Invocar el nombre del Señor para ser vasos de honra

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5 Septiembre 2001
3.029
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ALIMENTO DIARIO
Leer con oración: 2 Ti. 2:22-23
"Huye también de las pasiones juveniles, y sigue la justicia, la fe, el amor y la paz, con los que de corazón puro invocan al Señor" (2 Ti 2:22)
INVOCAR EL NOMBRE DEL SEÑOR
PARA SER VASOS DE HONRA
Pablo tenía en realidad mucha experiencia. Él sabía que cuando invocaba el nombre del Señor, se purificaba de sus errores y se apartaba de la injusticia. Ahora era justo y santo.
Cuando la iglesia está en una situación de degradación, necesitamos servir a Dios pero no como vasos de barro y de madera. Necesitamos purificamos a nosotros mismos, tener la justicia subjetiva. Así, el Señor trabaja en nosotros y deposita más Su naturaleza divina en nuestro ser, haciéndonos vasos de oro. Por eso necesitamos tomar esa determinación.
En 2 Timoteo 2:22 tenemos la conclusión: "Huye también de las pasiones juveniles, y sigue la justicia, la fe, el amor y la paz, con los que de corazón puro invocan al Señor". En aquella época, Timoteo que se encontraba en la iglesia en Éfeso, se había debilitado, porque existía allí un grupo de personas que hablaban doctrinas que no promovían la dispensación de Dios en la fe. Timoteo deseaba llevarlos a invocar el nombre del Señor y a estar en el Espíritu. Pero ellos no quisieron. Entonces Timoteo estaba bajo mucha presión hasta el punto que enfermó de su estómago. Inclusive su espíritu se apagó. Por eso Pablo tuvo que decide: "Tú debes reavivar el fuego del don de Dios que hay en ti" (1:6). Gracias al Señor, a pesar de que la iglesia en Éfeso estaba en tal situación, allí aún había personas que invocaban al Señor con un corazón puro. ¡Aleluya! Fue con ellos que Pablo animó a Timoteo para que siguieran la justicia, la fe, el amor y la paz.
No debemos desilusionarnos con la situación de ninguna iglesia. Antes necesitamos estar juntos con los que invocan al Señor de corazón puro. Especialmente los jóvenes deben buscar proseguir con los que de corazón puro invocan el nombre del Señor, y no ir al mundo, con las personas que aman el mundo. En el colegio ellos tienen muchos compañeros que son malas compañías. No deben asociarse con ellos, sino andar con los que de corazón puro invocan el nombre del Señor.
En 2 Timoteo 2:23 leemos: "Pero desecha las cuestiones necias e insensatas, sabiendo que engendran contiendas". Muchas doctrinas engendran sólo contiendas. Solamente las enseñanzas sanas y las sanas palabras pueden llevamos a crecer en vida. En la era de la degradación de la iglesia, debemos aferramos a la promesa de la vida del Señor. Nosotros ya tenemos esa vida. No entremos en degradación. Aunque la situación de la iglesia no sea normal, ya tenemos la promesa de la vida. Tenemos espíritu de poder, de amor y de dominio propio. Además tenemos la palabra de Dios, que es transmitida a hombres fieles e idóneos que pueden enseñarla a otros. Finalmente, debemos buscar ser vasos de oro, vasos para honra, invocando al Señor y andando con los que de corazón puro lo invocan.
Nada se gana con discutir con aquellos que les gusta las doctrinas, pues ellos continuarán en las doctrinas. Debemos orar por ellos. Cuanto más discutimos, más caemos en las doctrinas. Vamos a ir adelante con aquellos que de corazón puro invocan el nombre del Señor. Esta es la salvación para la iglesia en la época de la degradación. Esto restaurará la iglesia según la promesa de la vida que Dios tiene para nosotros desde el comienzo. ¡Aleluya!
Pregunta: ¿Con qué clase de hermanos debemos juntamos, y especialmente en la época de la degradación de la iglesia?
Dong Yu Lan
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Re: Invocar el nombre del Señor para ser vasos de honra

Pregunta: ¿Con qué clase de hermanos debemos juntamos, y especialmente en la época de la degradación de la iglesia?

Con los que alaban al Señor en su corazón y como las águilas se lanzan a la tormenta confiando sólo en El, hermano Hugo. Eso es lo que hizo San Pablo. Lo mismo hicieron San Francisco y Santa Teresa de Jesús. Y muchos otros de los cuales no sabemos sus nombres.

"La fuerza interior de Mi Iglesia es Mi Espíritu Santo, ese Fuego que os anima, os purifica y hace de vuestro espíritu columnas de fuego, braseros ardientes de amor, antorchas vivas de luz, para proclamar sin miedo Mi Palabra, llegando a ser testigos del Altísimo y enseñando a otros a buscar sólo las cosas del Cielo." (VVeD-15.04.91)

Mis bendiciones. Inés
 
Re: Invocar el nombre del Señor para ser vasos de honra

Asi como lo dices tu esta bien , pero fijate como titulan los libros que han sacado de teresita de calcuta.





Inés Bourdiuex dijo:
Pregunta: ¿Con qué clase de hermanos debemos juntamos, y especialmente en la época de la degradación de la iglesia?

Con los que alaban al Señor en su corazón y como las águilas se lanzan a la tormenta confiando sólo en El, hermano Hugo. Eso es lo que hizo San Pablo. Lo mismo hicieron San Francisco y Santa Teresa de Jesús. Y muchos otros de los cuales no sabemos sus nombres.

"La fuerza interior de Mi Iglesia es Mi Espíritu Santo, ese Fuego que os anima, os purifica y hace de vuestro espíritu columnas de fuego, braseros ardientes de amor, antorchas vivas de luz, para proclamar sin miedo Mi Palabra, llegando a ser testigos del Altísimo y enseñando a otros a buscar sólo las cosas del Cielo." (VVeD-15.04.91)

Mis bendiciones. Inés
 
Re: Invocar el nombre del Señor para ser vasos de honra

Siempre en los tiempos de degradacion, queda un puñado de fieles al Señor a los cuales la vision de la iglesia no se les a empañado. Esos son los vebcedores que Dios busca