La noticia ya sin ningiuna manipulación
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La Iglesia ortodoxa excomulga                    al pope que mató a una monja supuestamente poseída por Satanás
                  
                   VASLUI, 25-6-2005 (Agencias/ACPress.net). 
                  La Fiscalía de Vaslui                    (noreste de Rumania) inicio ya el interrogatorio de cuatro monjas                    y el pope Daniel Corogeanu, sospechosos de crucificar y matar                    a Maricica Irina Cornici, de 23 años, en un rito de exorcismo.                    La Iglesia Ortodoxa también tomó medidas contra el sacerdote,                    al que excomulgó por 'herejía'.  
                    
                  Los cinco acusados de privación de libertad seguida de la muerte                    de la víctima pueden ser condenados a 20 años de cárcel si la                    Justicia los encuentra culpables. 
                    
                  Los congregados recibieron al sacerdote al grito de '¡Criminal!',                    '¡Asesino!','¡Satanás en sotana!', '¡Has matado a una niña inocente!',                    mientras que un grupo de seguidores le alentaban con palabras                    como '¡Dios te guarde, padre!' y se arrodillaban pidiendo su                    bendición. 
                    
                  'Murió porque así fue la voluntad de Dios', dijo el llamado                    'padre Daniel' a la emisora Realitatea TV y añadió que 'la lucha                    contra el diablo es muy difícil'. El sacerdote valoró que los                    periodistas no tienen fe y por ello no pueden entender lo sucedido.                    
                    
                  El 'padre Daniel' decidió el pasado 10 de junio que la monja                    conocida como 'Sor Irina' estaba poseída por el diablo cuando
                    a la joven de 23 años los médicos de un hospital de Vaslui le                    habían diagnosticado esquizofrenia con anterioridad. 
                    
                  En el 
ritual ideado por los captores la ataron de píes y manos,                    la amordazaron con una toalla, la privaron de comida y agua,                    la encerraron en un sótano y la expusieron al frío en el porche                    del monasterio, para terminar amarrándola tres días con cadenas                    a una cruz improvisada de madera. La joven murió por asfixia                    mecánica y deshidratación tras seis días de tortura. 
                    
                   La Iglesia Ortodoxa Rumana condenó como 'abominable' el acto                    del sacerdote, que fue declarado 'hereje' y excomulgado, mientras                    que 
se suspendió el monasterio de la Santa Trinidad. 
                    
                  Con su aspecto medieval, vestido con una sotana negra, largas                    melenas y una impresionante barba roja, Corogeanu, de 29 años,                    ostenta un fervor religioso que ejerce gran influencia sobre                    Tanacu, un pueblo de Moldavia, la más pobre y atrasada región                    de Rumania. 
                    
                  Renacida con fuerza tras la caída del comunismo, la vida monástica                    atrae a muchos jóvenes de ambos sexos que optan por el convento                    como una alternativa a la emigración en busca de trabajo.
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Pueden ver la noticia aquí: 
http://www.protestantedigital.com/actual/internacional.htm
Comparemos, por favor la noticia según aparece publicada por los servicios internacionales con los textos que fueron extraídos para presentar la notica al inicio de este epígrafe. No digo que Tobi lo haya hecho, porque es seguro que  él sólo cortó y pegó, pero quien lo haya hecho, realmente lo hizo con muy mala voluntad, y definitivamente, no sirviendo a Cristo, porque a Cristo no se le glorifica con la producción de desinformación, que es lo mismo que servir a la mentira. Creo que es imposible no llegar a odiar a las iglesias apostolicas históricas si se alimentan de tal forma estos sentimientos. Hay que estar alertas y poner la verdad por sobre todo. Si nuestros caminos no son en la verdad, no llegaremos a la verdad. Negar la verdad a los enemigos, no es servir a Cristo. Hay que orar por los enemigos, porque así lo manda Jesús, lo que no se puede hacer mientras se está produciento desinformación para alimentar odios y acentuara las divisiones. Reflexionemos antes de dar crédito de modo tan expedito a estas cosas. Muchas bendiciones a todos.