¿Líderes en las iglesias?

28 Febrero 1999
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Jesús es nuestro Lìder_____________________________________________________________

Valga sólo para la brevedad de un título las cuatro palabras que expresan la confesión más correctamente definida como:
El Señor Jesucristo es nuestro único Caudillo.
El acostumbramiento visual y auditivo a los textos bíblicos no pocas veces ha mantenido sobre ellos un velo que no nos permite percibir el significado real de lo que nos parece que tan bien conocemos. Si bien en muchos casos la diferencia apenas pasa de una variante curiosamente interesante - pero sin afectar mayormente nuestra fe y práctica cristiana -, en otras puede revestir una importancia cuya percepción nos resulta tan sorprendente como trascendente.
Es así que de la porción de Mateo 23: 8-10, a lo sumo se retiene la lección de que no debemos hacer lo de los católicos romanos que llaman de “Padre” al cura o sacerdote de su religión (v.9). Pero no pasa de ahí nuestro afán controversial. Poco imaginaríamos que una más atenta consideración del pasaje llevaría a una sana autocrítica a cuantos se precian de cristianos evangélicos, por más bíblicos o fundamentalistas que profesen ser.
El conocimiento bíblico de que los maestros hayan sido dados como dones de Cristo a su iglesia (Ef.4:11) y que Pablo se presente como padre espiritual de Onésimo (Flm. 10,11), Timoteo (Flp.2:22; 1Ti.1:2, 18; 2Ti.1:2; 2:1), Tito (1:4) los gálatas (Gl.4:19) y los corintios (1Co.4:15), ha sido mal aplicado por los indoctos e inconstantes que tuercen las Escrituras (2Pe.3:16), al grado de prácticamente desautorizar lo expresamente dicho por el Señor, invalidando así una instrucción suya, que de acatarse, habría evitado grandes males.
La hermenéutica nos muestra como un texto apoya y complementa a otro, sin nunca contradecirlo ni anularlo. Así, lo primero que debería de notarse en este pasaje, es que lo que aquí el Señor corrige no es lo que realmente una persona sea - maestro, padre -, sino la obsesión por ser distinguidos por un tratamiento diferencial, que junto al exhibicionismo constituían características propias del espíritu farisaico, muy contrario al que Cristo formaba en sus discípulos.
Jesús no censura a los fariseos por no quedarse de pie en las cenas o en la sinagogas - era natural que se sentasen -; ni porque usasen filacterias y mantos con flecos, o porque fuesen saludados al pasar, o que enseñasen como rabinos, muy propio todo ello a lo que esencialmente eran.
El problema estaba en el modo en que hacían todo eso, pues mostraba la oculta pero indisimulada ambición de lucimiento personal que los gobernaba.
En otro lugar Jesús instruyó a sus discípulos diciéndoles - en contraste con los que imponen su autoridad -: “Pero no será así entre vosotros” (Mr.10:43). De semejante manera, aquí el Señor no obliga a sus discípulos a que dejen de ser lo que efectivamente eran, sino a no arrogarse los títulos ni tratamientos distintivos que aunque propios a sus personas y funciones, ya incubaban el germen de la doctrina nicolaíta que Él aborrece tanto como a sus obras (Ap.2: 6,15); así como la diabólica persuación a ser Él mismo desplazado como Cabeza de su iglesia, por las de hombres corruptos ávidos de poder y prestigio personal.
Repárese, entonces, que el mal que aquejaba a los fariseos y que los discípulos debían de evitar, era precisamente el amar ese ridículo pavoneo a que nos tiene habituado tanto congreso o ceremonia que alguna que otra vez nos tocó presenciar (Mt.23:5-7). De ahí que la recomendación del v.8 sea:
“Pero vosotros no pretendáis que os llamen “Rabí”. ¿Nos damos cuenta? No había problema alguno en ser maestro, pues con humildad, buena obra harían cuantos tuvieran ese don y aptitud para enseñar a otros (2Ti.2:2). Pero el problema - o problemón - estaba en la autosatisfacción de oírse llamar de:
- ¡Mi maestro! o - ¡Maestro mío! como implica la expresión “Rabí”.
La puesta al día de tan arraigado vicio clerical la tenemos hoy en la común forma empleada por los hermanos en las denominaciones al referirse a “Mi pastor”, como si pudiesen tener otro, a más del Señor Jesús. Los “pastores”, lejos de corregir, estimulan este uso, pues les oímos decir desde el púlpito:
- Si tú quieres que yo sea tu pastor, pues entonces deberás estar sujeto a mí.
Difícilmente puedan sonar voces más dulces a los oídos clericales que los melindrosos balidos de sus ovejas engordadas que los persiguen por todas partes: - ¡Pastor! ¡Pastor! Aunque no sean más que unas pocas rozagantes hermanas, en esos momentos se sienten envolver por el vértigo de la zalamería, de tal modo que no sólo a ellas y su congregación las ven como enteramente dependientes, sino que todo el barrio, ciudad, país y el mundo mismo parecen girar alrededor de ellos, esperando de su inspiración la palabra sabia y oportuna para cada situación.
Los fariseos de antaño y los de hoy protestarán en su defensa:
- ¡No se trata más que de un tratamiento de consideración y respeto!
Respondemos:
- ¿Acaso el de “hermano”, don Francisco o Sr. García suenan desconsiderados o irrespetuosos?
La liviandad con que ahora se tratan estas cosas contrasta con la importancia que se le daba en la antigüedad. Al menos para Eliú le era un asunto de vida o muerte: “Y no haré ahora distinción de personas ni usaré con nadie de títulos lisonjeros. Porque no sé decir lisonjas, y si lo hiciera, pronto mi Hacedor me consumiría” (Job 32:21,22). ¿Será sobrecargar demasiado la tinta si agregamos la cita de Romanos 1:32? Veamos: “Esos, aunque conocen el juicio de Dios, que los que practican tales cosas son dignos de muerte, no solo las hacen, sino que también se complacen con los que las practican”. Muy fuerte, ¿verdad?
Por supuesto que en su ámbito natural (cuartel, hospital, oficina) hemos de emplear con nuestros propios hermanos los rangos militares, títulos universitarios y grados jerárquicos. Pero ni estos ni los títulos eclesiásticos funcionan en la iglesia de Jesucristo. Allí tenemos un solo Señor, Esposo, Cabeza, Maestro y Líder - como seguidamente veremos -, y todos los demás somos hermanos. No existe el laicado. Toda la hermandad en Cristo compone el clero (1Pe.1:3 gr.). Si se quisieran usar los términos “clérigos” o
“eclesiásticos”, con propiedad deberían de aplicarse a todos los hermanos y jamás reservarlos para sus cuidadores, como mal tradicionalmente se hace.
La traducción común en nuestras Biblias de Mt.23:10 no nos permite advertir el significado del texto, antes bien parece una repetición resumida del v.8. Observando el texto griego captamos la diferencia: en el v.8 se traduce bien “didáskalos” por maestro, pero en el 10 el término “kazegetes” (único lugar en que aparece en el Nuevo Testamento) aunque incluya (entre otras) la idea de “preceptor”, más propiamente describe al que guía con su ejemplo tomando la delantera. El vocablo que en inglés más fielmente representa la idea es “Leader” y en español “Caudillo”, y así aparece en las ediciones interlineales del texto griego en ambos idiomas. En la versión King James la palabra “leader” no se usa en el N.T. y unas pocas veces en el Antiguo se aplica a jefes o capitanes del ejército, como los valientes de David; pero nunca a dirigentes religiosos.
El anglicismo “líder” y luego los derivados “liderar’, “liderazgo” son de reciente incorporación al Diccionario de la Real Academia Española, y por siglos nos hemos arreglado muy bien sin tales extranjerismos. De sobra tiene el castellano vocablos apropiados para tomar préstamos de otras lenguas; que si en ellas pueden ser de legítimo uso, en la nuestra llegan a confudir y no a dar precisión a la expresión de las ideas.
Ahora bien, aquí tenemos dos puntos a considerar:
1ero. - Los vocablos “líder, liderar, liderazgo” si bien pueden usarse legítimamente en un contexto secular (político, deportivo, empresarial) son totalmente inapropiados en el ámbito de la congregación cristiana.
El afán de competencia constituye la motivación principal conducente al éxito personal o de cualquier institución en el mundo. El marketing empleado para lograr éxitos de librería o la convocatoria a congresos y talleres de liderazgo ha sabido explotar la vanidad personal en su intento de aprender y utilizar las técnicas y estrategias que confieran el predominio sobre el prójimo, en el área religiosa, inclusive.
El afán por el destaque se vuelve luego la obsesión de la carne exacerbada, por más que luego se vista de “llamados” a “ministerios” especiales bajo “unciones” siempre sospechosas y jamás convincentes de la verdadera acción del Espíritu Santo.
La ridiculez de los “líderes” de las “iglesias” se advierte fácilmente al no lograr seguidores a sus emprendimientos, sino que siempren tienen que estar empujando a sus “liderados” desde abajo y de detrás.
La competencia y rivalidad suscitada entre los candidatos a “líder de jóvenes”, “líder de célula o grupo” o “líder de alabanza” ha provocado más corrupción en las “iglesias” de lo que pudiera imaginarse.
En un país como el nuestro donde todos quieren ser caciques pero no tenemos indios, véase qué porvenir puede tener cualquier intento de establecer “liderazgos”.
2do. - Si el Señor Jesús ordenó que no seamos llamados de líderes porque uno es nuestro Líder, el Cristo, entonces, ¿qué tontería estamos haciendo - y pecado cometiendo - recibiendo y dando un trato que nos es prohibido por ser exclusivo de nuestro Señor?
Si en nuestra jerga cristiana evangélica quisiéramos mantener a ultranza el uso de estos anglicismos, entonces, con toda propiedad, hablemos de Jesús como nuestro único Líder, Su liderar como el de la Cabeza sobre todos los miembros del Cuerpo, y Su liderazgo como el que Él ejerce sobre todos los suyos por el Espíritu Santo.
Pero no mantengamos más este sistema nicolaíta que solamente sirve a los promotores del mismo pero malogra vidas y arruina congregaciones enteras.
Que todos así lo sigan haciendo, no nos obliga a proseguir con la complicidad generalizada en su abierta desobediencia y desacato al Señor y su Palabra.
Ricardo
 
Re: ¿Líderes en las iglesias?

En la Iglesia es necesario que algunos tengan autoridad (exousia) sobre otros. Y por supuesto, que esa autoridad esté al servicio de todos, no para la opresión innecesaria de nadie
 
Re: ¿Líderes en las iglesias?

Estimado hermano Ricardo, Gracia y Paz.
Totalmente de acuerdo con el fondo de lo que apuntas.
Creo que este “pastorado-liderazgo” nada tiene que ver con el que nos transmite la Palabra, que es un pastorado-servicio. Hoy hacen falta mas siervos y menos “lideres”, mas “obreros” de la mies, y menos “capataces”.
Lo que se nos transmite es estar sujetos unos a otros, pero claro que la iglesia tiene pastores, obispos, ancianos, y hemos de sujetarnos a ellos
Algunas citas claras:

“Digo, pues, por la gracia que me es dada, a cada cual que está entre vosotros, que no tenga más alto concepto de sí que el que debe tener, sino que piense de sí con cordura, conforme a la medida de fe que Dios repartió a cada uno. Porque de la manera que en un cuerpo tenemos muchos miembros, pero no todos los miembros tienen la misma función, así nosotros, siendo muchos, somos un cuerpo en Cristo, y todos miembros los unos de los otros. De manera que, teniendo diferentes dones, según la gracia que nos es dada, si el de profecía, úsese conforme a la medida de la fe; o si de servicio, en servir; o el que enseña, en la enseñanza; el que exhorta, en la exhortación; el que reparte, con liberalidad; el que preside, con solicitud; el que hace misericordia, con alegría.” Romanos 12.3-8

“Hermanos, ya sabéis que la familia de Estéfanas es las primicias de Acaya, y que ellos se han dedicado al servicio de los santos. Os ruego que os sujetéis a personas como ellos, y a todos los que ayudan y trabajan. Me regocijo con la venida de Estéfanas, de Fortunato y de Acaico, pues ellos han suplido vuestra ausencia. Porque confortaron mi espíritu y el vuestro; reconoced, pues, a tales personas.” 1 Corintios 16.15-18

“Y de hacer bien y de la ayuda mutua no os olvidéis; porque de tales sacrificios se agrada Dios. Obedeced a vuestros pastores, y sujetaos a ellos; porque ellos velan por vuestras almas, como quienes han de dar cuenta; para que lo hagan con alegría, y no quejándose, porque esto no os es provechoso.” Hebreos 13.16-17

“Ruego a los ancianos que están entre vosotros, yo anciano también con ellos, y testigo de los padecimientos de Cristo, que soy también participante de la gloria que será revelada: Apacentad la grey de Dios que está entre vosotros, cuidando de ella, no por fuerza, sino voluntariamente; no por ganancia deshonesta, sino con ánimo pronto; no como teniendo señorío sobre los que están a vuestro cuidado, sino siendo ejemplos de la grey. Y cuando aparezca el Príncipe de los pastores, vosotros recibiréis la corona incorruptible de gloria. Igualmente, jóvenes, estad sujetos a los ancianos; y todos, sumisos unos a otros, revestíos de humildad” 1 Pedro 5.1-5
 
Re: ¿Líderes en las iglesias?

Muy buen aporte y puntos de vista.

En lo personal, creo que es simple identificar un líder conforme a la voluntad y deseo de Cristo. En Cristo mismo tenemos el ejemplo.

Cuando Jesus hablaba, los Judíos mismos se asombraban y exclamaban:

Quien es este?
Que nos habla cómo quien tiene autoridad y no como los escribas o maestrso de la ley?

Cómo ya sabemos los escribas, buscaban su propio bien y la gloria de los hombres. No caminaban en la verdad. no recibierón la fe. Y el amor no lo conocian.

En cambio Jesús caminó en amor, en verdad y fe.

Los escribas y maestros de la ley, conocian la escritura a la perfección, pero su corazón estaba endurecido y no daba testimonio a nadie.

Así es lo mismo en nuestros dias. Un verdadero líder no tien que estar repitiendo a cada momento que el es el lider, o pastor. Ni mucho menos tiene que exiger sometimiento. A un verdadero líder, el mismo caminar en verdad, amor y fe, le otorga su autoridad y el pueblo de Dios lo reconoce sin presiones. Al igual que los Judíos reconcocierón la autoridad de Jesús. Y la falta de autoridad de los escribas [quienes se enseñoreaban de ellos].


Además, nosotros tenemos nuestro porcentaje de culpa. Ya que la escritura dice claramente:

Al anciano que gobierna bien su casa tendedlo digno de doble honra.

Lo que implica que al que hace lo contrario, no se le honra. Y punto.

Acordados de vuestros pastores, que os predicarón las buenas nuevas. Y examinando cual haya sido el resultado de su conducta imitad su ejemplo.

De nuevo. Del lider o pastor que se tiene uno que acordar, ees del que predica LAS BUENAS NUEVAS [pacto de gracia] y no de los adulteros que combinan cuanto mandamiento de la ley les conviene para hacerce así "sus" reinos. Además despues de predicar la buenas nuevas, aun tenemos palabra de EXAMINAR su conducta. Lo cuál implica que solo si enseña la gracia y la obedece. Podemos imitarle o seguirle.

Muchas veces los "lideruchos" estan ahí, por nuestra desobedencia a la palabra.

voz
 
Re: ¿Líderes en las iglesias?

Yo creo que Dios nos llama a cada uno a ser un lider, o sea crecer espritualmente y madurar hasta poder llegar a ser ese líder... porque cuando Jesús les mandó a sus discipulos (cuando el milagro de los peces y los panes) que les dieran ellos de comer a la multitud... Jesús no fue él quien repartió la comida, sino que fueron los discipulos (y nosotros somos discipulos de Cristo), les mandó que hicieran grupos, se sentaran y luego los discípulos les repartiera el alimento... Yo creo que uno de los mejores métodos de crecimiento y extensión de la palabra de Dios es con el testimonio personal a través de las células... o sea hacer como en ese pasaje.... formar grupos de gente y cada discípulo (obviamente tiene que tener un nivel de madurez en Dios) reparta el alimento (la palabra de Dios) a cada grupo y eso para mi es ser un lider.
 
La Pay:

La Pay:

Claro está que te asiste todo el derecho a creer lo que quieras o como quieras.
Lo que me resulta increíble, es como después de haber leído este epígrafe
porfíes todavía en persistir negando lo que parece todo un claro mandamiento de nuestro único Líder en Mateo 23:10.
Poco importa lo que tú o yo podamos opinar sobre qué entendemos que sea un líder, cuando la divina opinión dada a conocer en la Sagrada Escritura nos está diciendo que ese apelativo solamente corresponde al que es Cabeza de su cuerpo, que es la iglesia.
Por supuesto que todos los hijos de Dios que funcionamos como miembros en el lugar que hemos sido puestos, con los dones que el Espíritu Santo nos ha
repartido, estamos para servir y compartir responsabilidades en áreas que Él
en su sabiduría ha determinado. Pero si ello incluye que guiemos a otros
instruyéndoles en la Palabra de Dios, ello no nos convierte en “líderes” en abierta contradicción a lo que hemos aprendido de Mt. 23:10.
Que a los facilitadores o conductores de células o grupos caseros se les esté ahora llamando de “líderes”, es por el atractivo que halaga a la carne y contra lo cual nuestro Maestro el Cristo habló tan claro en ese pasaje. Que la mayoría de los cristianos esté usando este vocablo sin problemas, no quiere decir que ello esté bien, sino sólo que se trata de un gran pecado de desobediencia y rebeldía inmensamente extendido. Compartir con muchos el
mismo pecado, no lo desmerece ni disminuye la culpabilidad personal.
Si estoy equivocado, por favor, convénceme de mi error, pues atenderé tus
razones.
Pero si por gracia de Dios estuviera en lo cierto, entonces sal tú del error y ayuda a cuantos más puedas.
No es posible conciliar el NO de nuestro Maestro con el Sí de quienes
profesan ser sus discípulos.
Ricardo.
 
Re: ¿Líderes en las iglesias?

me parece muyyyy fuertas que xq una persona use la terminologia "lider" le juzgues como pecado y rebeldía jajajaja eso es muuyyyy fueeerte... y yo no creo que es por halago de nada... es más yo soy de las q me ves siempre en segundos planos dentro de la iglesia porque no me gusta destacar en nada.

Te escribo lo que significa lider en la real academia de la lengua...
Lider: Director, jefe o conductor de un partido político, de un grupo o social o de otra colectividad.

Por lo tanto un lider en una iglesia es aquel que conduce, guia y lleva y dirige en unos propósitos y metas a dicha iglesia.. Porque supongo que estará muyyy claro que Dios es el cabeza de la iglesia peeero Dios usa a personas, gente para llevar acabo lo que Dios dice... y la accion de llevar acabo o dirigir algo como se le llama??? liderar.
 
Luis Fernando:

Luis Fernando:

Luis Fernando:
Según mis números las palabra “exousia” aparece 102 veces en el N.T. griego, pero ninguna de ellas con referencia a autoridades eclesiásticas. Sí por supuesto con respecto a las civiles como en Romanos 13:1-3. Si tú conoces algún texto en que se utilice “exousia” en el sentido de cristianos revestidos de autoridad dentro de las iglesias, por favor házmelo saber.
Tú dices: “En la Iglesia es necesario que algunos tengan autoridad”; sí, eso mismo es lo que pensó Diótrefes (3Jn.9,10) y ya en el segundo siglo Ignacio de Antioquía estableciendo un solo Obispo por iglesia (véase Hechos 20: 17, 28). Por la conveniencia de algunos clérigos se llegó a menospreciar el único señorío (Kyriotetos - 2Pe.2:10), pues la Cabeza de la iglesia es una sóla (Cristo), y las múltiples cabezas corresponden al dragón y al Anticristo (Ap. 12:3; 13:1). Jesucristo no comparte la jefatura de Su iglesia con nadie, y las cabezas que se han alzado pretendiendo estar asociadas a la de Él como autoridades delegadas suyas, están resistiendo al Espíritu Santo como los judíos que crujian sus dientes contra Esteban (Hch.7:51-54). Los que piden “autoridades” en las iglesias están igual que los que pidieron rey a Samuel, rechazando no al juez, sino a Dios mismo. Esas “iglesias” nada tienen que ver con la Suya propia, la de Cristo, que Él mismo edificaría (Mt.16:18). Las que actualmente se precian de ser “Iglesias” no son más que Lugares Altos.
Ninguna necesidad hay que los hermanos que sirven y ayudan a los demás ejerciendo sus dones y cumpliendo con sus responsabilidades sean distinguidos con epítetos que los destaque de entre los demás o les confiera cualquier ascendencia, autoridad o dignidad especial. La idea contraria a esto es lo que el Señor reprueba en Mat.23: 8-10.
Puedo estar equivocado; agradeceré al que mejor me instruya. Ricardo.
 
Re: ¿Líderes en las iglesias?

Luis Fernando dijo:
En la Iglesia es necesario que algunos tengan autoridad (exousia) sobre otros. Y por supuesto, que esa autoridad esté al servicio de todos, no para la opresión innecesaria de nadie


La autoridad como se vive y practica en su institución religiosa ha permitido la pederastia, así pues su modo de entender la autoridad, o el modo o manera en que es ejercida (o no ejercida), es algo más demoníaco que "cristiano".

Un saludo
 
Re: ¿Líderes en las iglesias?

IBERO dijo:
La autoridad como se vive y practica en su institución religiosa ha permitido la pederastia, así pues su modo de entender la autoridad, o el modo o manera en que es ejercida (o no ejercida), es algo más demoníaco que "cristiano".

Un saludo

¿porqué no es posible considerar su afirmación un falacia?
 
La Pay, Haaziel, VOZ777:

La Pay, Haaziel, VOZ777:

La Pay
¿Tan malo es mi castellano que no me entiendes?
El pecado no está en conjugar el verbo liderar, ni en el reconocer líderes políticos, militares, deportivos o empresariales como todo el mundo hace.
El pecado está en desobedecer de plano lo que el Señor Jesús ordenó en Mt. 23:10, nada más que porque en todas las iglesias es de estilo en la post modernidad llamar de “líderes” a todos los que hacen algo, pues su vanidad queda así satisfecha. Si en vez de ese término tan bonito y agradable (pues hasta suena lindo), se les llamara “servidores”, “ayudantes”, “colaboradores”,
“encargados”, “hermanos responsables”, etc., entonces se privarían de ese peculiar encanto que envuelve el ser reconocido y llamado de “líder”.
Por siglos nos hemos manejado en las iglesias con vocablos entendidos de todos y que expresaban cabalmente su sentido como: conductores, guías,
orientadores, mentores, etc. Lo que ocurre es que la obsesión por los cargos y puestos en las “iglesias” ha terminado por adoptar un anglicismo genérico, que deja complacidos a unos, resentidos a otros; pero la figura del Pastor queda preservada de toda rivalidad o competencia, pues él es el líder por antonomasia de la iglesia, cuyo liderazgo nadie cuestiona ni discute. Los demás líderes, pueden cesar en cualquier momento, sea por algún disgusto, y hasta - en algunos lugares - por atrasarse en su pago de los diezmos (!?!).
Aprovecho para decir aquí a Haaziel y a VOZ777, que mi punto no es el de
discernir entre líderes buenos y malos; verdaderos o falsos, espirituales o
carnales, santos o mundanos, que siguen a Jesús de cerca o de lejos, sino nada más y nada menos que si Jesús dijo que Él era el único y nosotros no deberíamos llamarnos ni dejarnos llamar así, entonces a eso se reduce todo.
¡Así de sencillo! Nadie se enoje conmigo. En todo caso, pregunten al Señor
por qué se le ocurrió ahora fastidiarnos con tan antiguo mandamiento. Si no lo habíamos visto antes, era porque lo encubrían nuestras versiones que allí
traducían “maestros” (masters).
Ricardo.
 
Re: La Pay, Haaziel, VOZ777:

Re: La Pay, Haaziel, VOZ777:

Ricardo dijo:
Aprovecho para decir aquí a Jaaziel y a VOZ777, que mi punto no es el de
discernir entre líderes buenos y malos; verdaderos o falsos, espirituales o
carnales, santos o mundanos, que siguen a Jesús de cerca o de lejos, sino nada más y nada menos que si Jesús dijo que Él era el único y nosotros no deberíamos llamarnos ni dejarnos llamar así, entonces a eso se reduce todo.
¡Así de sencillo! Nadie se enoje conmigo. En todo caso, pregunten al Señor
por qué se le ocurrió ahora fastidiarnos con tan antiguo mandamiento. Si no lo habíamos visto antes, era porque lo encubrían nuestras versiones que allí
traducían “maestros” (masters).
Ricardo.
Estimado hermano Ricardo, se bien cual es el punto que defiendes, con la Palabra en la mano, y estoy totalmente de acuerdo contigo, de hecho me parece especialmente "repelente" esto del "liderazgo" cristiano, y efectivamente creo que esta tomado del mundo, y no estimula otra cosa que la "vanagloria", es más creo que somos capaces de transformar "el Siervo" cuando nos referimos al pastor, hasta hacerlo una especie de "pedestal".
Estoy de acuerdo que solo y exclusivamente tenemos un lider, una cabeza de la Iglesia: Cristo, y nosotros que hasta como siervos somos inutiles, "solo" podemos aspirar a ser "instrumentos escogidos" "utiles" en las manos del Maestro.
Y sin embargo, estar "sujeto" es otra cosa, no es estar bajo otro liderazgo, ni bajo otro Señorio. Y por supuesto que estamos llamados a estar sujetos unos a otros, sin tener más alto concepto de nosotros del que debemos.
En un rebaño de ovejas, dependen unas de otras, se necesitan unas a otras, y no hay una "oveja lider", sino un pastor, asi es tambien con la grey del Señor Jesucristo.
 
Re: ¿Líderes en las iglesias?

Hermano Ricardo.


Quizá no entendí de todo tu pregunta. Tienes razón. El que guia y dirije es y debe de ser Jesús, Y es a Jesús al que debemos tener por líder, guianza y maestro.

Confundí un poco los términos y describí cómo debe de ser la conducta de los ancianos. Eso no cambia.

Pero lo que si cambia es que los ancianos nos son líderes, sino servidores.
En el momento que un anciano deja de oir y seguir al único y verdadero líder, se le llama la antención y si persiste se le toma cómo corrompido. Para eso tenemos el consejo de la Escritura.

Recibe un fuerte abrazo.
voz
 
Re: ¿Líderes en las iglesias?

Haber... (esq me parece que x una tonteria estamos siendo muyyy extremistas) esta claro que somos siervos y todo eso, ahora no dudo que haya iglesias donde esos puestos de liderazgo sea causa de competencia, pero no todas son asi!!!
Esque para mi ser un colaborador, un siervo, un lider, o cualquier termino para mi... significa lo mismo. Es un don que Dios te da y lo pones en disposición a la iglesia para su edificación.

Y con lo que has dicho Ricardo de q un pastor no se le discutirá el liderazgo (es x lo general) pero hay veces donde sí se le discute... xq no es Dios, es un ser humano, que igualmente a un "lider" se le puede quitar ese cargo o ese puesto... a un pastor igual, se le puede quitar ese cargo de pastor xq un pastor puede fallar igual que un lider, y lo sé x experiencia propia y es horrible!!!!, me parece muuyyy mal que un pastor donde manipula, dice cosas que supuestamente Dios dice y se contradice con la biblia esté enfrente de una iglesia. Asi que no pongamos a pastores en altares tampoco, q según lo que tu dices de que un lider está para servir x lo tanto se le tiene q decir siervo o como sea... pues entonces a un pastor igual, está para servir y no ponerse medatillas de decoración para que donde vayan le rindan homenaje al señor pastor.
Según lo que tú dices... debe ser un siervo más en la iglesia.

Esque la autoridad de un siervo, colaborados, lider, pastor y lo que sea te lo da Dios cuaaando caminas en conforme su voluntad, ahora si te lo tomas para vanagloriarse ahí ya las cosas andan mal y x lo tanto llega un momento que Dios te quita esa autoridad.. Y sí hablo para los pastores también.
 
Re: ¿Líderes en las iglesias?

Abdón dijo:
¿porqué no es posible considerar su afirmación un falacia?

Porque "por sus frutos los conoceréis".

La pederastia es el fruto de lo que el sistema produce. No produce "santos", sino "pederastas". Así pues, yo sólo cito lo que dijo un apóstol inspirado.

Las instituciones religiosas "producen" los "frutos" del "mundo". Nada tienen que ver con Dios.


Saludos
 
A HAAZIEL y VOZ777:

A HAAZIEL y VOZ777:

Muy agradecido estoy al Señor y a ustedes dos pues ahora no me siento tan solo. Me consta que han entendido bien el punto.
Creo que debo tomarme algún tiempo para contestar a La Pay, pues creo que si de veras estamos sujetos al Señor no podemos permitirnos la libertad de decir que para mí tal cosa sea lo mismo que otra. Debemos discernir.
Ricardo
 
Re: ¿Líderes en las iglesias?

IBERO dijo:
Porque "por sus frutos los conoceréis".

La pederastia es el fruto de lo que el sistema produce. No produce "santos", sino "pederastas". Así pues, yo sólo cito lo que dijo un apóstol inspirado.

Las instituciones religiosas "producen" los "frutos" del "mundo". Nada tienen que ver con Dios.


Saludos

¿Producir? Le coloco esta definición para ver si nos ayuda en el foro...

falacia.
(Del lat. fallacĭa).
1. f. Engaño, fraude o mentira con que se intenta dañar a alguien.
2. f. Hábito de emplear falsedades en daño ajeno.

¿está seguro lo que dice? ¿No será una generalización? ¿No habrá algun roblema en su deducción? Dice que "instituciones religiosas", si los "Boys Scouts" tuvieran problemas similares ¿que diría?
 
Re: ¿Líderes en las iglesias?

haber.... cuando digo para mi.. es xq asi discierno y asi es como he entendido las cosas que Dios me ha mostrado a lo largo de muuuuchos años de cristiana y muchas experiencias vividas. Cuando digo para mi no me lo hablo carnalmente sino a través de la sabiduría y el entendimiento que Dios me ha dado.
Un abrazo.. y bendiciones!!!
Por cierto aquí no estamos para convencer a nadie de nada, sino de aportar cosas para edificación y bendición... no para discutir por "terminos" o ideas. Así que yo doy mi opinión y aunque algunos no estén de acuerdo se debería de respetar como otra posibilidad más (xq perdonar pero aqui ningun tiene la razón total de las cosas) otra forma de ver las cosas, otro punto de vista.
 
La Pay:

La Pay:

Mi problema con lo que escribes, y por lo cual no me atreví a replicar de inmediato, sino tras una concienzuda meditación, es cómo puede ser que tú, que a veces despliegas un buen criterio, puedas calificar de “tontería” el punto propuesto. Que te parezca que “estamos siendo muyyy extremistas”, bueno, no me resulta novedoso pues de legalistas, radicales y fanáticos hemos sido tratados cuantos creemos que la Palabra de Dios nos está dada para obedecerla y no solamente para satisfacer alguna curiosidad intelectual.
No hay más remedio que respetar tu opinión (que a tí te da igual como se les llame a los que sirven en las iglesias) pero aquellos que queremos de veras ser discípulos de Jesús no tenemos otra opción que guardar sus mandamientos sin re-interpretarlos a nuestra conveniencia o para acomodarnos al uso que es de estilo en todas partes. Cuando venga la apostasía de la que habla Pablo (2Ts.2:3) entonces en la Anti-Iglesia y todas sus sucursales puede ser que llegue a ser de estilo la consigna “Anatema, Jesús” (1Co.12:3). Y a todos les parecerá muy lindo expresarse así, pues tal dicho estará en boca de casi todo el mundo; por lo menos en los que lucirán el 666 en la mano o en la frente.
Aunque en nuestros días se haga como en el antiguo Israel: cada cual como bien le parezca, Dios sostendrá todavía un remanente fiel, que aunque no pasen de dos o tres congregados hacia el nombre del Señor Jesús, seguirán consultando la Palabra de Dios confiados en que el Espíritu de verdad les guiará a toda verdad, tomando las cosas de Cristo y haciéndoselas saber.
Cuando los que se profesan ser cristianos, asumen liderazgos, o se sujetan a
líderes, es porque - aunque inconscientemente muchas veces - intuitivamente
quieren escapar del liderazgo único del Señor Jesús y de su Santo Espíritu que le representa entre los suyos. Son díscolos a esa Cabeza que todo lo sabe y a ese Espíritu del que no se pueden esconder, y mil veces prefieren estar bajo cualquier autoridad humana que les deje algún margen para su egotismo.
Las jerarquías eclesiásticas conocen muy bien esta humana debilidad y así la
explotan a su conveniencia, transigiendo y condescendiendo según aconseje su política de iglesia. Así, todo el tema de la sujeción a las autoridades de la iglesia no pasa de ser sino UN GRAN FRAUDE. Las ovejas fingen que no se dan cuenta de nada y los pastores fingen que ellos no se dan cuenta que ellas fingen. Los unos imaginan que dominan y controlan todo, y las otras lo permiten hasta donde les sea placenteramente soportable; pero nunca más allá.
Permanecer asidos a la Cabeza (Col.2:19) y “todos, sumisos unos a otros”
(1Pe.5:5), requiere tomarse la cosa en serio, a pecho; y a esto muy pocos están dispuestos.
Dios tenga misericordia de nosotros todos.
Ricardo.