento es igual al primero." La caridad fraternal es teologal. El prójimo ha sido elevado, juntamente con Dios, a la dignidad de término de la caridad.

Esta caridad, virtud teologal, no tiene sino un solo y el mismo objeto formal: Dios. Y tres términos: Dios, el prójimo y nosotros mismos. Pero, desde la ascensión, ya no alcanza el primero sino a través del segundo: la Iglesia, en tanto que ésta contiene y llama a todos los hombres. "Es preciso afirmar que, concretamente, estos objetos [Dios y nuestros hermanos] no se encuentran y no nos son accesibles sino en el misterio de la Iglesia, comunidad divino, humana de bienaventuranza."

El enemigo irreconciliable, de la encarnación es el fariseo, el hombre que, so pretexto de su celo con respecto a Dios, detesta y condena al hombre Dios. Los fariseos creen que odian tan sólo a un hombre. Pero, en realidad, se han decidido por rechazar a Dios.

El fariseísmo se perpetúa en todos aquellos que intentan convertir sus buenas relaciones con Dios en una excusa de sus malas relaciones con el vecino. ("Pues llega la hora en que todo el que os quite la vida, pensará prestar un servicio a Dios" ). En tiempos de Cristo habían inventado que podían rehuir el pago de una pensión alimenticia a sus allegados si consagraban sus bienes a Dios. ¡Y como ya os podéis imaginar, de unos bienes consagrados a Dios era de todo punto imposible deducir una pensión alimenticia! Tener en regla sus cuentas con Dios les procuraba una buena conciencia en lo que se refería a sus cuentas con los demás.


Cristo trastocó todo esto cuando nos dijo: Tienes las mismas cuentas a establecer con Dios que con tu prójimo. No estás más cerca de Dios que de tu vecino. ¡La única prueba decisiva de que amas a Dios es que ames asimismo a los demás!
La herejía más peligrosa para la Iglesia es la que estriba en desencarnar a Cristo, en re purificar a Dios de su Cuerpo, en situarlo de nuevo en su cielo (¡so pretexto de "prestar un servicio a Dios"! ).

Si Dios estuviera en su cielo, podríamos odiar al prójimo con toda seguridad. O, mejor aún, sin siquiera tomarnos este trabajo (porque detestarlo todavía es ocuparnos de él), podríamos olvidarle, ignorarle, permanecer muy tranquilos en casa con nuestra enclenque religión dominguera, dirigir nuestros respetos al Todopoderoso, y, durante la semana, obrar a nuestra guisa. ¡Qué paz la nuestra!

Pero, desgraciadamente, la religión de la encarnación nada tiene de apacible. Es una inquietud permanente: Dios está aquí. "Tuve hambre. Tuve sed. Me oprimieron". Todas las estructuras de la sociedad son anticristianas: capitalismo, proletariado, privilegios de clase, privilegios de dinero, privilegios de raza y de color, privilegios de educación y de cultura, por doquier se alzan privilegios y barreras, y, pues, por doquier existen opresiones ¡pero Cristo no se halla entre los privilegiados!


El juicio final no versará sobre nuestras relaciones con Dios, porque se prestan a demasiadas ilusiones. "No todo el que dice: ¡Señor, Señor!, entrará en el reino de los cielos, sino el que hace la voluntad de mi Padre, que está en los cielos. Muchos me dirán aquel día: ¡Señor, Señor!, ¿no profetizamos en tu nombre, y en nombre tuyo arrojamos los demonios, y en tu nombre hicimos muchos milagros? Yo entonces les diré: Nunca os conocí “”.

.

San Mateo es decisivo cuando habla contra ésa hipocresía: anuncia la gran sorpresa, la asombrosa novedad (el mandamiento "nuevo”, profetiza el pasmo general: ¡Dios se había encarnado, Dios era hombre!

El texto comienza majestuosamente, en el estilo idealista de la religión celeste: "Cuando el Hijo del hombre venga en su gloria y todos los ángeles con Él, se sentará sobre su trono de gloria, y se reunirán en su presencia todas las gentes... Entonces dirá el rey a los que están a su derecha: Venid, benditos de mi Padre, tomad posesión del reino preparado para vosotros desde la creación del mundo".

¡Nada hay que sea más transcendente! Pero después, brutalmente, pasamos al realismo más absoluto y experimentamos el impacto de la sorpresa. ¿ Qué dice este rey señoreando desde lo alto del cielo? "Tuve hambre... Tuve sed... Estaba desnudo... preso...” Después de la religión "en el cielo", he aquí la religión encarnada. ¡Dios nos devuelve a la tierra!

Y más fuerte aún: El Señor predice que la enseñanza religiosa será siempre deficiente: ni los malditos, ni siquiera los justos, esperaban ser juzgados de aquella manera. ¡Nadie les había prevenido! No sabían que el segundo mandamiento era igual al primero, ignoraban la encarnación.
Fijaos en que este juicio escatológico no menciona las catástrofes habituales. Quizás sea para sugerirnos que la verdadera catástrofe, la gran sacudida (de la que las demás no son sino meras figuras), será el descubrimiento de la identidad de Cristo y de nuestros hermanos, La sorpresa será tan violenta como si las estrellas del cielo cayeran sobre la tierra.


Cuando por primera vez nos dicen: "No estás más cerca de Dios que de tu vecino", la sacudida que experimentamos es harto violenta. Yo me creía muy cerca de Dios debido a mis arrobos y a mis plegarias, a mi estudio de la biblia, etc. Pero si es verdad que no amo más a Dios que lo que amo a mis vecinos (mi vecino de calle, mi vecino de mesa, mi vecino de trabajo, mi vecino de autobús), entonces, resulta en verdad terrible, pero no amo apenas a Dios.. Esto lo cambia todo. Semejante puntualización es trastornadora. He de pasar del "infinito" al primer plano. "Pero, Señor, ¿acaso no comí y bebí contigo?" "¡No te conozco!"
¿acaso no leía la biblia y oraba todos los días? ."¡No te conozco!"

Si suprimimos "los protestantes" y ponemos los anticatólicos de este foro, su escrito es para un 10 felicitado. Para que no se confunda, soy católica, pero intento ser coherente con la pastoral del Papa centrada en el llamado a la unidad de los cristianos. Creo que ha llegado la hora de hacer a cada uno responsable de su propio obrar. Si no somos como los que porque el cura lo miró torcido ya tienen la excusa perfecta para justificar que se fueron y ahora necesitan ver que todos los que se quedaron a pesar del cura están equivocados.

Bendiciones. Inés
 
Re: la salvación de los protestantes

saludos

de donde trajo su copy and paste?

De donde sea habria que copiarlo y pegarlo, total en un revanchismo por el epígrafe en paralelo respecto a que no conocen respecrto a su "salvación" los catolicoromanos.

Asi es el espiritu antireformado o contrareformado, asi funciona: si la reforma dice no a las imágenes, el espiritu de la contrareforma dice: ha como que no, a poner imagenes por doquier, ...y asi sucesivamente.

Nada nuevo bajo el sol.
 
Re: la salvación de los protestantes

De donde sea habria que copiarlo y pegarlo, total en un revanchismo por el epígrafe en paralelo respecto a que no conocen respecrto a su "salvación" los catolicoromanos.

Asi es el espiritu antireformado o contrareformado, asi funciona: si la reforma dice no a las imágenes, el espiritu de la contrareforma dice: ha como que no, a poner imagenes por doquier, ...y asi sucesivamente.

Nada nuevo bajo el sol.
saludos OSO

valla pense que leia mal
pero me confirmas eso
un revanchismo
lo de siempre
y como dices nada nuevo bajo el sol
 
Re: la salvación de los protestantes

Les falta la escoba y la pañoleta y ya vuelan.

Bendiciones. Inés

gracias por su amor en nosotros INES
luego regresamos al tema con algunas inquietudes
 
Re: la salvación de los protestantes

He intentado explicar que esa falsa seguridad que tienen los evangélicos de que ellos son salvos y los demás no lo son, no es cristiana, y no habeis dado ningún argumento en contra.
Lo que si es cierto es que el evangelio nos dice que el juicio causará grandes sorpresas. Ni los justos ni los condenados esperaban el juicio de esa manera. ¿donde queda la seguridad de que hacen gala muchos evangélicos de que son salvos?
 
Re: la salvación de los protestantes

"Porque por gracia sois salvos por medio de la fe; y esto no de vosotros, pues es don de Dios.." (Efesio 2:8)

"Bendito el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, que según su grande misericordia nos hizo renacer para una esperanza viva, por la resurrección de Jesucristo de los muertos, para una herencia incorruptible, incontaminada e inmarcesible, reservada en los cielos para vosotros, que sois guardados por el poder de Dios mediante la fe, para alcanzar la salvación que está preparada para ser manifestada en el tiempo postrero." (1 Pedro 1:3-5)

Es Palabra de Dios.
Bendiciones en Cristo
 
Re: la salvación de los protestantes

Estimado Josefaz

¿Por qué los evangélicos (debieran ser también los católicos) tenemos seguridad absoluta de nuestra salvación? …pues porque lo dice su Palabra. …¿Qué más?

Es lamentable que pongas un tema solo para discutir; haciendo juicios tan aventureros como decir “falsa seguridad en los evangélicos de ser salvos”.

¿Sabes tu, estimado josefaz, que en el Antiguo Pacto, el israelita que había pecado, llegaba donde el sacerdote, y ofrecía por su pecado de acuerdo a la Ley; y luego se retiraba con la absoluta convicción, seguridad y tranquilidad de haber sido perdonado?;... volvía a su tienda con aquella seguridad; no porque el había sentido algo, sino porque confiaba determinantemente en la Palabra de Dios, pues Dios declaraba en dos oportunidades formalmente: “Y será perdonado” (Lev. 4:31,35) ¿Cómo no habremos de tener hoy, en el tiempo de la gracia, una mayor y más profunda seguridad de ser salvos, …si lo dice también Dios en su Palabra?: “Porque por gracia sois salvos; y esto no de vosotros, pues es don de Dios” (Efesios2:8) También dice: “por su misericordia nos salvó” (Tito 3:5) Y… “Que si confesares con tu boca al Señor Jesús, y creyeres en tu corazón que Dios le levantó de entre los muertos, SERÁS SALVO” (Rom. 10:9)

Además, estimado josefaz; … ¿como no aceptar la Palabra de Dios, …si ella dice que el que no cree a Dios, le ha hecho mentiroso”? Por tanto,.. si Dios me dice que si creo en Jesucristo soy salvo,… entonces ¡SOY SALVO! ...porque le creo a Dios...


Saludos y bendiciones.
 
Re: la salvación de los protestantes

Estimado Josefaz

¿Por qué los evangélicos (debieran ser también los católicos) tenemos seguridad absoluta de nuestra salvación? …pues porque lo dice su Palabra. …¿Qué más?

Es lamentable que pongas un tema solo para discutir; haciendo juicios tan aventureros como decir “falsa seguridad en los evangélicos de ser salvos”.

¿Sabes tu, estimado josefaz, que en el Antiguo Pacto, el israelita que había pecado, llegaba donde el sacerdote, y ofrecía por su pecado de acuerdo a la Ley; y luego se retiraba con la absoluta convicción, seguridad y tranquilidad de haber sido perdonado?;... volvía a su tienda con aquella seguridad; no porque el había sentido algo, sino porque confiaba determinantemente en la Palabra de Dios, pues Dios declaraba en dos oportunidades formalmente: “Y será perdonado” (Lev. 4:31,35) ¿Cómo no habremos de tener hoy, en el tiempo de la gracia, una mayor y más profunda seguridad de ser salvos, …si lo dice también Dios en su Palabra?: “Porque por gracia sois salvos; y esto no de vosotros, pues es don de Dios” (Efesios2:8) También dice: “por su misericordia nos salvó” (Tito 3:5) Y… “Que si confesares con tu boca al Señor Jesús, y creyeres en tu corazón que Dios le levantó de entre los muertos, SERÁS SALVO” (Rom. 10:9)

Además, estimado josefaz; … ¿como no aceptar la Palabra de Dios, …si ella dice que el que no cree a Dios, le ha hecho mentiroso”? Por tanto,.. si Dios me dice que si creo en Jesucristo soy salvo,… entonces ¡SOY SALVO! ...porque le creo a Dios...


Saludos y bendiciones.
Los fariseos tenían esa misma seguridad, y no les valía para nada. El publicano es el que salió justificado, pero el fariseo no. Me parece que sois vosotros los fariseos modernos.
 
Re: la salvación de los protestantes

Josefaz;


Tu postura suena a la nueva era, dianetica, cientologia todas mezcladas con un poco de romanimos tradicionalista. La referencia a la salvacion individual la vez desde Genesis hasta Apocalipsis.

Es el hombre quien elige recibir la gracia de Dios o la rechaza, pero para que le saques el polvo de arriba a tu Biblia, lee Apocalipsis 3:20 todo el que responde al llamado el le recibe. Juan capitulo 3, para que todo aquel que en El cree!!!, no se pierda mas tenga vida eterna, en el singular.

Dios anhela que toda la humanidad sea salva, pero es eleccion individual y personal de cada uno. Desde Adan bajando por los patriarcas, los profetas, los reyes de Israel y hasta Jesus eligieron servir o no servir a Dios. El nos doto con voluntad propia y libre alvedrio, porque? Porque EL anhela que le recibas de tu propia voluntad, de todo corazon y con todo tu ser.

Por eso nuestra relacion con Dios es personal e individual, nuestra vida como iglesia es otro asunto en el cual por obediencia nos unimos para formar el cuerpo de Cristo aqui en la tierra.

Que nos separa? La forma en que una institucion que reclama ser la verdadera iglesia instituida por Cristo a tomado Su Palabra la ha puesto en un segundo lugar prefiriendo seguir y practicar dogmas humanos con poca o ninguna base biblica fundamental. Instituyendo tradiciones y rituales los cuales jamas se mencionan en la Biblia o se registra a Cristo practicando.

Ines;

Quieres ver unidad de la iglesia, deja a Basula de un lado, desempolva tu Biblia, estudiala, aprendela y vivela luego ensena a tus hermanos catolicos a hacer lo mismo, entonces ven y buscanos, entonces veras la diferencia...



Que Dios nos bendiga e ilumine!!!


 
Re: la salvación de los protestantes

Los fariseos tenían esa misma seguridad, y no les valía para nada. El publicano es el que salió justificado, pero el fariseo no. Me parece que sois vosotros los fariseos modernos.

Estimado josefaz

¿que espíritu te mueve josefaz? ... ¿en que te ofendí con mi aporte; que contestas de esa manera?

Saludos y bendiciones
 
Re: la salvación de los protestantes

Una cosa que he constatado en este foro es que para los protestantes la salvación es una cosa individual. Y la basan en una relación personal con Dios. Podríamos decir que son cristianos porque de esta forma consiguen su salvación individual, mientras los demás se condenan. De forma que su salvación parece más una autosatisfacción que se acrecienta viendo como "los demás" se condenan. Es algo parecido a la postura del hijo que se queda en casa y se indigna porque sea recibido el hijo pródigo. Y esto viene dado porque consideran la relación con Dios de una forma personal, como si no se hubiera encarnado.

Sin embargo, la postura cristiana es completamente diferente. A cristo lo tenemos que encontrar en los hombres.
Presiento que estas haciendo una diferencia entre los cristianos y los protestantes... no sera que lo que quisiste decir fue cristianos y catolicos??




"La vida histórica del Cristo histórico y la vida histórica del Cristo místico no son, pues, dos vidas distintas, sino una sola vida bajo dos aspectos: el uno, simbólico y ejemplar; el otro, simbolizado y real. No separéis a la Iglesia y a Cristo: ¡son una sola carne!".
Después de Cristo no existen ya dos amores realmente distintos. El amor al prójimo es amor a Dios. "El segundo mandamiento es igual al primero." La caridad fraternal es teologal. El prójimo ha sido elevado, juntamente con Dios, a la dignidad de término de la caridad.
Yerras, querido Josefaz: antes de que JESUCRISTO caminara por la tierra en su ministerio terrenal, el hombre ya practicaba la caridad, y eso NO LO HACIA SALVO.tenia que ademas, ofrecer sacrificios por su salvacion. El amor al projimo ES IMPOSIBLE sin el amor de Dios por el projimo en uno. Tus obras de caridad puedes hacerlas muy bien, satisfactoriamente SIN HABER CONOCIDO A DIOS. Asi es que cuando Jesucristo nos ministro en el amor al projimo estaba diferenciando entre el amor como el mundo lo da, y el amor como Dios lo da, que es al que nosotros debemos aspirar. de que le sirve a tu projimo que hagas obras de caridad con el en esta vida, si al final de su vida se perdera y morira e ira a parar en el infierno eternamente??? de que sirven las caridades si no se predica con ellas LA SALVACION??? no hizo lo mismo JESUS quien primero proveyo para las necesidades fisicas de los hombres Y LUEGO una vez saciados LAS NECESIDADES ESPIRITUALES A SABER LA VIDA ETERNA??

Esta caridad, virtud teologal, no tiene sino un solo y el mismo objeto formal: Dios. Y tres términos: Dios, el prójimo y nosotros mismos. Pero, desde la ascensión, ya no alcanza el primero sino a través del segundo: la Iglesia, en tanto que ésta contiene y llama a todos los hombres. "Es preciso afirmar que, concretamente, estos objetos [Dios y nuestros hermanos] no se encuentran y no nos son accesibles sino en el misterio de la Iglesia, comunidad divino, humana de bienaventuranza."
Completamente falsa doctrina, DIOS NO NECESITA a la iglesia para alcanzar al hombre. EL HOMBRE Y LA IGLESIA necesitan a DIOS y DIOS ESTA AL ALCANCE DE TODOS LOS HOMBRES en cualquier momento en que los hombres VOLTEEN SUS OJOS A DIOS. -independientemente si hay o no iglesia-
El enemigo irreconciliable, de la encarnación es el fariseo, el hombre que, so pretexto de su celo con respecto a Dios, detesta y condena al hombre Dios. Los fariseos creen que odian tan sólo a un hombre. Pero, en realidad, se han decidido por rechazar a Dios.

El fariseísmo se perpetúa en todos aquellos que intentan convertir sus buenas relaciones con Dios en una excusa de sus malas relaciones con el vecino. ("Pues llega la hora en que todo el que os quite la vida, pensará prestar un servicio a Dios" ). En tiempos de Cristo habían inventado que podían rehuir el pago de una pensión alimenticia a sus allegados si consagraban sus bienes a Dios. ¡Y como ya os podéis imaginar, de unos bienes consagrados a Dios era de todo punto imposible deducir una pensión alimenticia! Tener en regla sus cuentas con Dios les procuraba una buena conciencia en lo que se refería a sus cuentas con los demás.

Satanas, muerto de la risa con tu aportacion, josefaz. NO ES LA GRAN COMISION IR AL HOMBRE Y PREDICARLE DE ARREPENTIMIENTO DE PECADOS??? como te imaginas tu que reaccionan los hombres que no quieren arrepentirse de sus pecados cuando se les menciona de su necesidad de arrepentimiento??? no vino Jesucristo a traer division???


Cristo trastocó todo esto cuando nos dijo: Tienes las mismas cuentas a establecer con Dios que con tu prójimo.

Cuando dijo "Dios" eso Josefaz??? de donde sacas ese invento??
No estás más cerca de Dios que de tu vecino. ¡La única prueba decisiva de que amas a Dios es que ames asimismo a los demás!
La herejía más peligrosa para la Iglesia es la que estriba en desencarnar a Cristo, en re purificar a Dios de su Cuerpo, en situarlo de nuevo en su cielo (¡so pretexto de "prestar un servicio a Dios"! ).

Si Dios estuviera en su cielo, podríamos odiar al prójimo con toda seguridad. O, mejor aún, sin siquiera tomarnos este trabajo (porque detestarlo todavía es ocuparnos de él), podríamos olvidarle, ignorarle, permanecer muy tranquilos en casa con nuestra enclenque religión dominguera, dirigir nuestros respetos al Todopoderoso, y, durante la semana, obrar a nuestra guisa. ¡Qué paz la nuestra!

esa es la religion humana, Josefaz. los verdaderos Cristianos viven una vida dinamica en Cristo Jesus quien no se limita a las cuatro paredes de un templo, ni se limita a la carne de los hombres. DIOS ES DIOS y los que le aman y temen, testifican que el vive en LOS HOMBRES que le han aceptado, y en los hombres que le buscan y en los hombres que el Creo pero no vive en los hombres que le odian, ni en los hombres que vituperan Su nombre, ni en los hombres que sirven a SAtanas, lo sabias/???

Pero, desgraciadamente, la religión de la encarnación nada tiene de apacible. Es una inquietud permanente: Dios está aquí. "Tuve hambre. Tuve sed. Me oprimieron". Todas las estructuras de la sociedad son anticristianas: capitalismo, proletariado, privilegios de clase, privilegios de dinero, privilegios de raza y de color, privilegios de educación y de cultura, por doquier se alzan privilegios y barreras, y, pues, por doquier existen opresiones ¡pero Cristo no se halla entre los privilegiados!

Cristo es DIOS Y SE HAYA EN TODAS PARTES. no hay un solo lugar en la Biblia que diga que Dios no se haya en todas partes sin embargo hay quienes activamente RECHAZAN A DIOS y dificlmente podrias ver a Dios en alguien que le odia... no crees tu asi??? sea este rico o pobre
El juicio final no versará sobre nuestras relaciones con Dios, porque se prestan a demasiadas ilusiones. "No todo el que dice: ¡Señor, Señor!, entrará en el reino de los cielos, sino el que hace la voluntad de mi Padre, que está en los cielos. Muchos me dirán aquel día: ¡Señor, Señor!, ¿no profetizamos en tu nombre, y en nombre tuyo arrojamos los demonios, y en tu nombre hicimos muchos milagros? Yo entonces les diré: Nunca os conocí “”.

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San Mateo es decisivo cuando habla contra ésa hipocresía: anuncia la gran sorpresa, la asombrosa novedad (el mandamiento "nuevo”, profetiza el pasmo general: ¡Dios se había encarnado, Dios era hombre!

El texto comienza majestuosamente, en el estilo idealista de la religión celeste: "Cuando el Hijo del hombre venga en su gloria y todos los ángeles con Él, se sentará sobre su trono de gloria, y se reunirán en su presencia todas las gentes... Entonces dirá el rey a los que están a su derecha: Venid, benditos de mi Padre, tomad posesión del reino preparado para vosotros desde la creación del mundo".

¡Nada hay que sea más transcendente! Pero después, brutalmente, pasamos al realismo más absoluto y experimentamos el impacto de la sorpresa. ¿ Qué dice este rey señoreando desde lo alto del cielo? "Tuve hambre... Tuve sed... Estaba desnudo... preso...” Después de la religión "en el cielo", he aquí la religión encarnada. ¡Dios nos devuelve a la tierra!

Y más fuerte aún: El Señor predice que la enseñanza religiosa será siempre deficiente: ni los malditos, ni siquiera los justos, esperaban ser juzgados de aquella manera. ¡Nadie les había prevenido! No sabían que el segundo mandamiento era igual al primero, ignoraban la encarnación.
Fijaos en que este juicio escatológico no menciona las catástrofes habituales. Quizás sea para sugerirnos que la verdadera catástrofe, la gran sacudida (de la que las demás no son sino meras figuras), será el descubrimiento de la identidad de Cristo y de nuestros hermanos, La sorpresa será tan violenta como si las estrellas del cielo cayeran sobre la tierra.


Cuando por primera vez nos dicen: "No estás más cerca de Dios que de tu vecino", la sacudida que experimentamos es harto violenta. Yo me creía muy cerca de Dios debido a mis arrobos y a mis plegarias, a mi estudio de la biblia, etc. Pero si es verdad que no amo más a Dios que lo que amo a mis vecinos (mi vecino de calle, mi vecino de mesa, mi vecino de trabajo, mi vecino de autobús), entonces, resulta en verdad terrible, pero no amo apenas a Dios.. Esto lo cambia todo. Semejante puntualización es trastornadora. He de pasar del "infinito" al primer plano. "Pero, Señor, ¿acaso no comí y bebí contigo?" "¡No te conozco!"
¿acaso no leía la biblia y oraba todos los días? ."¡No te conozco!"



No hay amor mas grande que el que DIOS TIENE POR SU CREACION> tu no puedes amar mas a tu projimo que DIOS MISMO quien se dio a si mismo por todos nosotros. Cuando compredas esta verdad, dejaras de creer que el mandamiento de que ames a tu projimo es algo que puedes hacer tu por ti mismo. SI DIOS NO VIVE EN TI, no puedes amar porque DIOS ES AMOR. el amor de Dios, ver a las personas como el las ve, es un DON DE DIOS y no esta en los hombres. asi como la salvacion ES UN DON DE DIOS y no esta en los hombres ser salvos por si mismos, NECESITAN A DIOS lo mismo es el amor EL HOMBRE NO PUEDE AMAR si no conoce a Dios. asi es que primero es EL ARREPENTIMIENTO, LUEGO LA SALVACION Y EL FRUTO DE ESTO ES EL AMOR DE DIOS que nos permite amar al projimo como DIOS LE AMA y DIO SU VIDA POR NOSOTROS.

no al reves
 
Re: la salvación de los protestantes

Estimado josefaz

¿que espíritu te mueve josefaz? ... ¿en que te ofendí con mi aporte; que contestas de esa manera?

Saludos y bendiciones

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Hermano Dagoberto, a la vista de los acontecimientos va a resultar que ser fariseo moderno va a ser una honra en vez de un desprecio, como pretenden los que lo usan para insultarnos.

Si ser fariseo moderno significa que no tenemos que ver nada con quien nos llama de tal manera, entonces resultara algo honroso.

Que Dios les bendiga a todos

Paz
 
Re: la salvación de los protestantes

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Hermano Dagoberto, a la vista de los acontecimientos va a resultar que ser fariseo moderno va a ser una honra en vez de un desprecio, como pretenden los que lo usan para insultarnos.

Si ser fariseo moderno significa que no tenemos que ver nada con quien nos llama de tal manera, entonces resultara algo honroso.

Que Dios les bendiga a todos

Paz
También en tiempos de Cristo los fariseos estaban orgullosos de serlo.
 
Re: la salvación de los protestantes

También en tiempos de Cristo los fariseos estaban orgullosos de serlo.

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Mateo 5:11 Bienaventurados sois cuando por mi causa os vituperen y os persigan, y digan toda clase de mal contra vosotros, mintiendo.

A mi me preocuparia que alguien que tiene mi respeto, en Cristo, dijese algo asi de mi, pero cuando quien lo dice son gentes contrarias a Cristo, en sus argumentos, es una honra. Eso me dice que voy bien.

San Mateo 5:12

Gozaos y alegraos, porque vuestro galardón es grande en los cielos; porque así persiguieron a los profetas que fueron antes de vosotros.

San Lucas 6:26

¡Ay de vosotros, cuando todos los hombres hablen bien de vosotros! porque así hacían sus padres con los falsos profetas.

Que Dios les bendiga a todos

Paz
 
Re: la salvación de los protestantes

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Mateo 5:11 Bienaventurados sois cuando por mi causa os vituperen y os persigan, y digan toda clase de mal contra vosotros, mintiendo.

A mi me preocuparia que alguien que tiene mi respeto, en Cristo, dijese algo asi de mi, pero cuando quien lo dice son gentes contrarias a Cristo, en sus argumentos, es una honra. Eso me dice que voy bien.

San Mateo 5:12

Gozaos y alegraos, porque vuestro galardón es grande en los cielos; porque así persiguieron a los profetas que fueron antes de vosotros.

San Lucas 6:26

¡Ay de vosotros, cuando todos los hombres hablen bien de vosotros! porque así hacían sus padres con los falsos profetas.

Que Dios les bendiga a todos

Paz
Supongo que estos versículos se refieren a los insultos que dedicais a los católicos en este foro. Totalmente de acuerdo.
 
Re: la salvación de los protestantes

Supongo que estos versículos se refieren a los insultos que dedicais a los católicos en este foro. Totalmente de acuerdo.

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Si me leyeses con atencion, te darias cuenta que yo no insulto a los catolicos, los amo. Solo denuncio a la ICAR y sus doctrinas de demonios.

Que Dios les bendiga a todos

Paz
 
Re: la salvación de los protestantes

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Si me leyeses con atencion, te darias cuenta que yo no insulto a los catolicos, los amo. Solo denuncio a la ICAR y sus doctrinas de demonios.

Que Dios les bendiga a todos

Paz
Tampoco yo insulto a nadie. Solamente constato que el estar seguros de ser salvos es una postura idéntica a la de los fariseos. Y que Dios prefiere al publicano que al fariseo.