Segun el historiador Herodoto podemos situar el nacimiento de Egipto en el año 5619 antes de la Era común.
Hubo por esos tiempos un curioso personaje llamado Dios Thot. De hecho, no tenemos ni remota idea de quien era en realidad ese "Dios" con tronco humano y cabeza de Ibis, pero lo que si sabemos, es que fue el inventor de la escrituras, los números y un sin fin de ciencias como la Geometría, la Magia, la Astrología y el conocido como Principio del Mentalismo.
Este Dios (o como queraís llamarle) fue asimilado por la cultura griega con el sobrenombre de Hermes Trimegisto.
Él, como un buen número de Sabios, creía firmemente que no todo el mundo merecía tener acceso a la Sabiduría y por ello Codificó sus textos. De ahi viene la expresión "Hermético". Es decir, oculto, encerrado, encubierto, inaccesible...
Desde aquel lejano entonces, han sido muchos los Sabios que han seguido esta, como mínimo curiosa, tradición conocida como Tradición Hermética.
No escaparon a esta Tradición los Sabios de Israel. Pues como todo el mundo sabe, toda la Sabiduría Bíblica deriva en su práctica totalidad, de la Sabiduría del pais de los Faraones.
Hay que aceptar, pues, que los Textos Bíblicos están Encubiertos y, que evidentmente, el Evangelio no es ninguna excepción. Los Evangelios son textos que, de manera Encubierta, advierten, como el resto de las Escrituras, de la peligrosidad del Conocimiento.
Claro que hay quien podrá alegar que yo miento o manipulo, que esto no es así, y que el Evangelio es, bajo ningún tipo de dudas, un Libro de carácter histórico. Mis amigos (personales) cristianos con quien siempre
-amigablemente- discuto, me dicen "!no es verdad! !no está encubierto!"
Está claro entonces, que, alguien, quizás yo, va muy equivocado.
En fin, tiempo al tiempo.
Buenos días.
“Que si todavía nuestro Evangelio está encubierto,
es solamente para los que se pierden, para quienes
está encubierto.”
2 Corintios 4,3
Hubo por esos tiempos un curioso personaje llamado Dios Thot. De hecho, no tenemos ni remota idea de quien era en realidad ese "Dios" con tronco humano y cabeza de Ibis, pero lo que si sabemos, es que fue el inventor de la escrituras, los números y un sin fin de ciencias como la Geometría, la Magia, la Astrología y el conocido como Principio del Mentalismo.
Este Dios (o como queraís llamarle) fue asimilado por la cultura griega con el sobrenombre de Hermes Trimegisto.
Él, como un buen número de Sabios, creía firmemente que no todo el mundo merecía tener acceso a la Sabiduría y por ello Codificó sus textos. De ahi viene la expresión "Hermético". Es decir, oculto, encerrado, encubierto, inaccesible...
Desde aquel lejano entonces, han sido muchos los Sabios que han seguido esta, como mínimo curiosa, tradición conocida como Tradición Hermética.
No escaparon a esta Tradición los Sabios de Israel. Pues como todo el mundo sabe, toda la Sabiduría Bíblica deriva en su práctica totalidad, de la Sabiduría del pais de los Faraones.
Hay que aceptar, pues, que los Textos Bíblicos están Encubiertos y, que evidentmente, el Evangelio no es ninguna excepción. Los Evangelios son textos que, de manera Encubierta, advierten, como el resto de las Escrituras, de la peligrosidad del Conocimiento.
Claro que hay quien podrá alegar que yo miento o manipulo, que esto no es así, y que el Evangelio es, bajo ningún tipo de dudas, un Libro de carácter histórico. Mis amigos (personales) cristianos con quien siempre
-amigablemente- discuto, me dicen "!no es verdad! !no está encubierto!"
Está claro entonces, que, alguien, quizás yo, va muy equivocado.
En fin, tiempo al tiempo.
Buenos días.
“Que si todavía nuestro Evangelio está encubierto,
es solamente para los que se pierden, para quienes
está encubierto.”
2 Corintios 4,3