Señor Tobi:
Le agradezco su contestación, pero de su discurso hay muchas cosas que no encajan. Usted dice que es mentira que el Gobierno catalán no desee imponer el catalán en los patios de colegio.
Aquí y
aquí puede comprobar que no miento en cuanto a lo de la persecución al castellano en el patio (¡no ya en las aulas!) se refiere. Por otro lado, no me parece que todos los catalanes se sientan y piensen como usted dice que todos los catalanes se sienten y piensan. Tome esto como botón de muestra de lo que considero es el sentir de buena parte de los catalanes:
Noviembre 25, 2005
Llamada a la cordura por parte de un catalán harto de todo
Este es un artículo sobre nacionalismos e idiomas. No tiene ninguna relación con el software. Por ello lo he ocultado de portada y podéis ignorarlo con todas las de la ley. Es muy largo, tardaréis unos 15 minutos en acabar de leerlo. Vosotros mismos
Antes de nada, y porque os conozco: si lo enviáis por mail, por favor, poned un enlace a esta página y/o firmadlo con mi nombre, y no lo enviéis a diez mil contactos, porque les tocaréis los cojones a diez mil personas. Un poco de sentido común.
Nota: Cualquier comentario ofensivo o demasiado subido de tono será borrado ipso-facto y, de ser demasiado insultante, bloquearé al autor
Me llegó por mail el siguiente texto supuestamente del diario Metro, firmado por Judit Pujadó, del día 20 de julio. He buscado en la hemeroteca de dicho periódico, pero está petada y no he podido confirmar la fuente. El texto dice así:
"A aquestes alçades una, que utilitza habitualment la llengua catalana per expressar-se, està una mica cansada que uns li mengin l’orella esquerra i d’altres la dreta amb visions futuristes sobre el català. Com a visions futuristes són més properes als pronòstics d’una vident de pa sucat amb oli que de l’anàlisi seriosa. Segons uns, aquesta llengua agonitza indefectiblement, connectada amb tots els tubs possibles i ingressada a l’UCI sense remei. Esperen pacientment la mort de la darrera persona que la parli per fer-li la foto i guardar-la als arxius, com es guarda la imatge d’Antonio Udina Burbur, el darrer parlant de dàlmata que va morir el 10 de juny de 1988. Segons d’altres, la llengua té tan bona salut i els governants li donen tant de pinso que quatre nens empordanesos de P3, que encara no parlen castellà, fan perillar el futur de la llengua germana, retirada, emmordassada i condemnada a la clandestinitat i a la mort per inanició.
Sincerament: entre els que fan aquests pronòstics i la realitat, hi ha una distància de vertigen. Ni la llengua es mor ni constitueix una amenaça. Si la deixessin tranquil·la, si no li carreguessin les espatlles amb un pes que no li pertoca portar, seria el que són totes les llengües, una eina d’expressió, una manera d’entendre’ns, la regla i el compàs d’escriptors i poetes que la fan servir perquè l’han mamat. Aquí, quan un comença a lligar paraules i adjectivar els substantius, el primer que ha de fer és triar. Verbalitzarà en català o en castellà? Sigui quina sigui l’opció triada, la decisió comporta tota una sèrie de plantejaments ideològics, socials i polítics que no haurien d’existir. Si hi ha algun compromís, que hi sigui pel contingut del discurs, no pel mitjà en què aquest s’expressi.
Es pot escriure en català, o en anglès o en castellà, sense haver de tenir una filiació concreta ja dictada. L’eina en sí és tan bona com qualsevol altra. La pot utilitzar qui és d’esquerres o de dretes, el republicà i el monàrquic, l’anarquista, el catòlic, l’ateu, l’independentista, el centralista i el federalista. Tant és. Un bon escriptor la pot fer volar molt alt, un d’inepte la rebregarà per terra. Serveix per a tothom, i el nivell de les novel·les o dels poemes que s’escriquin en català no depèn de la llengua en sí, sinó de qui la té entre les mans. Només espero el dia en què deixi de ser una arma carregada de verí polític, una amenaça per fer-li xantatge constant al país. Qui la utilitza amb aquestes finalitats és perquè en el fons, la llengua catalana li importa un rave. Ja sé que tot això són obvietats. Però ja deia algú que el més avorrit d’aquests temps és que s’han de repetir constantment, justament, les obvietats."
No voy a traducirlo, podéis hacerlo desde internostrum. Básicamente viene a decir que ya basta de usar el catalán como arma política, que no se muere.
Estoy hasta la polla de e-mails reivindicativos en que se me llama al boicot de catalanes y españoles, y este parecía tener algo de miga, además de haber generado un gran flame entre mis amigos. Os pego la contestación que he enviado. Se explica por sí misma
Llamada a la cordura
He escrito este artículo, en primer lugar, por vergüenza ajena. Y en segundo lugar porque quiero expresar que no todos los catalanes somos independentistas ni nacionalistas, pero todos somos personas y merecemos igual respeto
Respecto al artículo original, me parece que es una opinión válida pero parece más una pataleta que otra cosa. También me vais a permitir que hable de "los catalanes" en tercera persona para dar imparcialidad al asunto, aunque me considero catalán como el que más y he nacido en Barcelona capital.
Me ha llevado como una hora escribir esto. Vosotros igual tardaréis diez minutos en leerlo. No os culparé si pasáis del tema, pero no contestéis sin haberlo leído por completo.
Que empiezo:
** Hechos irrefrutables **
1- El catalán está de capa caída
2- Los políticos usan el catalán como arma política
3- Los catalanes y el resto de españoles se odian mutuamente
El catalán se muere. Pues sí. Cada vez es menos usado, aunque personalmente creo que no es tan alarmante como nos quieren hacer creer.
Que los políticos usan el catalán para darse ventaja no es nada nuevo. Pero si usan los muertos (tanto los del YAK-42 como los del 11-M), ¡cómo no van a usar un idioma! ¡faltaría más! Esto es triste, pero van a seguir haciéndolo y no hay vuelta de hoja. Si fuéramos tan civilizados como los ingleses con el 7-J no pasarían cosas como ésta, pero cada país tiene los dirigentes que quiere y merece. Aceptadlo: la mitad del país vota al PSOE y la otra mitad al PP, y tú no eres mejor que tu vecino, que vota a los otros. Cuando pasa algo gordo, la balanza se desequilibra y se ganan unas elecciones con más o menos ventaja.
De pequeñito me miraban mal en el colegio[1] porque escribía en castellano mejor que en catalán. Ahora me miran mal los catalanes porque tengo un blog y escribo en castellano. Qué se le va a hacer.
¿Por ser catalán tengo que defender el catalán? Pues no. Siguiendo ese razonamiento, todos los usuarios de ordenadores deberían defender el software libre, porque es lo mejor para la humanidad y para la cultura. Me agobia que me digan lo que tengo que hacer. Si quiero defender el catalán, lo haré, y si no me apetece no lo haré. Cada uno escoge sus objetivos en la vida y sus preocupaciones, y yo no voy diciendo a nadie que si no defiende el software libre es un "traidor" o un "facha".
No se puede criticar a alguien por no compartir tus mismas metas. Un tío de Unicef no puede criticar a uno del PETA por defender animales en lugar de personas. Un tío del PETA no puede criticar a un linguista por defender idiomas en lugar de seres vivos. La cuestión es colaborar con algo; no se puede estar en todos sitios. Cada uno hace lo que puede, y si alguien tiene huevos de negarlo, que primero vaya al banco, coja todo su dinero y se vaya a África con pan y leche; lo dé a los niños que se mueren de hambre y luego vuelva sin nada. Eso sí es una necesidad primaria. Este ejemplo os lo pongo para que veáis que todo el mundo tiene sus prioridades que no tienen por que coincidir con las de los demás.
Luego va el capullín de Joan Laporta y saca una bandera que no existe y que dice "Països catalans". ¿¿Cómor?? ¿Alguien ha preguntado a los valencianos o mallorquines si quieren ser "catalanes"? ¿Qué pasa, que los catalanes no pueden ser españoles pero los valencianos sí deben ser catalanes? Un idioma no es delimitador de fronteras políticas. Por cierto, me sentí bastante defraudado cuando descubrí que "la corona catalana" de la Edad Media es un invento de los libros de texto catalanes. Sólo para vuestra información, en ninguna enciclopedia aparece denominada así. Se llamaba "corona aragonesa" porque se unieron el rey de Aragón con el conde de Barcelona.
Tiene muchísimos cojones que los catalanes no se consideren españoles, argumentando que los españoles eran invasores. Sin embargo, Mallorca forma parte de los "països catalans" y quien cree lo contrario es un facha. ¡Pero si fue un catalán quien invadió Mallorca allí por el 1200!. Ahiválahostia.
En la escuela me enseñaron que los andaluces eran unos vagos y que los madrileños eran unos hijos de puta porque no les caemos bien. Y los catalanes somos unos pobrecitos mártires oprimidos. Por suerte, esto no es así. Durante la historia, los territorios cambian y unos países invaden a otros. Antes que "Catalunya", por aquí estuvieron los romanos y los árabes. ¿Y alguien de los aquí presentes odia a los romanos? No. Y mira que nos impusieron el latín y eran unos tiranos de dos pares de cojones, pero mira, ya nadie se acuerda.
Por cierto, la mayoría de idiomas del mundo, exceptuando el castellano, el chino y otros pocos también están condenados a desaparecer en un futuro a medio plazo a causa de la supremacía del inglés. Y nadie invadió sus países de origen en 1714.
Cuando sales de Catalunya, a la gente le caes mal de entrada por ser catalán, lo reconozco, pero eso no nos da derecho a tratar mal a quienes vienen aquí. La excusa "yo rallo el coche de los madrileños porque ellos le hicieron lo mismo al tío de un amigo de un primo mío" no es válida. Según esa regla de tres, los austríacos deberían invadir Alemania y los judíos deberían gasear a 6 millones de alemanes; los suramericanos deberían invadir media Europa y matar a los allí residentes e Hiroshima y Nagasaki deberían lanzar sendos petardazos nucleares en Los Angeles y California. ¿Esto iba a solucionar algo? Yo creo que empeoraría la situación.
El odio se soluciona dejando de odiar. Y no me vale el "que empiecen ellos primero", porque es el cuento de nunca acabar, y aquí tampoco hay vuelta de hoja. Todo lo demás son pataletas de gente a la que, de verdad, le importa bien poco el problema, porque no hace nada para solucionarlo.
Si vas a Madrid, pides "pan con tomate" en un bar y te envían a la mierda, te vas a otro bar. No te vuelves a Barcelona victimizado y conspirando en contra de tres millones de madrileños por culpa de un hijo de puta borde. Si vienes a Barcelona y en una tienda te dicen "a mí parli'm en caralà" te vas a la tienda de al lado, no vuelves a Madrid cagándote en la madre que parió a los putos polacos de mierda.
Acabando ya con el catalán, el principal motivo de esta discusión, diré que no por ser catalán hay que defenderlo a rajatabla e imponerlo. Me parece bien que se obligue a estudiar catalán. Me parece bien que se obligue a estudiar castellano. Me parece bien que se permitan hablar ambos, y me parece bien que un amigo me hable en catalán y yo le conteste en castellano, pero yo conteste a otro en catalán y aquél hable en castellano con un tercero. ¿Por qué? ¡Qué más da!
Cada uno tiene unos ideales. No soy anti-nacionalista, anti-centralista ni anti-ideologías. Soy anti-superioridades. Todo el mundo tiene derecho a pensar lo que quiera, mientras no crea que por ello es superior. Los catalanes se creen superiores a los extremeños y les llaman "españa profunda" de forma despectiva, cuando posiblemente sus abuelos fueran esa misma "españa profunda" o "catalunya profunda". Los extremeños llaman "polacos" a los catalanes, supongo que por ser independentistas.
Los nacionalistas y centralistas que defienden su patria molan. Los nacionalistas y centralistas que imponen su patria apestan. El nacionalismo no es malo, es el sentimiento de "hogar" que todos llevamos dentro.
El otro día iba con un colega por la calle y nos encontramos con dos casi-skins. Llevaban una bandera de los Almogàvers en su Alpha Industries y hablaban en catalán, nos preguntaron por cierto sitio y se largaron. Cuando se fueron, le dije a mi amigo «si en lugar de una bandera catalana hubieran llevado una bandera española, seguro que les habrías llamado fachas». Y me reconoció que sí. Bueno, no en su cara, porque nos hubieran apalizado, pero sí en la intimidad. Pues no, señores, un hijo de puta lo es siempre, haya nacido en Castellfollit del Vallès o en Leganés o en Sevastopol.
Por favor, política, deja de decirme quién es el bueno y quién es el malo. Deja de decirme qué tengo que defender. Deja de decirme cómo me he de comunicar. Deja de estereotiparme al resto de la gente. Deja de imponerme unos odios infundados hacia gente que no conozco. Incentiva el "visca Catalunya" en lugar del "puta Espanya".
Uno es del país que pone en su DNI. Uno lleva en su corazón la nación que le da la gana, pero por mucho que yo lleve en mi corazón a Bostwana no me van a dar el DNI Bostwanés. Y puedo aceptar y respeto que muchos catalanes quieran ser independientes, pero hasta que llegue el día en que Catalunya se separe de España, seguirán siendo españoles. Aunque no les guste. ¡Las personas tenemos dos piernas aunque no nos guste! ¡Los tíos tenemos polla y las tías tienen coño, aunque no les guste! Hay que saber diferenciar entre realidad y sentimiento.
Quizá os parece un texto anti-catalanista, pero no lo es, o como mínimo no ha sido mi intención.Estoy orgullosísimo de ser catalán, es una región próspera y la gente es muy amable, el clima es bueno y los políticos no son más tontos que en el resto de España, lo que pasa es que hay unos pocos que hacen mucho ruido de cara a la galería. Me cago en ciertas conductas catalanas porque vivo aquí y las veo. Si viviera fuera podría cagarme en ciertas conductas españolas, totalmente iguales a éstas pero con nombres diferentes.
Conclusión: Nadie debe odiar a los demás sólo por su lugar de nacimiento o ideales políticos. En este país hay una falta de respeto alarmante por ambos bandos. Y la única solución es empezar a respetarse, aquí y ahora, por parte de todos.
Y visca Catalunya, que está dentro de España, que está dentro de la Tierra, donde viven personas. Mucha gente se olvida de que detrás de todo hay personas. Las ideas deben servir a las personas, no al revés.
Como sugerencia, los que habéis estudiado en Catalunya, contrastad un poco las fuentes históricas que nos enseñaron. Los libros están manipulados de tal manera que da asco. Y os lo dice una persona que hasta los 10 años odiaba a los andaluces por un motivo que todavía no he entendido.
Fin
Nota 1: He estudiado en un colegio de curas y catalanista, aunque no lo parezca
Fuente