Hola a todos.
Dice el hno ITorres, que diezma: “para recibir la bendición de Dios”.
2 Corintios 9
6 Esto empero digo: El que siembra escasamente, también segará escasamente; y el que siembra en bendiciones, en bendiciones también segará.7 Cada uno dé como propuso en su corazón: no con tristeza, ó por necesidad; porque Dios ama el dador alegre.8 Y poderoso es Dios para hacer que abunde en vosotros toda gracia; á fin de que, teniendo siempre en todas las cosas todo lo que basta, abundéis para toda buena obra. 9 Como está escrito: Derramó, dio a los pobres; Su justicia permanece para siempre.10 Y el que da simiente al que siembra, también dará pan para comer, y multiplicará vuestra sementera, y aumentará los crecimientos de los frutos de vuestra justicia. 11 Para que estéis enriquecidos en todo para toda bondad, la cual obra por nosotros hacimiento de gracias a Dios.
Una nota importante es, que en el “nuevo pacto” no hay “maldiciones”, como habían en el viejo; pero dice: “El que siembra escasamente, también segará escasamente”.
Adicionalmente, dice el hno ITorres, que el diezma para: “ayudar con mi granito de arena a engrandecer la obra de Dios”.
Y a eso respondo:
Leamos Hebreos 7:5: “Ciertamente los que de entre los hijos de Leví reciben el sacerdocio, tienen mandamientos de tomar del pueblo los diezmos, según la ley, es decir de sus hermanos, aunque éstos también hayan salido de los lomos de Abraham”.
Te pregunto, hno ITorres: ¿son los pastores hijos de Leví?; ¿son sacerdotes en ese orden?; ¿tienen mandamiento según la ley, para recibir el diezmo?; ¿sus hermanos, que dan el diezmo, han salido del “lomo de Abraham”?; ¿está la ley vigente para el cristiano?.
Es evidente, que las respuestas para todas esas preguntas, son negativas.
Ahora bien, el diezmo tenía su función, en el ministerio judaico; pero, ¿quién le asignó la función de “mantener los ministerios”, en el ministerio cristiano?.
El ministerio de Pablo, y los demás Apóstoles, ¿se sostenía con diezmos de la iglesia?.¿Porqué no hizo falta, apelar a ese sistema caduco, en la iglesia apostólica?.
Y la razón es bien obvia, no lo consideraban un mandamiento para los cristianos.
Aclaro, que estoy totalmente de acuerdo con el sostenimiento de la obra de Dios, por nosotros. También con lo que Pablo dijo: “El que trabaja en el evangelio, que viva del evangelio”. Es un mandato cristiano. Pero, eso no autoriza a nadie, a decretar el uso de un “diezmo cristiano”, como uno de los deberes de nosotros. Esa es una aberración bíblica.
Ahora bien, estoy de acuerdo en que por decisión personal, cualquier hermano puede acogerse a ese sistema, para dar en forma sistemática. Lo repito: “decisión personal”. Pero, no puede enseñarse eso como regla general a seguir por la hermandad; que es precisamente donde se ha caído en muchas congregaciones cristianas.
¿Necesitaba dinero, la iglesia cristiana primitiva, para sobrevivir?. La respuesta es afirmativa, y hay evidencias bíblicas suficientes.
¿Hay diferencia en ese aspecto, entre ellos y nosotros?. La respuesta es negativa, porque en todas las épocas se ha necesitado dinero por igual. Por el contrario, en esa etapa, había mucha mayor escasez que ahora. Pero, en el fondo es lo mismo: necesidad de dinero para la obra.
Ahora bien, ¿si esa iglesia primitiva, no utilizó el diezmo para financiar sus actividades misioneras, porqué debemos hacerlo nosotros ahora?. ¿Tenemos más necesidades que ellos?.
Obviamente, no se puede acudir al expediente de las necesidades de dinero, para justificar la “rehabilitación” del diezmo.
Entonces, ¿qué hacer?. Pienso, que lo mismo que hacían esos cristianos primitivos: Suministrar todo lo necesario para la obra del Señor. Sin necesidad de apelar a la imposición de mandatos no bíblicos, para los cristianos.
Dios les bendiga. Saludos.
Billy Vicente