Fundamentalismos

20 Febrero 2006
28
0
Fundamentalismos
En el seno del protestantismo una de las manifestaciones de esta actitud fundamentalista es que la proclamación del Evangelio se reduce a una adoración-sacralización del texto bíblico. También reduce el concepto Evangelio a una salvación espiritual y no a una dinámica; y la noción teológica paulina se entiende desde esa perspectiva que la inspiración del texto bíblico es directa y plena lo que conduce a una peligrosa literalidad poco respetuosa del mensaje, de la propia comprensión que los autores de los libros de la Biblia nos muestran de lo que estaban haciendo., aparecen numerosas contradicciones.
Las inquietudes que mueven esta deformación son acertadas y responden en muchas ocasiones a una angustia, a una incertidumbre propia de tiempos de crisis, aunque la respuesta a la que se llega es errónea.
Es una fidelidad de la letra y no del Espíritu que cae en una especie de terrorismo espiritual , que transforma a Dios en un tirano.
Esta malformación responde a otra forma de sacralización, no del texto, sino de quien lo lee.
En el seno del protestantismo esto ha dado lugar a cultos en exceso espiritualistas, donde el testimonio de las personas que han tenido una experiencia de cambio en su vida, tiene más lugar en la celebración – incluso un lugar más importante- que la celebración de la Palabra, e incluso que su lectura.
Se termina utilizando el texto bíblico como plataforma para “contarse” y se cae en un narcisismo espiritual que no se corresponde con una visión de la complejidad del ser humano.
Esta actitud que sublima la religiosidad tiene su paralelo en una religiosidad popular desvirtuada, excesivamente volcada en los cultos a las devociones marianas o lugares determinados como Lourdes, Fátima o el Roció.
Además de esta situación en las relaciones eclesiales, en los propios documentos se viene acostumbrando a citar los textos bíblicos que saca de contexto los mismos.
Los desafíos o retos que el Evangelio plantea a las formas de iglesia y sus tradiciones se ven relativzados, comprometiendo, así, lo que se quiere facilitar, es decir el camino de la unidad hipotecado el texto bíblico.
 
Re: Fundamentalismos

jose gallego dijo:
Fundamentalismos
En el seno del protestantismo una de las manifestaciones de esta actitud fundamentalista es que la proclamación del Evangelio se reduce a una adoración-sacralización del texto bíblico. También reduce el concepto Evangelio a una salvación espiritual y no a una dinámica; y la noción teológica paulina se entiende desde esa perspectiva que la inspiración del texto bíblico es directa y plena lo que conduce a una peligrosa literalidad poco respetuosa del mensaje, de la propia comprensión que los autores de los libros de la Biblia nos muestran de lo que estaban haciendo., aparecen numerosas contradicciones.
Las inquietudes que mueven esta deformación son acertadas y responden en muchas ocasiones a una angustia, a una incertidumbre propia de tiempos de crisis, aunque la respuesta a la que se llega es errónea.
Es una fidelidad de la letra y no del Espíritu que cae en una especie de terrorismo espiritual , que transforma a Dios en un tirano.
Esta malformación responde a otra forma de sacralización, no del texto, sino de quien lo lee.
En el seno del protestantismo esto ha dado lugar a cultos en exceso espiritualistas, donde el testimonio de las personas que han tenido una experiencia de cambio en su vida, tiene más lugar en la celebración – incluso un lugar más importante- que la celebración de la Palabra, e incluso que su lectura.
Se termina utilizando el texto bíblico como plataforma para “contarse” y se cae en un narcisismo espiritual que no se corresponde con una visión de la complejidad del ser humano.
Esta actitud que sublima la religiosidad tiene su paralelo en una religiosidad popular desvirtuada, excesivamente volcada en los cultos a las devociones marianas o lugares determinados como Lourdes, Fátima o el Roció.
Además de esta situación en las relaciones eclesiales, en los propios documentos se viene acostumbrando a citar los textos bíblicos que saca de contexto los mismos.
Los desafíos o retos que el Evangelio plantea a las formas de iglesia y sus tradiciones se ven relativzados, comprometiendo, así, lo que se quiere facilitar, es decir el camino de la unidad hipotecado el texto bíblico.

Dinos jose gallego.
¿Todo eso te lo has inventado tu o lo has copiado de alguien?
¿De quien?
 
Re: Fundamentalismos

jose gallego dijo:
Fundamentalismos
En el seno del protestantismo una de las manifestaciones de esta actitud fundamentalista es que la proclamación del Evangelio se reduce a una adoración-sacralización del texto bíblico. También reduce el concepto Evangelio a una salvación espiritual y no a una dinámica; y la noción teológica paulina se entiende desde esa perspectiva que la inspiración del texto bíblico es directa y plena lo que conduce a una peligrosa literalidad poco respetuosa del mensaje, de la propia comprensión que los autores de los libros de la Biblia nos muestran de lo que estaban haciendo., aparecen numerosas contradicciones.
Las inquietudes que mueven esta deformación son acertadas y responden en muchas ocasiones a una angustia, a una incertidumbre propia de tiempos de crisis, aunque la respuesta a la que se llega es errónea.
Es una fidelidad de la letra y no del Espíritu que cae en una especie de terrorismo espiritual , que transforma a Dios en un tirano.
Esta malformación responde a otra forma de sacralización, no del texto, sino de quien lo lee.
En el seno del protestantismo esto ha dado lugar a cultos en exceso espiritualistas, donde el testimonio de las personas que han tenido una experiencia de cambio en su vida, tiene más lugar en la celebración – incluso un lugar más importante- que la celebración de la Palabra, e incluso que su lectura.
Se termina utilizando el texto bíblico como plataforma para “contarse” y se cae en un narcisismo espiritual que no se corresponde con una visión de la complejidad del ser humano.
Esta actitud que sublima la religiosidad tiene su paralelo en una religiosidad popular desvirtuada, excesivamente volcada en los cultos a las devociones marianas o lugares determinados como Lourdes, Fátima o el Roció.
Además de esta situación en las relaciones eclesiales, en los propios documentos se viene acostumbrando a citar los textos bíblicos que saca de contexto los mismos.
Los desafíos o retos que el Evangelio plantea a las formas de iglesia y sus tradiciones se ven relativzados, comprometiendo, así, lo que se quiere facilitar, es decir el camino de la unidad hipotecado el texto bíblico.
Bueno, osea, Mnnn, déjame decirte...este...!Realmente no entendí nada! ¿podrías explicarlo en español latinoamericano?. Porque lo que entendí es lo último y si es lo que entendí, entonces debes poner este aporte en el tema de ecumenismo. cito: "Los desafíos o retos que el Evangelio plantea a las formas de iglesia y sus tradiciones se ven relativzados, comprometiendo, así, lo que se quiere facilitar, es decir el camino de la unidad hipotecado el texto bíblico". !Ves como no entendí nada!.

Greivin.
 
Re: Fundamentalismos

jose gallego dijo:
Me lo comento un amigo que lleva mucho tiempo en la iglesia evangélica
Ahhh! De oidas!!! Con razón no entendí nada.!!!!

Greivin.
 
Re: Fundamentalismos

jose gallego dijo:
Me lo comento un amigo que lleva mucho tiempo en la iglesia evangélica

aja... asi nos llamamos a nosotros mismos, protestantimo. :Twitch_an
 
Entiendes mejor esto

Entiendes mejor esto

Greivin. dijo:
Bueno, osea, Mnnn, déjame decirte...este...!Realmente no entendí nada! ¿podrías explicarlo en español latinoamericano?. Porque lo que entendí es lo último y si es lo que entendí, entonces debes poner este aporte en el tema de ecumenismo. cito: "Los desafíos o retos que el Evangelio plantea a las formas de iglesia y sus tradiciones se ven relativzados, comprometiendo, así, lo que se quiere facilitar, es decir el camino de la unidad hipotecado el texto bíblico". !Ves como no entendí nada!.

Greivin.
El misterio es ante todo realidad vital –verdad y vida- que supera todo intento conceptual: el misterio constituye nuestro ambiente existencial en toda su integridad. Lo que pensamos, lo que sentimos, lo que vivimos está impregnado de misterio es incomprensible, inefable, e innegable. Negar el misterio o prescindir de él es pecar contra la razón debilitándola y aún reformándola. Realmente, sin el misterio, nuestra existencia queda desenraizada de la verdadera y vital realidad y convertida en ideología idolátrica. Percibimos el misterio cuando somos sorprendidos por él, cuando experimentamos que él es el aire que nos anima y la luz que nos ilumina. ¿Se puede vivir auténticamente la vida sin vivenciar su relación radical con el misterio?
El misterio es fundamental es Dios y su plena revelación en Cristo. Dios se hace hombre para comunicarnos su vida diaria. La revelación es convivencia y comunión con Dios con los hombres participando en Cristo de nuestra condición humana.
El misterio de la encarnación no es una conceptualización ideológica, es la vida de Jesús de Nazaret, Dios realmente encarnado que vive entre los hombres como uno de tantos, y comunica su vida divina encarnada a los que le aceptan y le siguen en unión de fe en Él. La definición del hombre se realiza en la cristificación. Cristo es el misterio de Dios. La vida del misterio es la mística cristificadora. La mística auténtica es vida de fe, esperanza y caridad, no de emociones devotas.
San Juan de la Cruz lo dice con rotunda sencillez de su sabiduría espiritual: “humilde es el que se esconde en su propia nada y sabe dejar a Dios”. Inclinado a lo espectacular e impresionante, echamos de menos que el Evangelio no nos hable más. De está actitud nacieron los evangelios apócrifos, tanto menos evangélicos cuanto más cosas dicen y más ostentosamente lo describen
 
Re: Entiendes mejor esto

Re: Entiendes mejor esto

jose gallego dijo:
El misterio es ante todo realidad vital –verdad y vida- que supera todo intento conceptual: el misterio constituye nuestro ambiente existencial en toda su integridad. Lo que pensamos, lo que sentimos, lo que vivimos está impregnado de misterio es incomprensible, inefable, e innegable. Negar el misterio o prescindir de él es pecar contra la razón debilitándola y aún reformándola. Realmente, sin el misterio, nuestra existencia queda desenraizada de la verdadera y vital realidad y convertida en ideología idolátrica. Percibimos el misterio cuando somos sorprendidos por él, cuando experimentamos que él es el aire que nos anima y la luz que nos ilumina. ¿Se puede vivir auténticamente la vida sin vivenciar su relación radical con el misterio?
El misterio es fundamental es Dios y su plena revelación en Cristo. Dios se hace hombre para comunicarnos su vida diaria. La revelación es convivencia y comunión con Dios con los hombres participando en Cristo de nuestra condición humana.
El misterio de la encarnación no es una conceptualización ideológica, es la vida de Jesús de Nazaret, Dios realmente encarnado que vive entre los hombres como uno de tantos, y comunica su vida divina encarnada a los que le aceptan y le siguen en unión de fe en Él. La definición del hombre se realiza en la cristificación. Cristo es el misterio de Dios. La vida del misterio es la mística cristificadora. La mística auténtica es vida de fe, esperanza y caridad, no de emociones devotas.
San Juan de la Cruz lo dice con rotunda sencillez de su sabiduría espiritual: “humilde es el que se esconde en su propia nada y sabe dejar a Dios”. Inclinado a lo espectacular e impresionante, echamos de menos que el Evangelio no nos hable más. De está actitud nacieron los evangelios apócrifos, tanto menos evangélicos cuanto más cosas dicen y más ostentosamente lo describen

"Sin embargo, hablamos sabiduría entre los que han alcanzado madurez; y sabiduría, no de este siglo, ni de los príncipes de este siglo, que perecen.
Mas hablamos sabiduría de Dios en misterio, la sabiduría oculta, la cual Dios predestinó antes de los siglos para nuestra gloria,
la que ninguno de los príncipes de este siglo conoció; porque si la hubieran conocido, nunca habrían crucificado al Señor de gloria.
Antes bien, como está escrito: Cosas que ojo no vio, ni oído oyó, Ni han subido en corazón de hombre, Son las que Dios ha preparado para los que le aman.
Pero Dios nos las reveló a nosotros por el Espíritu; porque el Espíritu todo lo escudriña, aun lo profundo de Dios.
Porque ¿quién de los hombres sabe las cosas del hombre, sino el espíritu del hombre que está en él? Así tampoco nadie conoció las cosas de Dios, sino el Espíritu de Dios.
Y nosotros no hemos recibido el espíritu del mundo, sino el Espíritu que proviene de Dios, para que sepamos lo que Dios nos ha concedido, lo cual también hablamos, no con palabras enseñadas por sabiduría humana, sino con las que enseña el Espíritu, acomodando lo espiritual a lo espiritual.
Pero el hombre natural no percibe las cosas que son del Espíritu de Dios, porque para él son locura, y no las puede entender, porque se han de discernir espiritualmente.
En cambio el espiritual juzga todas las cosas; pero él no es juzgado de nadie.
Porque ¿quién conoció la mente del Señor? ¿Quién le instruirá? Mas nosotros tenemos la mente de Cristo."
1 Corintios 2:6-16.

Greivin.
 
Re: Fundamentalismos

Para entender la manera en que evolucionó el término 'fundamentalista' en la jerga religiosa y como tuvo sus orígenes en las publicaciones de los hermanos Lyman y Milton Stewart en 1915 (evangélicos) les recomiendo leer el artículo que he posteado en :
http://forocristiano.iglesia.net/showthread.php?t=21209

acá una probadita:

...", el término "evangélico" no es sinónimo de "fundamentalismo". Estos términos tienen diferentes historias y diferentes connotaciones. El "Fundamentalismo", que hoy es usado como una horrible palabra, tuvo un origen muy respetable. Se originó en una serie de doce folletos titulados en Inglés: The Fundamentals , los cuales fueron distribuidos gratuitamente por millones durante los años 1909 y 1915 por Lyman y Milton Stewart. Cada folleto contenía varios artículos de diferentes autores. "Los Fundamentales" contenían las básicas doctrinas del cristianismo tales como la autoridad de las Escrituras, la divinidad, encarnación, concepción virginal, muerte expiatoria, resurrección corporal y regreso personal de Jesucristo, la divinidad del Espíritu Santo, el pecado, la salvación personal y el juicio eterno, la adoración, la evangelización y la obra misionera en todo el mundo.
El término "fundamentalismo" fue acuñado por quienes habían asumido las orientaciones del naciente modernismo teológico, que, con una aproximación racionalista y filosófica a la fe cristiana, negaba precisamente las doctrinas defendidas en los folletos. De modo que "fundamentalista" vino a ser todo aquel que defendiera las verdades centrales de la fe cristiana basado sobre todo en la enseñanza de la Biblia. Es comprensible, entonces, que en sus orígenes, el término llegara a ser sinónimo de "evangélico", y como muchos de sus autores pertenecían al movimiento del evangelio social, se identificó más concretamente con el "evangelicalismo". Sin embargo, paulatinamente, el fundamentalismo fue identificado, en la óptica popular, con ciertas extravagancias doctrinales, lo que provocó que en 1950 un grupo de líderes evangélicos norteamericanos, encabezados por el evangelista Billy Graham, promovieran lo que ellos llamaron "El Nuevo Evangelicalismo" a fin de distinguirse del "fundamentalismo" que ellos rechazaban. " ...
 
Re: Fundamentalismos

jose gallego dijo:
Me lo comento un amigo que lleva mucho tiempo en la iglesia evangélica

Interesante, pues deberías informarte mejor y asistir a una iglesia evangélica un tiempo para comprobar si tus juicios son correctos.
 
Re: Fundamentalismos

igorcb dijo:
Interesante, pues deberías informarte mejor y asistir a una iglesia evangélica un tiempo para comprobar si tus juicios son correctos.
He asistido y he visto como el Espíritu santo hablaba al pastor y le informaba de las parejas que tenían posibilidades de salir adelante o no, también he visto como con la ayuda del espíritu santo se metian en la vida personal y intima de las parejas y de los matrimonios, pareciendose todo esto a una religión exoterica. tambien he visto como personas rodaban por el suelo y el pastor explicaba que se debia a la presencia del Espíritu santo, pero luego investigabas a fondo y el que se caia al suelo te decía que sufría ataques epilepticos. Creo que ya he visto demasiado
 
Re: Fundamentalismos

jose gallego dijo:
He asistido y he visto como el Espíritu santo hablaba al pastor y le informaba de las parejas que tenían posibilidades de salir adelante o no, también he visto como con la ayuda del espíritu santo se metian en la vida personal y intima de las parejas y de los matrimonios, pareciendose todo esto a una religión exoterica. tambien he visto como personas rodaban por el suelo y el pastor explicaba que se debia a la presencia del Espíritu santo, pero luego investigabas a fondo y el que se caia al suelo te decía que sufría ataques epilepticos. Creo que ya he visto demasiado
Que pena me da que te haya pasado eso, espero en todo caso que encuentres a Cristo, lo que pienses o dejes de pensar de los evangélicos carece de importancia, por muy equivocado que esté
 
Re: Fundamentalismos

jose gallego dijo:
A estas alturas no me considero católico ni evangélico fundamentalmente me considero cristiano.
El término "cristiano" también es sinónimo de "fanatismo" últimamente.

Greivin.
 
Re: Fundamentalismos

La teología de la prosperidad

“Tres cosas hay en la vida: salud dinero y amor; y el que tenga estas tres cosas que le de gracias a Dios”. Así se cantaba hace ya bastantes años, por la España de la posguerra. Hoy diríamos que el autor de la canción cayó en un cierto romanticismo y que podía haber simplificado las cosas, ir más a lo práctico. Reflejaría mucho la mentalidad actual: “Tres cosas hay en la vida: dinero, mucho dinero, muchísimo dinero; y el que tenga las tres cosas que le pida más a Dios”. Lo de pedírselo a Dios no es porque la España de hoy sea tan católica como hace cincuenta años, pero nunca esta de más, sobre todo si se trata de una cosa seria, como los funerales o los bombos de la Primitiva, recurrir a las más altas influencias.
No se niega claro está, que el amor y la salud sean importantes, pero teniendo dinero todo se puede arreglar. Es verdad que la mariscada en un restaurante de cinco estrellas de 200 euros, puede fastidiar el estómago, pero para eso están los mejores médicos en unas confortables clínicas privadas. Ya se arreglara.. Y si no, ¡a los Estados Unidos! con dinero hay solución para todo.
Esa tendencia a buscar la felicidad en la posesión de la riqueza se eleva a la categoría de dogma. Pero a diferencia de otras épocas, en las cuales la propia acumulación de riqueza era lo fundamental, hoy se la desea para consumirla inmediatamente en los mil objetos que nos van a hacer felices.
La técnica de hacer desear se ha convertido en una especialidad cuidadísima. El hombre , la mujer, y hasta el niño, son examinados minuciosamente como sujetos de deseos.
Esta fe en el dinero como suprema fuente de felicidad se ha impuesto sobre cualquier otro tipo de creencias. Concretamente sobre creencias que a lo largo de los siglos han afectado a hombres y mujeres en sus niveles más profundos, las creencias religiosas, Gran número de personas han sustituido pura y simplemente una fe por otra.
Otros intentan hacer coexistir las dos creencias a base de encerrarlas en mundos aislados e independientes. Uno de esos mundos se reduce al templo al que se van a cumplir los preceptos religiosos. En él resuenan una y otra vez las palabras del Evangelio: “Bienaventurados los pobres…Ay de vosotros los ricos!... No podéis servir a Dios y a las riquezas… “Resuenan hasta que su eco acaba perdiéndose entre las oscuras bóvedas y las luminosas vidrieras. Cuando se traspasan las puertas de salida la bienaventuranza vuelve a estar en tomarse unas gambas a la plancha luciendo un modelito exclusivo, subirse a un coche de lujo, e irse a comer a un restaurante de cinco estrellas.
Pero aún hay una postura más peregrina. No se pierde la fe en una trascendencia y en un poder superior, ni se los aísla de las aspiraciones económicas de cada uno; se hace otra cosa: se subordina el mundo de lo religioso a las aspiraciones económicas. Se efectúa una relectura de los textos básicos de la religión, eliminando todo lo que va en contra de la fe en el dinero, y se deja convertido a Dios, incluso al Dios cristiano, en un poder mágico que ayuda a los hombres en lo que verdaderamente les importa: su riqueza.
No se puede llegar a más. El dinero no sólo hace felices a los hombres, sino al mismo Dios.
 
Re: Fundamentalismos

jose gallego dijo:
EL TERMINO EVANGÉLICO ALGUNAS VECES ES SINONIMO DE ¡¡¡FANATISMO!!!
Si de prejuicios hablamos, pues el termino Gallego en Argentina no es sinonimo de algo muy alagador :)