Hace un tiempo que no armo arbolito, pero algo de historia, o versiones de su historia que he ido recogiendo de los foros en estos años
El árbol de Navidad
Cuenta la leyenda que en el siglo VIII San Bonifacio, predicador en Alemania e Inglaterra, iba caminando por un bosque en una noche de invierno cuando vio a un grupo pagano dispuesto a sacrificar a un niño para ofrecerlo a los dioses. Para evitar esa desgracia cortó un árbol para darlo a cambio, al caer éste, salió un pequeño roble; el Santo volvió hacia la gente y le dijo: "desde esta noche el arbolito será un símbolo sagrado y el bosque representará la paz en sus hogares". El árbol permaneció siempre verde y fué llamado el árbol del niño Dios. También cuenran que Martín Lutero fue quien añadió la costumbre de ponerle velas como un recuerdo de las estrellas que guiaban a los pastores a Belén. Hoy han sido sustituídas por foquitos.
CUAL ES EL ORIGEN DEL ARBOL DE NAVIDAD?
Parece ser que la costumbre de celebrar la Navidad adornando un abeto surgió en Alemania, en la primera mitad del siglo VIII. Estando predicando el misionero británico San Bonifacio, el día de Navidad, a unos druidas germanos, para convencerles de que el roble no era ni sagrado ni inviolable, el "Apóstol de los Alemanes" derribó uno. El árbol al caer fue destrozando toda la vegetación, excepto un pequeño abeto. San Bonifacio interpretó la supervivencia del arbolito como un auténtico milagro, concluyendo su sermón: "Llamémosle el árbol del Niño Dios". Los años siguientes los cristianos celebraron las Navidades plantando abetos.
Tenemos constancia de que en el siglo XVIII se decoraban los abetos en Alemania en la época navideña. Una ordenanza forestal editada en l 561 en Ammerschweier, Alsacia, establecía que "ningún aldeano podría tener más de una árbol de Navidad, y nunca de altura superior a ocho veces la longitud de su zapato". La decoración en aquella época consistía en colgar "rosas de papel de colores, manzanas, tortitas y dulces". En el siglo XVI, Lutero introdujo la costumbre de poner velitas. En nuestro país no se hizo popular hasta mediados de este siglo.
Historia del Arbol de Navidad
El pino, por no perder su follaje en invierno, era desde milenios un símbolo de la vida.
Dice la leyenda que Winfred, monje misionero inglés, derribó en el siglo VIII, en lo que ahora es Alemania, un roble bajo cuya sombra los nativos practicaban sacrificios humanos.
Cuando después nació en el mismo sitio un pino, Winfred lo adoptó, ya no sólo como símbolo de la vida, sino también como símbolo del Cristianismo.--- Lutero parece haber sido el primero que le puso velas al árbol. El Príncipe Alberto, esposo de la Reina Victoria, introdujo, en el siglo pasado, el árbol de Navidad en Inglaterra. Los inmigrantes alemanes lo llevaron a Estados Unidos, donde ahora se producen más de 35 millones al año. A México llegó esta hermosa costumbre en los años 50. Ahora se encuentra firmemente arraigada en la familia mexicana, al igual que el Nacimiento, el cual es de orígen italiano.
EL ARBOL DE NAVIDAD
Historia
Tiene sus orígenes en la antigua creencia germana de que un árbol gigantesco sostenía el mundo y que en sus ramas estaban sostenidas las estrellas, la luna y el sol. (lo que explica la costumbre de poner a los árboles luces). Era también símbolo de la vida, por no perder en invierno su verde follaje cuando casi toda la naturaleza parece muerta. En algunas casas en los países nórdicos durante el invierto se cortaban algunas ramas y se le decoraba con pan, fruta y adornos brillantes para alegrar la vida de los habitantes de la casa mientras transcurría el invierno.
El árbol en sí tiene varios significados religiosos ya que ha sido utilizado como símbolo de la unión del cielo y la tierra: ahonda sus raíces en la tierra y se levanta hasta el cielo; por eso en muchas religiones, sobre todo en las orientales, el árbol es un signo de encuentro con lo sagrado, del encuentro del hombre con la divinidad y de la divinidad con el hombre. En Mesoamérica el árbol guarda un significado místico, inclusive tenían el ahuehuete como árbol sagrado. Las tribus nórdicas europeas y americanas algunos grupos como los druidas, tenían árboles sagrados alrededor de los cuales se reunían para ritualmente entrar en comunión con Dios.
Se cuenta que un misionero inglés en Alemania, en el siglo VII, comprendiendo que era imposible arrancar de raíz esta tradición pagana, la adoptó dándole un sentido cristiano, haciendo que el árbol adornado fuera también un símbolo del nacimiento de Cristo. Algunos otros hablan que Martín Lutero fue quien introdujo esta costumbre al adornar con manzanas un árbol para tratar de explicar los dones que los hombres recibieron con el nacimiento de Jesucristo.
Los primeros documentos que nos hablan de la costumbre de colocar en Navidad árboles de abeto o de pino en las casas son del s. XVII y menciona a la región de Alsacia, tierra que se encuentra como Alemania y Francia. En los países nórdicos, en el s XVI, se empiezan a reunir las familias en torno a un árbol de Navidad. El día 24 los niños eran llevados a pasear o de día de campo, mientras los adultos colocaban y decoraban con dulces y juguetes el árbol; a su regreso los niños eran sorprendidos con el árbol y así daba inicio la celebración de la fiesta de Navidad. Esta costumbre cobra fuerza y se extiende como moda cuando la Reina Victoria de Inglaterra para celebrar la Navidad hace colocar un árbol en el palacio decorándolo con velitas que hacen relucir una serie de bellos y finos adornos.
Significado del Árbol de Navidad
Para los hombres los árboles tienen un significado muy especial. en todas la culturas encontramos que el árbol tiene cierto significado antropológico, místico y poético. Se le tiene cierta reverencia por los beneficios que aporta al hombre. Para algunas culturas el árbol tiene un significado místico ya que representa el medio la unión del cielo y la tierra: ahonda sus raíces en la tierra y se levanta hasta el cielo; por eso en muchas religiones, sobre todo en las orientales, el árbol es un signo de encuentro con lo sagrado, del encuentro del hombre con la divinidad y de la divinidad con el hombre. Es muy común el que los árboles estén relacionados con la fecundidad, el crecimiento, la sabiduría y la longevidad. En Mesoamérica el ahuehuete es considerado sagrado. Las tribus nórdicas europeas y americanas como los druidas, tenían árboles sagrados alrededor de los cuales se reunían para ritualmente entrar en comunión con Dios.
Dios se ha valido de la forma en que los hombres ven a los árboles para dar a conocer su plan de salvación particularmente cuando se trata del misterio de la encarnación del hijo de Dios para salvar al hombre. En primer lugar se asocia al árbol de Navidad con el árbol de la vida, que lucía en medio en medio del Jardín del Edén y después de la caída desaparece; la fruta y las decoraciones nos recuerdan las gracias y dones que el hombre tenía cuando vivía en el Paraíso en completa amistad Dios. Por el nacimiento de Cristo, los hombres renacen y tienen acceso a la plenitud de la vida. El árbol de Navidad representa el haber recobrado dichos dones gracias al sacrificio de Jesucristo.
Los adornos del árbol y las luces que se encienden representan el nuevo estado paradisiaco que el amor de Cristo nos prepara. En la Biblia, el árbol aparece como un símbolo de la Vida, árbol que Dios coloca en medio del Paraíso como fuente de la inmortalidad (Gen 2, 9,3,22). Pero el árbol puede también simbolizar la falsa sabiduría, la soberbia y la muerte cuando el hombre se aparta de Dios (Gen 2, 16-ss) seducido por la apariencia engañosa de este árbol y comiendo su fruto (gen 3, 2-6).
Pero Cristo vino no únicamente a los hombres, vino como cabeza de una nueva creación, renovando todo lo que estaba caído. La presencia de Cristo responde al anhelo de la creación para ser liberada de la esclavitud y de la destrucción; mientras tanto se queja y sufre, tal como una mujer en sus dolores de parto tal como nos lo describe San Pablo en la epístola a los Romanos. Por eso el árbol de Navidad representa esa naturaleza restaurada y engalanada para recibir a su redentor; el árbol perennemente verde quiere saludar en nombre de la naturaleza renovada a su Señor "Alégrense los cielos y la tierra, retumbe el mar y el mundo submarino. Salten de gozo el campo y cuanto encierra, manifiesten los bosques regocijo" (salmo 5).
El árbol de Navidad también representa ese árbol que nace y que con el tiempo madurará en un gran árbol del cual saldrá la cruz que tal como nos recuerda la liturgia del Viernes Santo: "Cruz amable y redentora, árbol noble y espléndido , ningún árbol fue tan rico ni en frutos ni en flor". Podemos decir que de alguna manera el árbol de Navidad nos recuerda la redención. Las luces representan la luz de Cristo en nuestra vida. y la estrella que en algunas ocasiones se coloca en la punta representa a la estrella de Belén que anuncia la redención a la humanidad.
EL ARBOL DE NAVIDAD
Con las dos noches de Navidad y de la Epifanía, con el Niño y con Los Reyes Magos, se hallan relacionadas toda una serie de tradiciones folklóricas, dicho complejo festivo, que se apoya a un tiempo en el nacimiento del Dios-Hombre en el solsticio invernal (debe recordarse que todas estas tradiciones son originarias del hemisferio norte) y el comienzo del nuevo año con arreglo al calendario Juliano- Gregoriano.
Y a la cabeza de las demás tradiciones convendría hablar en primera instancia del ARBOL DE NAVIDAD, dicho árbol en los últimos decenios se ha "laicizado" pasando a formar parte del conjunto de usos navideños, ligados al consumismo y como imitación del AMERICAN WAY OF LIFE. Sus origenes son germánicos y tiene un significado DE RETORNO, está vinculado a la imagen de seguridad y opulencia de América vista a través de los ojos de los inmigrantes o a través de filmes ligeros, que USA vertió en kilómetros de celuloide sobre EUROPA, durante la post-guerra, junto con los paquetes-donativo del Plan Marshall (algo semejante a las cajas de PAN que hace unos años se repartieron en la Argentina; PAN: Plan de Asistencia Nacional). Incluso en la Plaza Roja de Moscú, durante el periodo Soviético, se adornaba con inocuos arboles de Navidad y nadie pensaba entonces que ello podría constituir propaganda "reaccionaria" del nacimiento del Sol-Niño, en la fría noche solsticial. Obviamente ahora con el capitalismo- consumismo se ha acentuado en la plaza que se sigue llamando igual (KRASNAIA significa Rojo o Hermoso).
En el plano histórico, no se remonta a demasiado tiempo atrás, aunque la leyenda alemana quiera relacionarlo con Martín Lutero, quien regresando a Wittenberg, una silenciosa y fría noche de vigilia, quiso recrear, adornando con pequeñas velas un abeto domestico, la impresión fabulosa que tuvo al observar los arboles helados del bosque que resplandecían bajo la luz de las estrellas... quizá haya sido un intento de la iglesia alemana reformada por conservar una costumbre pagana, viva en el pueblo, atribuyendole un carácter cristiano.
La costumbre se arraigo en Alemania y los paises escandinavos en los siglos XVI y XVII, de allí paso a Inglaterra: primero fueron los soberanos de la casa de Hannóver, Jorge III (y sobre todo su esposa Carlota), y más tarde el Principe Consorte Alberto de Sajonia-Coburgo, celebre marido de la reina Victoria. Cabe pensar que el abeto decorado en los hogares, podría considerarse, en cierto sentido, como una prueba de fidelidad monárquica.
En USA es mas antiguo, data de la época de la Guerra de la Independencia y se relaciona con los mercenarios asiáticos que militaban en las filas de los ingleses, pero el dato mas preciso lo tenemos con la existencia de la costumbre entre los colonos alemanes de Pensilvania. En general, con respecto al Arbol de Navidad se evoca un indiferenciado trasfondo dentrolatico europeo y en ello se pone de manifiesto que otras especies vegetales comparten el honor de ser consideradas de buen augurio: el abeto (siempre verde) es símbolo de inmortalidad, pero junto con este, se sigue usando el MUERDAGO, la antigua planta de los druidas y de la tradición nórdica y en las zonas rurales italianas se quema el "RAIGON" un tronco grueso, relacionado con la idea de consumirse el sol solsticial, pero cuya ceniza, conservada, se le atribuye virtudes arcanas (considerese que las cenizas son "fertilizantes") En Inglaterra abeto, muérdago, madreselva, o en su sustitución el laurel o el enebro.
Todo apunta a la sacralización de la vegetación por lo que debemos relacionar el Arbol de Navidad con los cultos paganos de adoración Arboreo-Vegetal y se presenta también sobre todo en Europa en otras épocas del año como por ejemplo al comienzo de la primavera, en Mayo, ha sido por otra parte la respuesta cristiano-tradicionalista a los ritos Jacobinos del Arbol de la Libertad, a su vez implantados a imitación del folklórico Arbol de Mayo.
Se puede plantear la pregunta hasta que punto el árbol del solsticio sea un símbolo puramente vegetal o también COSMICO: EL ARBOL DEL MUNDO, sobre todo en la forma que viene representado en el FRESNO YGGDRASIL, senda y escalera entre las tres regiones cósmicas del cielo, la tierra y la ultratumba, el fresno del cual estuvo suspendido ODIN durante sus nueve días iniciaticos y a través de su muerte y resurrección consiguió alcanzar la sabiduría contenida en la RUNAS mágicas.
En cuestión de arquetipos, nadie podría decirnos que sea casual, que un símbolo como el árbol se haya impuesto tan profundamente en el seno del cristianismo. En el GENESIS (BERESHIT) se menciona el ARBOL DE LA SABIDURIA situado en el centro de Edén, símbolo central del pacto entre Dios y el hombre; El Arbol de Acvattaha (c con cedilla) de los Hindues; el árbol paradisiaco HAOMA de los Persas; El árbol de las manzanas áureas de Jardín de la Hespérides; El árbol del Vellocino de Oro de Jason; en el Nuevo Testamento se da un correlativo del árbol del Edén y es el Arbol de la Cruz, según la medieval Legenda Crucis, esta habría sido hecha con la madera del primero. Desde un plano propiamente mitologico-religioso no puede decirse que sea un azar que un árbol sea el protagonista de la fiesta de Navidad.
En la Tradición de la Kabalá (esto es una redundancia necesaria, Kabalá en hebreo significa tradición) en el Arbol de los Shefirot residen los valores de la sabiduría y el poder (Tanto en la tradición Védica el árbol de Açvatta el árbol esta invertido, como en el del Purgatorio de Dante, lo que simboliza que en el Cielo esta su alimento)
Decorar el árbol de Navidad
La costumbre de adornar el árbol de Navidad con distintos elementos cambia mucho de país en país. Según las fuentes centroeuropeas esta tradición tiene su origen en la antigua creencia germana de que un árbol gigantesco sostenía el mundo y que en sus ramas estaban sostenidas las estrellas, la luna y el sol, lo que explica la costumbre de poner a los árboles luces, bolas y campanillas.
Quienes afirman que Martín Lutero fue quien introdujo la costumbre de adornar el árbol con manzanas, intentan recrear la imagen de unos árboles helados, en invierno, reluciendo bajo la luz de las estrellas, colgando pequeñas velas de sus ramas.
Algo parecido explica la tradición latina que asocia al Árbol de Navidad con el árbol de la vida, que lucía en medio del Jardín del Edén con fruta y las decoraciones nos recordarían esas gracias y dones que el hombre tenía cuando vivía en el Paraíso en completa amistad con Dios.
Pero la realidad es que entre los festejos de Navidad ha ido tomando cuerpo la costumbre de instalar en los hogares un pequeño pino o abeto, que se adorna con infinidad de esferas de cristal o plástico de brillantes colores y de diversas figurillas, así como gran cantidad de luces que aumentan su esplendor, y hasta en algunos casos, a todo el conjunto se le da un aspecto nevado para simbolizar el invierno.