Re: Progenitor A, progenitor B
España, adopción homosexual, ¡No callemos!
A fecha de hoy, soy español.
¿Que los homosexuales quieren "vivir su vida"? Yo no les puedo imponer nada, cada cual toma sus decisiones en libertad, El Señor nos ha dado libre albedrío, y responderemos un día de el, ellos y yo.
Desde luego, como cristiano, lo que no haré es decirle a lo "malo bueno, y a lo bueno malo", la homosexualidad es pecado, es abominable a los ojos de Dios, y
la Biblia es meridianamente clara al respecto, y no hay nada que podáis hacer para que los cristianos dejemos de advertirlo -ya hay países “progresistas” que han encarcelado a hermanos por no callar- si no habláramos dejaríamos de ser “sal de la tierra”, “luz del mundo”. Pero sobre todo no dejaremos de decir lo más importante, que en Jesús hay Camino, hay Salvación, que “esto antes éramos algunos”, que hay esperanza, que en Cristo, somos hechos “nuevas criaturas” que “las cosas viejas pasaron y todas son hechas nuevas”, que hay
“buenas noticias” para ti.
En mi país, se aprobó
una ley que permite el “matrimonio” homosexual. Muchos se quejaron del termino “matrimonio”, yo creo, que como cristianos, no estamos para defender la exactitud del lenguaje, para eso está la Real Academia de la Lengua, sino para dar defensa de nuestra fe, aun ardientemente.
Yo bien sé que eso no es un matrimonio ante los ojos de Dios, y que Él lo que mira es el corazón; ¿Qué vivimos en una sociedad enferma, corrupta, descreída? No me haré el sorprendido por ello, ya
me lo había advertido el Señor, mediante su Palabra, que los “últimos tiempos” serian “días malos”, “tiempos peligroso”, aun siervos de Dios habían hablado con claridad, hace décadas, de que
esto acontecería.
Ahora, vemos que van a permitir que los homosexuales se hagan cargo del cuidado y la educación de niños, van a consentir que los adopten. Han adaptado el registro civil, y los padres, serán conocidos legalmente, como “
progenitor a y progenitor b”…
Ya no se trata del “libre albedrío” de adultos, se trata de lo más preciado de la sociedad, lo más valioso, lo más débil, lo que nos ha sido encomendado, aquellos de los que nuestro Maestro y Señor decía: “dejad que los niños se acerquen a mi, y no se lo impidáis, pues de los tales es el Reino de los Cielos”.
¡¡NO CALLEMOS!!, no lo consintamos, gritemos, gimamos, lloremos, clamemos al Señor, roguemos a la gente, aun humillados y con lagrimas en los ojos, que no lo hagan, digámosles que es lo más amado por el Señor, que nosotros nos haremos cargo, lo que quieran, al precio que sea…
Aprendamos del Apóstol Pablo, que pedía, no con soberbia, y dureza, sino con lagrimas en los ojos, los “lobos rapaces” ya están aquí, ¿dónde nuestras lagrimas?
“Porque yo sé que después de mi partida entrarán en medio de vosotros lobos rapaces, que no perdonarán al rebaño. Y de vosotros mismos se levantarán hombres que hablen cosas perversas para arrastrar tras sí a los discípulos. Por tanto, velad, acordándoos que por tres años, de noche y de día, no he cesado de amonestar con lágrimas a cada uno.” Hechos 20:29-31
Seamos como Lot, que en Sodoma, a la multitud perversa (la misma) les decía: “
Os ruego, hermanos míos, que no hagáis tal maldad.”.
¿Qué seria de nosotros si calláramos?