Re: Benedicto XVI en Auschwitz: '¿Por qué, Señor, permaneciste callado?'
Y se sigue preguntando el Señor Ratzinguer: "Sólo se puede guardar silencio, un silencio que es un grito hacia a Dios: ¿Por qué, Señor, permaneciste callado?, ¿cómo pudiste tolerar todo esto?"
Y en algo tiene razón, el que callo y no clama a Dios cuando debio hacerlo, ahora solo, unica y exclusivamente, solo puede guardar silencio. Y eso precismente es lo que debiera hacer el señor Ratzinguer.
De verdad, me parece el colmo de la desfachatez...
¿De verdad esperaba oirlo? ¿Donde, Como? ¿Vestido con el traje de las juventudes nazis?
Le voy decir donde estaba el Señor, y donde se podia escuchar su Voz: En medio del sufrimiento, como siempre, como ahora
Le sugeriría, que leyerá un pequeño libro, de alguien que estuvo en Auswitchz, no de visita precisamente, como usted, y sin embargo si reconocio la Voz del Señor:
Viktor Frankl, El hombre en busca de sentido. Ed. Herder | Barcelona, 2004 | 158 páginas |
¿Tiene sentido el sufrimiento? ¿Podemos aprender de él, hacernos, a través de él, mejores? Dostoievski definió al hombre como «el ser que se acostumbra a todo». Incluso a los campos de exterminio. Víctor Frankl, psicólogo y neurofisiólogo, estuvo recluido en Auschwitz, y pudo salir con vida. En este libro memorable no nos ofrece su experiencia personal de la vida en el campo de concentración, sino un análisis de la vida humana en sus condiciones más inhumanas, a la luz de la psicología; en suma, una psicopatología de la vida en cautiverio. Pero no se trata sólo, ni acaso principalmente, de eso, sino de encontrar el sentido de la vida incluso allí donde parece imposible encontrarlo, en el más atroz sufrimiento. Lo que debe importarnos no es lo que podamos esperar de la vida, sino lo que ella espera de nosotros. Algo muy esencial de la condición humana palpita en este libro, al que el éxito ha hecho justicia. El hombre decide siempre lo que es. «Es el ser que inventó las cámaras de gas, pero también es el ser que entró en ellas con paso firme y musitando una oración».