[h=2]El Cuarto Mandamiento[/h]
Ex. 20:8 Acuérdate del día de reposo para santificarlo.
Hermanos, ya es tiempo que nos guardemos en nuestro corazón este gran mandamiento que es no inquietarse por nada ni por nadie, no sentir nunca miedo -solamente un sano temor de Dios- y sobre todo descansar por las noches orando y velando. Esa es la mejor forma de cumplir con esta sagrada encomienda que el buen padre Dios nos impuso porque el tiempo del regreso de Jesucristo es virtualmente ya.
...y es revelación:
Ap. 14:12 Aquí está la perseverancia de los santos que guardan los mandamientos de Dios y la fe de Jesús.
1 Juan 2:3 Y en esto sabemos que hemos llegado a conocerle: si guardamos sus mandamientos.
Hermanos, recuerden lo más posible todo lo que hemos leído, escrito y soñado en estos años, esta es el verdadero camino que nos señala la Biblia; orar y velar pues algunos de nosotros ya despertamos y Dios nos está avizando... a diario lo puedo asegurar.
El fin viene porque otros, muchos otros no saben o no obedecerán nunca la voluntad del Padre y del Hijo, y el mal avanza a grandes pasos; la guerra en medio oriente, la apostasía creciente, la falta de valotres éticos y morales en la sociedad, y lo más peligroso es que dentro de nuestras iglesias y ministerios ronda el mal evitando a toda costa que los elegidos crean a la verdad. Hay que entender que si no le sirven a Dios -y oran y velan para tener fe en lo que viven y sueñan - le sirven al diablo, así es la realidad de las cosas en los postreros días y cuando todo comience ellos serán los enemigos de la humanidad porque saldrán de los templos para iniciar la cacería. Porque le seguirán sirviendo a su amo cruel mentiroso. Nosotros hay que entrar de una vez en el secreto descanso de Dios para protegernos de lo que viene sobre el mundo entero. Es la mejor manera de santificar el nombre del Señor y de merecer el cielo al lado de los justos en luz, a Dios sea la gloria por los siglos.
Juan 16:3 Y harán esto porque no conocen al Padre
Ex. 20:8 Acuérdate del día de reposo para santificarlo.
Hermanos, ya es tiempo que nos guardemos en nuestro corazón este gran mandamiento que es no inquietarse por nada ni por nadie, no sentir nunca miedo -solamente un sano temor de Dios- y sobre todo descansar por las noches orando y velando. Esa es la mejor forma de cumplir con esta sagrada encomienda que el buen padre Dios nos impuso porque el tiempo del regreso de Jesucristo es virtualmente ya.
...y es revelación:
Ap. 14:12 Aquí está la perseverancia de los santos que guardan los mandamientos de Dios y la fe de Jesús.
1 Juan 2:3 Y en esto sabemos que hemos llegado a conocerle: si guardamos sus mandamientos.
Hermanos, recuerden lo más posible todo lo que hemos leído, escrito y soñado en estos años, esta es el verdadero camino que nos señala la Biblia; orar y velar pues algunos de nosotros ya despertamos y Dios nos está avizando... a diario lo puedo asegurar.
El fin viene porque otros, muchos otros no saben o no obedecerán nunca la voluntad del Padre y del Hijo, y el mal avanza a grandes pasos; la guerra en medio oriente, la apostasía creciente, la falta de valotres éticos y morales en la sociedad, y lo más peligroso es que dentro de nuestras iglesias y ministerios ronda el mal evitando a toda costa que los elegidos crean a la verdad. Hay que entender que si no le sirven a Dios -y oran y velan para tener fe en lo que viven y sueñan - le sirven al diablo, así es la realidad de las cosas en los postreros días y cuando todo comience ellos serán los enemigos de la humanidad porque saldrán de los templos para iniciar la cacería. Porque le seguirán sirviendo a su amo cruel mentiroso. Nosotros hay que entrar de una vez en el secreto descanso de Dios para protegernos de lo que viene sobre el mundo entero. Es la mejor manera de santificar el nombre del Señor y de merecer el cielo al lado de los justos en luz, a Dios sea la gloria por los siglos.
Juan 16:3 Y harán esto porque no conocen al Padre
