Hermanos evangélicos y católicos: Luchemos juntos contra el enemigo común.

24 Mayo 2005
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<?xml:namespace prefix = o ns = "urn:schemas-microsoft-com:eek:ffice:eek:ffice" /><o:p></o:p>

<o:p></o:p>

UNIDAD ENTRE LOS CRISTIANOS.<o:p></o:p>

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Hermano evangélico o católico:<o:p></o:p>

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Actualmente, en España, los cristianos tenemos evidentes enemigos comunes. Ni evangélicos ni católicos podemos ver con buenos ojos ciertas iniciativas legislativas que tratan de quitar libertad a los ciudadanos, minusvalorar el don precioso de la vida humana, equiparar la familia a cualquier tipo de asociación afectiva, anular el derecho de los padres a elegir la educación religiosa académica que desean para sus hijos, alentar la promiscuidad sexual, debilitar las garantías jurídicas del contrato matrimonial, abandonar la defensa del derecho de los niños a tener un padre y una madre, difamar todo aquello que tenga su base en el cristianismo, etc.<o:p></o:p>

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Los ataques son muchos y graves. Vivimos en un ambiente de paganismo creciente, cada vez más hostil. Los principales medios de comunicación de masas, dirigidos por el Gobierno o sus afines (El País, Diario 16, Digital Plus, El Periódico, TVE-1, TVE-2, TV3, Canal Sur, Cadena Ser, RNE, Localia,...), presentan una imagen manipulada de todos aquellos que se atreven a plantar cara a la moda de lo políticamente correcto. Cualquier denuncia de tipo profético, por tanto, es reducida inmediatamente mediante calificativos como integrista, reaccionaria, conservadora, oscura, retrógrada. No existe, ni siquiera, respeto a la libertad de cátedra; baste ver, por ejemplo, los ataques personales que está recibiendo D. Aquilino Polaino, Catedrático de Psicopatología de la Universidad Complutense, por informar en el Senado sobre la "inestabilidad de las relaciones afectivas en la pareja homosexual", para la cual citó estudios realizados en EEUU y en España. Según estos estudios, "el 28 por ciento de los homosexuales estudiados de una muestra de 600 habían tenido 1.000 o más compañeros; el 15 por ciento entre 100 y 249; el 9 por ciento entre 50 y 99; y un solo compañero sólo se daba en tres casos, y de estos 600 homosexuales la mitad tenía menos de 35 años". <o:p></o:p>

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Esto es lo que hay en España y vamos a más, dado que el Gobierno escucha mucho antes a las minorías radicales que a la mayoría de los españoles.<o:p></o:p>

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Ante esta situación, me permito sugerir que luchemos juntos por defender aquellos valores que compartimos: Menos discusiones y más colaboración. Actuemos conforme al deseo manifestado por Jesús antes de su Pasión, para que el mundo pueda conocerlo a Él y al Padre. Sin unidad de los cristianos, la evangelización se torna enormemente dificultosa porque pierde credibilidad. No se trata de que formemos parte de una misma organización o grupo, sino de cultivar lo que tenemos en común, sabiendo en todo caso cuáles son nuestras diferencias y tratándolas, cuando proceda, con total naturalidad y amor a la Verdad, con el deseo auténtico de ayudarnos unos a otros y estando abiertos a aprender del interlocutor.<o:p></o:p>

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Pero, ahora mismo, lo urgente es actuar unidos contra los enemigos de Jesús, que al fin y al cabo son enemigos del hombre. La Historia nos enseña que todas las ideologías que niegan a Dios acaban generando enormes tragedias. Sabemos todos las consecuencias del fascismo; también es necesario conocer los 100 millones de muertos del comunismo, la peor plaga que ha padecido la humanidad.<o:p></o:p>

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Es necesario, por tanto, no que olvidemos las diferencias, sino que sepamos convivir con ellas, rezar juntos pese a ellas, actuar en comunión aún existiendo ellas. Cualquier ateo que visite este foro podrá reírse de nosotros viendo las peleas que se producen algunas veces. Ya sé que sus protagonistas son una minoría, pero inevitablemente van a ser los que más llamen la atención.<o:p></o:p>

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La Paz sea con todos vosotros.<o:p></o:p>
 
Re: Hermanos evangélicos y católicos: Luchemos juntos contra el enemigo común.

manolius dijo:
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UNIDAD ENTRE LOS CRISTIANOS.<o:p></o:p>

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Hermano evangélico o católico:<o:p></o:p>

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Actualmente, en España, los cristianos tenemos evidentes enemigos comunes. Ni evangélicos ni católicos podemos ver con buenos ojos ciertas iniciativas legislativas que tratan de quitar libertad a los ciudadanos, minusvalorar el don precioso de la vida humana, equiparar la familia a cualquier tipo de asociación afectiva, anular el derecho de los padres a elegir la educación religiosa académica que desean para sus hijos, alentar la promiscuidad sexual, debilitar las garantías jurídicas del contrato matrimonial, abandonar la defensa del derecho de los niños a tener un padre y una madre, difamar todo aquello que tenga su base en el cristianismo, etc.<o:p></o:p>

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Los ataques son muchos y graves. Vivimos en un ambiente de paganismo creciente, cada vez más hostil. Los principales medios de comunicación de masas, dirigidos por el Gobierno o sus afines (El País, Diario 16, Digital Plus, El Periódico, TVE-1, TVE-2, TV3, Canal Sur, Cadena Ser, RNE, Localia,...), presentan una imagen manipulada de todos aquellos que se atreven a plantar cara a la moda de lo políticamente correcto. Cualquier denuncia de tipo profético, por tanto, es reducida inmediatamente mediante calificativos como integrista, reaccionaria, conservadora, oscura, retrógrada. No existe, ni siquiera, respeto a la libertad de cátedra; baste ver, por ejemplo, los ataques personales que está recibiendo D. Aquilino Polaino, Catedrático de Psicopatología de la Universidad Complutense, por informar en el Senado sobre la "inestabilidad de las relaciones afectivas en la pareja homosexual", para la cual citó estudios realizados en EEUU y en España. Según estos estudios, "el 28 por ciento de los homosexuales estudiados de una muestra de 600 habían tenido 1.000 o más compañeros; el 15 por ciento entre 100 y 249; el 9 por ciento entre 50 y 99; y un solo compañero sólo se daba en tres casos, y de estos 600 homosexuales la mitad tenía menos de 35 años". <o:p></o:p>

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Esto es lo que hay en España y vamos a más, dado que el Gobierno escucha mucho antes a las minorías radicales que a la mayoría de los españoles.<o:p></o:p>

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Ante esta situación, me permito sugerir que luchemos juntos por defender aquellos valores que compartimos: Menos discusiones y más colaboración. Actuemos conforme al deseo manifestado por Jesús antes de su Pasión, para que el mundo pueda conocerlo a Él y al Padre. Sin unidad de los cristianos, la evangelización se torna enormemente dificultosa porque pierde credibilidad. No se trata de que formemos parte de una misma organización o grupo, sino de cultivar lo que tenemos en común, sabiendo en todo caso cuáles son nuestras diferencias y tratándolas, cuando proceda, con total naturalidad y amor a la Verdad, con el deseo auténtico de ayudarnos unos a otros y estando abiertos a aprender del interlocutor.<o:p></o:p>

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Pero, ahora mismo, lo urgente es actuar unidos contra los enemigos de Jesús, que al fin y al cabo son enemigos del hombre. La Historia nos enseña que todas las ideologías que niegan a Dios acaban generando enormes tragedias. Sabemos todos las consecuencias del fascismo; también es necesario conocer los 100 millones de muertos del comunismo, la peor plaga que ha padecido la humanidad.<o:p></o:p>

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Es necesario, por tanto, no que olvidemos las diferencias, sino que sepamos convivir con ellas, rezar juntos pese a ellas, actuar en comunión aún existiendo ellas. Cualquier ateo que visite este foro podrá reírse de nosotros viendo las peleas que se producen algunas veces. Ya sé que sus protagonistas son una minoría, pero inevitablemente van a ser los que más llamen la atención.<o:p></o:p>

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La Paz sea con todos vosotros.<o:p></o:p>

Solo que te has olvidado de un pequeño detalle:
¿Quien lo ha gestado? Desde los tiempos de los reyes católicos una Institución ha tenido todos los resortes de la enseñanza en este nuestro país.
¿Que es lo que han hecho? Imponer por encima de convencer.
Desde el 1939 hasta 1975 impusieron a todo el pueblo español el Nacional Catolicismo. La enseñanza y educación estaba en manos de la Jerarquía eclesiástica y estos, como buenos Jerarcas continuaron imponiendo por encima de convencer y así no convencieron a nadie. ¿Sabes que nuestras iglesias fue en esta época cuando más crecieron a pesar de persecuciones y restricciones a que nos vimos sometidos. ¿Y ahora nos piden que les apoyemos? ¿Sabes que ocurriría si de nuevo tuviesen los privilegios de antaño? Pues lo mismo que ocurrió a lo largo de la historia.
Así, si tienes que viajar, ve con cuidado a quien escojes como compañeros de viaje. La cultura popular de nuestro "cazurro" pueblo es sabía: Mejor solo que mal acompañado.
 
Re: Hermanos evangélicos y católicos: Luchemos juntos contra el enemigo común.

¡TREMENDO!!!!:Duel: :smashfrea :guerragal
 
Re: Hermanos evangélicos y católicos: Luchemos juntos contra el enemigo común.

Tobi: Yo no he impuesto nada a nadie. El pasado está para que aprendamos de él, no para ser utilizado como arma arrojadiza.

Por otra parte, ten en cuenta que Franco, nos guste o no, salvó a la Iglesia Católica del exterminio. No lo digo yo que soy un ignorante, sino muchas personas autorizadas como, por ejemplo, el evangélico César Vidal Manzanares. Era lógica la gratitud hacia el régimen franquista.

Pero eso no ha sido una constante en la Iglesia Católica de España. Monseñor Añoveros, que fue obispo mío, estuvo en prisión por criticar al régimen. Pablo VI se enfrentó con Franco por la ejecución de cinco terroristas de ETA. Conozco muchos curas que pasaron por la cárcel. He estudiado en un colegio marianista y algunos profesores míos sufrieron la censura.

No estoy pidiendo apoyo para los católicos. Estoy proponiendo que colaboremos juntos en la defensa de valores comunes. Pretendo que, juntos, realicemos un servicio (la diaconía de la Verdad) a la sociedad española. Se nos trata de engañar. Sí, así, como suena. Estos señores que ahora gobiernan tienen una base filosófica que justifica el engaño como medio para un fin que consideran bueno. El socialismo es así.

El laicismo actual no nace en el tiempo de los Reyes Católicos. Es un fenómeno reciente, que empezó a gestarse hace pocas décadas. La educación, por un error constitucional, está en manos de los gobiernos autonómicos y no es constante en sus idearios. Los niños y jóvenes de hoy no han sido educados en el Nacional-Catolicismo. Yo, que nací en el año 63, tampoco. Cuando yo no rezaba ni iba a misa ni creía en los curas, me anunciaron el amor de Dios por encima de todos mis pecados, y esa predicación estaba ilustrada por numerosas citas bíblicas. Volví a la Iglesia Católica y eso ha cambiado mi vida. No ha sido una "conversión" forzada.

Entonces, ¿qué pasa? ¿Hay que pelearse a la fuerza? ¿Merecemos los católicos estar condenados al anatema de por vida?

No sé, por tus palabras no sé si eres realmente evangélico.

Saludos.
 
Re: Hermanos evangélicos y católicos: Luchemos juntos contra el enemigo común.

Estimado manolius:

Sin duda tu intención es buena si nace de tu conciencia cristiana, pero el probelma es más profundo de lo que parece. Piensa que ni siquiera podemos orar juntos. Nosotros nos dirigimos al Padre por medio de su hijo Jesucristo, tal como Él nos enseñó. Vosotros lo haceis por medio de María, los santos o cualquier otro elemento pagano que os han enseñado, desde chicos, ya conoces ENE, EJE y ESCOJE, luego teneis movimientos para adultos de todos los gustos, marianos, cristocentricos, etc. etc. Estoy muy consciente que en la ICAR hay muy buenos cristianos, solo que como yo los llamo; son mis hermanos "engañados" tal como vosotros nos llamais los hermanos "separados" o "protestantes". Nosotros seguimos a Cristo y a su Santa Palabra, al Dios que eligió nacer entre los más humildes de los humildes, no nos guia nadie más, no nos apoyamos en pseudo magisterios, eso hace imposible una común unión con quienes prefieren el boato pagano, lleno de oro y fetiches, antes que la humildad del evangelio de Nuestro Señor Jesucristo, sinó aún más, lo usan para justificar muchas cosas.
Te felicito por tu iniciativa, solo que si revisas un poco más hasta en el diccionario de la RAE, verás la influencia increible del nacional catolicismo.
Que el Señor te bendiga grandemente