Re: Yo erá hija del Islam
[font=Verdana, Arial, Helvetica, sans-serif][size=+2]Anwar Shaikh: Un crítico del Islam[/size][/font]
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[/size][/font][font=Verdana, Arial, Helvetica, sans-serif][size=-1][size=+1]Entrevista por Ibn al Warraq[/size][/size][/font]
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Anwar Shaikh nació siendo musulmán. Ahora vive en Gran Bretaña y ha publicado cuatro libros sobre los peligros del fanatismo religioso, enfocándose principalmente en el Islam. La entrevista de Ibn al Warraq con Shaikhy revela las dificultades que Shaikh tuvo con sus creencias y que lo hizo ser humanista.
El sábado 21 de octubre de 1995 aparecieron los siguientes titulares en el diario, The Daily Sadaqat, en Lahore, Pakistán:
-‘Todos los clérigos pakistaníes exigen la extradición del renegado Anwar Shaikh de Gran Bretaña para ahorcarlo públicamente.’
-‘Un renegado debe ser asesinado –esta es una regla fundamental de la ley islámica- Anwar Shaikh debe ser regresado, algún amante del Profeta va a matarlo- América protege a todos los que insultan al Profeta.’
-Si él (Anwar Shaikh) no es eliminado, más Rushdies aparecerán. Es un apostato para negar al cielo, al infierno, a la revelación, al Corán, al Profeta y a los ángeles. Los musulmanes del mundo están listos para destruir al renegado acusado para defender la magnificencia de su Profeta.’[/size][/font]
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Aquellos de nosotros que temimos que la sombra del Conflicto Rushdie caería en todos los intentos subsecuentes de criticar esta muy criticable religión tuvimos una grata sorpresa, no sin mencionar asombrados, al encontrar que alguien abiertamente se había atrevido a rechazar el fascismo religioso en la forma del Islam. Anwar Shaikh, en tres libros publicados por su propia cuenta desde febrero de 1989, la fecha de la infame fatwa contra Roshdie, denuncia al Islam con términos contundentes: ‘Eternidad’, ‘Fe y Decepción’ e ‘Islam: El Movimiento Nacional Árabe. Anwar Shaikh terminó de escribir ‘Eternidad’ mucho antes de que Roshdie apareciera en escena. No pudo publicarlo antes - por falta de medios.
Me encontré con el nombre de Shaikh por primera vez en internet, donde también obtuve su dirección. Le escribí que, por fin, había encontrado un alma gemela –un ex musulmán dispuesto a criticar su antigua religión. No me decepcioné. Me reuní con él un mes más tarde en su muy cómodo y espacioso hogar en los suburbios de Cardiff. Anwar es un hombre grande, afable de gran calidez, humor y obvia valentía. Pasando los setenta años, tiene problemas de salud, ha tenido siete operaciones del corazón y rara vez sale de su casa. No sólo me mostró su vino hecho en casa –‘¿Le gusta el vino? Ah, bien, bien, entonces usted es un verdadero humanista,’- sino insistió en que me llevara la garrafa de varios litros a Londres. Pasa mucho tiempo escribiendo, -no sólo contra el islam sino también poesía hermosa en Urdu que publica en su revista ‘Liberty’,
Anwar Shaikh se preocupa del futuro secular de Gran Bretaña. Como dijo en una entrevista en 1995. ‘ Gran Bretaña es mi hogar y a menos de que se haga algo sobre el fundamentalismo musulmán va a ver una enorme quinta columna en nuestro medio. Inglaterra debe despertar. Ustedes (los británicos) pasaron cientos de años eliminando al fundamentalismo cristiano de este país. No permitan que vuelva el fundamentalismo.’
Anwar Shaikh tiene un historia personal que contar, confesar, expiar, que es fascinante, horripilante, trágica y enaltecedora al mismo tiempo. Sería una pena revelar todo de una vez. Mejor, dejaré a Anwar Shaikh narrarla lentamente en sus propias palabras, grabadas durante una entrevista el 14 de mayo de 1997.[/size][/font]
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Primeros años
Nací el primer día de junio de 1928, en una villa cerca de la ciudad de Gujrat (en el actual Pakistán). Ese día era el día de Hajj (o peregrinaje). Mi familia consideró esto un buen presagio ya que el Hajj es una de las ceremonias más sagradas del islam, así que me llamaron Hajji Muhammad. Ese fue el primer nombre que se me dio, pero también nací circuncidado, y esto era visto como un mejor presagio por lo que me cambiaron el nombre de Hajji Muhammad a Muhammad Anwar. Anwar significa: radiante. Esto fue lo que les hizo darme una buena educación islámica. Creyeron que yo estaba destinado a ser un adalid del islamismo.
Nací y crecí respirando islam. Mi madre no sólo era profundamente religiosa sino una erudita del islam. Podía recitar por lo menos la mitad del Corán de memoria. Hizo todo lo que pudo para enseñarme lo que sabía. Mi abuelo paterno era muy académico y religioso y además de eso el hermano menor de mi abuelo era un sacerdote musulmán profesional, un Mullah, así que estuve bajo su cuidado también.
Sin embargo, no me enseñaron la gramática árabe. Apenas empecé a aprender árabe en sexto año y mi maestro de árabe era casi nuestro vecino de a lado. Obtuve mi matrícula en 1946, amando por el momento al islamismo. Durante ese periodo conocí los trabajos de Hadith, las tradiciones islámicas, coleccionadas por renombrados académicos como Bukhari, Muslim, Ibn Majja y otros. También tuve la suerte de encontrar muchos libros sobre la cultura e historia árabe y el famoso comentario sobre el Corán por Maulana Abul Kalam Azad.[/size][/font]
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Lahore 1947: Independencia y …
Lamento decir que 1947 fue el periodo más oscuro de mi vida. Nos dijeron que asesinar a los que no eran musulmanes, seducir a sus esposas y quemar sus propiedades eran actos de la Jihad, la guerra santa. Jihad es la labor más sagrada de un musulmán porque le garantiza un boleto seguro al paraíso donde no menos que 72 huríes, las más hermosas vírgenes y muchachos como perlas los esperan. ¡Tal recompensa es una gran tentación!
Fue durante la primera semana de agosto de 1947, cuando fui el encargado de las cuentas en la oficina de trenes en Lahore que vi un tren llegar de Punjab del este. El tren estaba lleno de cuerpos mutilados de musulmanes, hombres, mujeres y niños. Tuvo un efecto horrendo en mí. Cuanto me fui a mi casa le pedí al Señor que no olvidara mi parte de houris y niños. Esto ocurrió en verdad, en realidad recé y luego tome un bastón y un cuchillo largo y fui a buscar no musulmanes. Esos días son recordados por los toques de queda y todos estaban aterrados de los demás. Encontré dos hombres, no musulmanes, padre e hijo. El padre tenía como 50 años o menos. Maté a los dos. Al día siguiente no fui a trabajar. Me sentía nauseabundo pero quería matar más no musulmanes. Me encontré otro no musulmán en Darabi Road y lo maté también.
Frecuentemente los recuerdos de esos terribles días me atormentan, me siento avergonzado y muchas veces he llorado lágrimas de remordimiento. Si no hubiera sido por mi fanatismo, incitado por las tradiciones islámicas, esa gente seguiría viva hoy y tal vez no sentiría la culpa que tengo.
¿Quién me dijo que el acto de Jihad, el acto de matar no musulmanes es bueno? Bueno, si usted lee el Corán, lo encontrará en cierta sura, Dios dice que ha comprado las vidas de los musulmanes a cambio de las recompensas del paraíso. Matan y se matan en este esfuerzo de guerra, y la recompensa para estos musulmanes es el paraíso y el paraíso es un jardín enorme habitado por las más hermosas vírgenes, que viven en palacios y hay innumerables muchachos como perlas para servirlos.[/size][/font]
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http://amer.humanists.net/Anwar1.html[/font]